Aquel día vimos el amanecer desde la cama, cubiertos únicamente por la sábana, yo sentada de lado entre sus piernas.
De repente, Katsuki gruñó.
- Tsk. Se suponía que tenías que recuperar horas de sueño, maldita sea.
- No pasa nada - le sonreí - Hoy tengo turno de tarde. Puedo dormir un poco... después - mi expresión cambió.Me di cuenta de que en ese "después", él ya no estaría conmigo. Katsuki se percató de lo que pasaba por mi cabeza y besó mi frente.
- No me acompañes a la estación, ¿ah? - murmuró con ternura.
Asentí. A ninguno de los dos nos gustaban las despedidas dramáticas.
Sus brazos me estrecharon más contra él e intenté sonreírle de nuevo sin demasiado éxito. Rodeé su cuello y le abracé con fuerza, respirando profundamente mientras nuestros labios se buscaban.
- ¿Quieres desayunar? - pregunté sin muchas ganas.
Puso cara de asco, ambos teníamos el estómago un poco revuelto por la bebida de la noche anterior.
- ¿Hacemos café? - sugirió sin demasiado entusiasmo.
- Eso sí - bostecé.Me sonrió, acariciando mi cabeza y salimos de la cama. Como siempre, yo me puse una de sus camisetas.
Cuando el café estuvo listo me senté sobre la mesa de la cocina y Katsuki se quedó de pie delante de mí.
- ¿Esta noche vais a volver a quedar, verdad? - frunció el ceño, dando un sorbo a su taza.
- Sí- le reconocí. No tenía sentido tratar de ocultárselo.Resopló, nada conforme con la respuesta.
- Voy a estar bien - traté de sonar despreocupada.
- Más te vale.Katsuki terminó y fue a hacer el equipaje mientras yo recogía un poco la cocina, intentando no llorar. Cuando acabé y llegué a la habitación él ya estaba cerrando la maleta.
- ¿Lo llevas todo? - pregunté apoyándome en el marco de la puerta, disimulando la tristeza.
Me miró fijamente y se acercó para acariciar mi mejilla. Me di cuenta de que todavía llevaba puesta su camiseta.
- Es verdad, toma - hice ademán de quitármela.
- No te miraba así por eso, idiota. - me abrazó deteniéndome - Quédatela - murmuró hundiendo la cabeza en mi cuello.Sus labios recorrieron mi cuello y mi mentón hasta llegar a mi boca. Me besó dulcemente, con mucho amor.
Recogió la maleta y se encaminó hacia la entrada. Me miró intensamente, suspirando.
- Buen viaje. Avísame cuando llegues, ¿vale? - tragué saliva, aproximándome a él.
- Tsk, maldición, tranquila, que no me voy a perder - me sonrió burlón.Volvimos a estrecharnos el uno contra el otro y Katsuki abrió la puerta, dándose la vuelta para irse.
- Katsuki - sujeté su mano apresuradamente.
Se giró y me miró confuso.
- Aún me queda un deseo - le sonreí.
- ¿Qué quieres, ah? - acercó su cara a la mía.
- Que no pasen otros dos meses hasta que pueda volver a hacer esto - mis labios se posaron sobre los suyos apasionadamente.
ESTÁS LEYENDO
Hazme explotar 2 (Katsuki Bakugou y tú)
FanfictionBakugou Katsuki y ___ están juntos desde su primer curso en la U.A. Pero ahora, la vida como héroes profesionales empieza para ellos. Y es dura. Muy dura. Los acontecimientos arrastrarán a ____ a tomar decisiones difíciles. Tal vez, incluso, la má...