Capitulo 48: ¿Quién manda ahora?

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Athanasia ya se había ido a dormir al igual que el resto, o eso pensaban.

-Oye, Tanatos, es pusiste un hechizo a varias personas ¿verdad?

-Tan perspicaz como siempre Romo.

-Hmmm, ¿de qué se trata el hechizo?.

-Simple, los humanos que dicen ser "ministros del emperador" se volverán locos, pero solo cuando estén con el, y nadie a demás de mi puede deshacer el hechizo.

-¿Athanasia se dio cuenta?.

-Hmmm, lo más seguro es que si, pero da igual.

-Bueno, tenemos que esperar, ya quiero ver a esos humanos.

-JAJAJA, yo igual.

-Nadie se atreve a hablarle a Athanasia de esa forma.

-Hmmm creo que yo también voy a hacer pasar a Obelia con algunas dificultades.

Y así Romo lanzó un hechizo, no lloverá durante mucho tiempo en Obelia, y los peses ya no estarán a la vista de los humanos.

Romo decidió que era tiempo de demostrar quien manda.

Y por su puesto, los que mandan son los Dioses.




------------------------Al día siguiente-------------------------------

-Princesa, es hora de entrenar.

-Esta bien, maestro Alucard.

-Con Alucard está bien princesa.

Y en eso llegó Félix, ya que todos entrenan juntos, pero aún así el no sabe del verdadero poder de la "dulce y frágil princesa".

-Buenos días Sir. Felix.

-Buenos días Princesa, Sir. Alucard.

-Con Athanasia está bien

-Con Alucard está bien.

Ambos lo dijeron al mismo tiempo, provocando una pequeña risa.

-Esta bien señorita Athanasia y Alucard.

-Hmmm, vamos al entrenamiento.

Y así fue, Athanasia nisiquiera estaba sudando, mientras que el pobre cachorro aduras penas podía respirar.

-Pobre alma en pena en la que se convirtio el señor Félix...

-Señor Alucard, no me diga asi....

-Pero eso es lo que pareces cachorrito.

-jajaja prometo que voy a mejorar.

-Lo tiene que hacer Sir. Felix, si quiere ser un guardia de la princesa debería de ser más fuerte.

-Hmmm, supongo que tengo que hablar de algo que odia la princesa.

-Alucard, dime qué no es eso.....

Félix estaba aún extrañado, la princesa estaba pálida y realmente ella no era el tipo que se asustaba por pequeñas cosas.

El pelirrojo autos estaba ansioso por saber de qué trataba todo esto.

-Hmm, parece que Félix está ansioso.

-Parece que si señorita Athanasia.

-Supongo que se va a desilusiónar demasiado....

-Bueno, de lo que trata todo esto, es muy simple.

-Debido a que usted también es un guardia de la princesa, y mi alumno, se le va a tomar una prueba.

-Lo que va a pasar es simple.

-Si pasa la prueba todo estará bien, pero si no lo hace.....

Y en esas pequeñas palabras Alucard puso una sonrisa burlona y fría.

-Pues fácil, si no pasa la prueba, va a tener más horas de entrenamiento, tantas que no va a saber si está vivo o muerto.

-Esto no es negociable, si quiere ser su guardia lo tendrá que hacer.

Félix aún no decía nada, pues aún se estaba recuperando, mientras que la princesa lo veía con mucha lástima, e inclusive dijo:

-Ahhh mi querido Félix, prometo llevar flores en tu tumba.

-Prin...pri... princesa, no diga eso....

-E..es u..una sim..si.. simple prueba.

-¿Qué...podría......pasar?

-La pregunta es que no podría pasar, Tío.

-Princesa, no debería sentir pena ajena.

-Usted también tendrá su examen.

-Retiro lo dicho, devuélveme ni lástima Félix.

Y entre risas Athanasia soltaba pequeñas lágrimas falsas.

Y no tenían ni la remota idea de los que ocurría en Obelia.



























F
Prometo, mañana dar un cap largo :^

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