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- Joder -dice emocionado- estás vivo

El Alfa no podía creer lo que estaba viendo, aquel beta parado frente a él y libre, vagando por su pueblo.

- ¿Escapaste?

- Ow pobre Joel -hace un puchero- ¿Erick te sigue ocultando cosas? -lo mira extrañado- Él me soltó

- Mientes

- Salve la cosecha y me dejó libre, es más somos grandes amigos

Johann sabía dónde hacerle daño a Joel.

- Sabes ahora Joelito me dice tío

Joel tenía una carácter muy fácil de romper, a pesar de los años no podía controlarlo, si alguien tan siquiera mencionaba a su familia lo pagaría caro, más si era su propio hijo o su Omega.

- Eres un maldito -dice enojado- te mataré

Joel camina hacia él sin pensarlo.

- No te acerques -saca una pistola logrando que el Alfa se detenga- es de plata y la diseño tu amorcito -rie- todo lo que hace es letal, lo sabes ¿Verdad? -el Alfa asiente precavido- me encanta que nos estemos entendiendo

Joel quería atacarlo y matarlo ahí mismo, sin embargo sabe que una bala de plata si no se atiende rápido es mortal y estando en la Colina sin que nadie esté enterado, lo mataría en pocas horas. Trata de controlarse y no dejarse llevar por su Alfa, porque podría arruinarlo todo.

Pero que era lo que realmente sucedía, porque Johann estaba ahí con él y no con Erick en el pueblo.

- Buen chico -se burla- antes de que preguntes te lo diré -se sorprende- te conozco Joel, Erick siempre hablaba de ti cuando llegaba de la escuela -rueda los ojos- quejándose y diciendo lo insoportable que eras -no baja el arma- ahora míralo esta enamorado de ti, bien dicen del odio al amor hay un solo paso -suspira- gran historia, pero esta no tiene un final feliz -Joel solo lo mira-

En definitiva si era un maldito desgraciado, que no tenía respeto por las personas.

- Joel, estás vivo y Erick te oculta del consejo ¿Qué crees que le harán cuando se enteren?

Iría a prisión sin duda.

- No te atreverías -gruñe bajo-

- Claro que sí, me encerraron por más de dos en una prisión y no lo merecía

- Me disparaste -frunce el ceño- era lo justo, da gracias que Erick no te mato como a los demás

- Me dejo sin mi hermano y también me dejó sin Clan, deje todo por él -habla molesto- y no le importó porque estaba contigo -se acerca enojado- no debí fallar -niega- no debí fallar -repite- y si te hubiera matado Erick se hubiera ido conmigo

- Dime Johann ¿Ahora sí lo harás? -Joel se acerca dejando que la pistola roce su pecho- ¿Esta vez no fallarás?

Joel no tenía miedo y menos de un beta, claro que no dejaría que lo matará, pero tampoco quería actuar por instinto, necesitaba meditarlo bien.

- No -retrocede- como sabrás, Yoandri está muerto, escuché lo que te dijo Erick -lo mira extrañado- tú lo mandaste matar

- Eso no es verdad

- Lo es -sonríe- entrégate, mataron a un Omega del Clan Cabrera en el Clan Pimentel, ¿Sabes a quien culparan, cierto?

Maldito hijo de perra, pensó Joel.

- Yo no lo mate -defiende-

- Tampoco Erick, Joel, ¿Dejaras que lo culpen de algo que él no cometió? -no dice nada- los Cabrera llegarán por la mañana y sé por buenas fuentes que él consejo viene con ellos

- Eres un idiota si crees que haré lo que tú me dices

- No, el idiota eres tú -repega el arma de nuevo- quiero a Erick y si no te entregas yo mismo le diré al consejo que estás vivo y de todas maneras irás a la cárcel, la diferencia es que si te culpas de él asesinato solo serás tú y no Erick, en cambio con la traición hasta tu hijo se irá a un orfanato

Tenía razón.

- ¿Eso lo que quieres Joel?

Siempre que había esperanza de volver a estar juntos, algo tenía que pasar para no estar con Erick; eran almas gemelas, pero al parecer el destino se empeñaba en separarlos.

- Es tu decisión Joel

Johann baja el arma, sabía que no actacaria, no ahora que estaba enterado del peligro que Erick y su hijo corrían

- La vida y el futuro de Erick están en tus manos

Se miraron por última vez, ambos conocían la decisión que tomaría. Johann dio la media vuelta para regresar al pueblo, dejando a un Joel entre la espada y la pared.

Si se presentaba arruinaría el plan de Erick y si no lo hacía Erick iría a prisión de todos modos. Era una difícil decisión y no había tiempo para pensarla.

Erick llegó a la casa agitado después de haber atravesado todo el bosque y parte del pueblo, se hizo de mañana y buscó a Zabdiel.

- Zabdiel -grita-

- Erick -chocan-

- ¿Dónde estabas? -dicen al mismo tiempo-

- Te estaba buscando -repiten- okay tu primero -dice Zabdiel-

- Sé que sonara loco -habla aún agitado- pero sé quién mato a Yoandri fue...

- Johann

- Exacto -frunce el ceño un tanto extrañado- espera -señala- ¿Tu como lo sabes?

- Me lo dijo Yoandri, antes de que tu llegarás

- ¿Y porque no me dijiste? -habla enojado-

- Pues cuando te busqué ya no estabas ¿A dónde fuiste?

Erick la había cagado, sin tan solo hubiese esperado unos minutos no había culpado a Joel de la muerte del Omega.

- Fui a la Colina, con Joel -susurra lo último- le dije, yo, yo creí que él lo había matado

- ¿Se han estado viendo todo esté tiempo?

- Si, pero eso no importa, tenemos que encontrar a Johann

- Lo voy a matar

- No -interrumpe- lo haremos caer en su propio juego

Se escuchan unos pasos corriendo hacia ellos.

- Joven Erick -habla agitado- el consejo viene por usted

Intercambian miradas alarmados.

- ¿El consejo? -asiente- ¿Dónde están?

- En la plaza -trata de respirar- los soldados no los dejaron entrar más, hicieron una barrera

- Vamos

- Erick -Zabdiel lo detiene- esto no está bien, si el consejo vino es por algo

- Tranquilo Zabdiel, puedo con esto

- Es cierto -interrumpe- Los Cabrera dicen que usted mato a su hijo
























¿Qué hará Joel?
¿Creen que lo que hace Johann tiene justificación?
Les leo

Voten y comenten mucho para otro capítulo

All the love ❤️

Destinados ||Joerick||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora