Un final feliz. Fred Weasley y tú.

Suerte líquida

En clase de pociones el profesor nos explica que la suerte líquida hará que tengas éxito en todo mientras dure el efecto de la poción. Como soy la primera en acabar de hacer sus tareas y lograr elaborar una poción yo sola, el maestro me da de regalo un poco de suerte líquida, así que la guardo en mi bolsillo y me dirijo al gran comedor para el almuerzo, la segunda prueba del torneo será pronto y por eso quiero estar cerca de Cedric para ayudarlo cuando lo necesite.

Justo a él es a quien me encuentro en el pasillo.

-Hola, _____, necesito un favor- Me dice Cedric

En ese momento veo a lo lejos a los gemelos Weasley caminar hacia nosotros.

-Sólo dame un segundo- Le pido a Cedric mientras abro el frasco con la poción que me regaló el profesor. Después de tomármelo me acerco a Fred.

-Hola, Fred, ¿Te gustaría salir conmigo antes de la segunda prueba?- Le digo nerviosa

-Claro, me encantaría.- Me responde Fred divertido

Cuando me doy la vuelta para regresar con Cedric, Fred vuelve a hablar.

-¿_____?- Me dice él

-¿Sí?- Le digo mientras me doy la vuelta de nuevo

-No necesitabas suerte líquida para eso- Me dice mientras me guiña el ojo.

Estoy tan feliz que no puedo dejar de sonreír, Cedric se emociona por mí al ver la escena, pero vuelve a lo que quería decirme. 

-Necesito que le digas a Harry que lleve el huevo al baño de los prefectos del quinto piso.- Me pide Cedric

-Claro, yo le digo, no te preocupes. ¿Estás listo para la siguiente prueba?- Le pregunto preocupada

-No te alarmes por mí, voy a estar bien, ganaré el torneo y compartiré el premio con mi mejor amiga.- Me contesta abrazándome

Después del almuerzo busco a Harry para decirle lo que Cedric me pidió, a lo que él me agradece confundido.

-Pero... ¿Qué debo hacer?- Insiste Harry confundido

-Ya te dije que no sé, es todo lo que dijo, además no soy una lechuza- Le digo exasperada

-Bueno, lo haré, gracias. - Dice Harry y me despido para ir a mi siguiente clase.