Blood of Midnight (Sangre de medianoche)

Epílogo

-¡Maya! -gritaba Kim en su inconsciencia.

Ella no está aquí.
<<Cállate, tú no existes>>.
Entonces explícame por qué sigo hablando.

Pero antes de poder responderle, se sumergió en la oscuridad.

-¿Kim? ¿Kim? Por favor, despierta -decía Nicolás meciendo a su amiga en sus brazos esperando a que respondiera.
-Mhm.

Despiértate.

-¿Nico? -preguntó abriendo los ojos.
-Uff, por los seres estás viva. ¿Qué mierda pasó?

Ella se sentó despacio sintiendo que el ataque de la noche anterior la seguía azotando de lado a lado y... los gritos de Maya, su amada amiga, siendo secuestrada.

-¡Maya! -gritó desesperada poniéndose de pie -. Está en peligro.
-Te cuidado -dijo Nico tomándola de la mano al ver que se estaba tambaleando de lado a lado.

No puedes hablar de esto.
<<Dije que te calles>>.
Eres insoportable... Solo ve el maldito papel en tu bolsillo de una vez.

Kim, como única vez, obedeció metiendo una mano en el bolsillo de su pantalón; efectivamente hay un papel.

-Nico -él la miró -, ¿podrías darme un vaso con agua, por favor? Siento que tengo la boca como lija.
-Tranquila, ya vuelvo.

Y se fue caminando a su cocina.

Léelo, yo te aviso cuando se acerque.
<<Vale>>.