𝕮𝖍𝖎𝖈𝖔𝖘 𝕹𝖚𝖊𝖛𝖔𝖘 ➳ ᴄ & ᴅ ꜱᴘʀᴏᴜꜱᴇ © ✔

🌸 Epilogo 🌸

  No podía sentir mis huesos, corrí mi mano de donde sea que estaba apoyada pero solo logre poder mover mi dedo índice. Me sentía débil, el dolor de cabeza se apoderó de toda mi anatomía. Trate abrir mis ojos pero tuve que hacer más fuerza de la que requería. Parpadee un par de veces para acostumbrarme a la luz y con los ojos entrecerrados recorrí con mi vista la blanca habitación en la que me encontraba. Habían bastantes maquinas, no para exagerar, pero las habian.  Tarde en darme cuenta que me encontraba acostada en una camilla de hospital con una mascara de oxigeno en mi nariz y boca. Simplemente no entendía el porque, ayer estaba bien, ¿Lo estaba?

 La puerta se abrió y una enfermera pasó a la habitación. Abrió sus ojos mostrándose sorprendida a la vez que sonreía abiertamente y sin decir nada salió de la habitación para segundos después venir con otros médicos. A este paso iba a morir de la curiosidad ¿Por qué estoy en un hospital?

—Debby, nos alegra demasiado que hayas despertado— Observe con curiosidad al doctor se cabellos blancos con una bata del mismo color que su pelo y una libreta en sus manos—. Ya le avisamos a su familia la noticia, están en camino. ¿Cómo se siente?

Baje mi mascara de oxigeno y tosí antes de acostumbrarme al cambio de aire— No entiendo nada— Mi voz salió rasposa y dura de mi garganta, me dolió tan solo decir esas tres palabras, como si no hubiera hablado en años.

—Tuvo un accidente, hace dos años, entró en un coma a causa del impacto.

¿Un accidente? ¿En coma? ¿Dos años? ¿Dónde está Cole? ¿Dylan? Ellos estaban conmigo la ultima vez que los vi.

Mis padres ingresaron a la sala con lágrimas en sus ojos y sonrisas las cuales nadie les podía quitar— ¡Debby!— Chillaron mis hermanos mostrando sus envidiables dientes blancos y perfectos.

—¿Un accidente? Pero yo estaba en Los Ángeles ayer, no en un hospital— Hable como pude para no lastimar mi garganta, ya bastante que me dolía al hablar.

—Habrá tenido un sueño, usted está aquí, en el hospital de Nueva York hace dos años desde que tuvo el accidente— Dijo el doctor. Desvié mi mirada hacia la ventana. ¿Acaso todo fue un maldito sueño y nunca conocí a los gemelos?

Es definitiva, quiero morirme.