M A G I C S H O P ;; 태국 ✓.

[14] magic shop

En el aula, JungKook tomó asiento junto a su amigo, YuGyeom. Sólo compartían dos clases, literatura [actual] y artes. YuGy notó a su menor un poco extraño, más que de lo normal.

Estaba por hablarle, pero el cabello de menstruación llegó a su lado. Robando la atención total de JungKook. Le regalo una sonrisa al mencionado, mientras veía a su primo con superioridad al notar el sonrojo de Jeon y su sonrisa tímida.

—hola, Kookie. Hola, YuGyeom.

—hola, TaeHyung Hyung. —respondió seco el otro kim.

— TaeTae. —fue el turno de JungKook para hablar. Miro cada facción de su pequeño, su piel blanquecina, sus grandes y expresivos ojos, tan dulce como la miel. Sus labios, rojizos y carnosos. Tan apetecibles cómo un delicioso chocolate. Tae no supo cuanto tiempo se quedó viendo sus labios, ni mucho menos cuando se había acercado.
Vio el rostro de kook, con un fuerte sonrojo y de igual manera viendo los labios del mayor.

Kim dejó un beso rápido, más bien dicho un pico en los labios de kook. Algo que, según el [y lo que había contado su abuela] eran muestras de cariño de amigos. Era sólo un pequeño niño, así que lo hizo. Miro con falsa inocencia a Jeon. Claro, creció y sabía que ahora tenía otro significado, y no iba a desaprovechar la oportunidad de besarlo.

Llamenlo aprovechado, pero. ¿Ustedes no harían lo mismo?. JungKook, con su apariencia inocente, como un bebé.

Oh pero Tae, si tan sólo supieras con lo que carga tu niño. Si supieras que tu pequeño quiere morir, que tu bebé se carga la muerte de su madre y desaparición de su hermano. Tonto TaeHyung, no tiene idea de lo que causa en su menor.

Sin más, Tae tomó asiento al lado de kook.
El profesor había llegado. Miro a todos los alumnos asegurándose que estuvieran todos presentes, decidió hablar.

—bien, alumnos. Hoy tenemos un estudiante nuevo, viene desde el extranjero; tratenlo bien -dijo el tutor de los chicos, dejando al otro pasar a su clase. Robó suspiros de chicos y chicas, era completamente hermoso. —presentese a la clase, por favor —pidió.

—. Kanemoto Yoshinori. Cuiden de mí, por favor. —dijo eso con una mirada llena de seriedad, dirigiendo su vista hasta Jungkook. Logrando que el mencionado tornará su rostro de un color carmín y desviará su mirada—. Profesor. —llamó— ¿dónde me sentaré?.

El mayor le indicó un lugar, detrás de JungKook. Pero Jeon estaba perdido, perdido viendo a su Hyung. TaeHyung era completamente hermoso, sus facciones.
Sus ojos almendrados, sus labios finos, sus lunares y su hermosa piel bronceada. Sus cabellos rojos caían por su frente, con su mano en su mentón. Justo como un enamorado estaba.

No supo cuanto tiempo estuvo viendo a el mayor, pero creé que lo suficiente para que el profesor, TaeHyung, YuGyeom, Yoshi, y el aula entera se enterara.

—jóven Jeon. —llamó su profesor—. ¿por qué está mirando tanto a su compañero? —el menor lo miro con vergüenza— usted sabe que las relaciones amorosas no están permitidas. —se molesto—. ¡Eso podría causarme problemas a mí! —golpeo su escritorio—. y Usted, jóven Kim. —se calmo—. ¿usted está en una relación de ese tipo con su compañero?.

— no, profesor. JungKook y yo solamente somos amigos. —respondió con seriedad. Mirando a JungKook.

—bien. Entonces le pediré a usted —señalo a kook- que deje de mirar de esa forma a su compañero, aparte de incómodar al jóven Kim.. Es asqueroso. -sí. El hombre mayor era un homofóbico.

Tanto los Kim, Jeon hicieron una mueca de disgustó. Mientras al aula [incluyendo a Kanemoto] les dio igual. Tal vez también eran homofóbicos.

En media clase, el profesor salió hasta la oficina del director. Dejando a sus alumnos solos. Comenzaron con la plática, típico de ellos, Kim pellizco un costado del estómago de su menor Jeon lo miro de mala manera, le dolió. Justo en su cicatriz.

—chingada madre contigo Kim YuGyeom ¿eso porque? —le recriminó molesto Jeon hacia su mayor.

—es que ya no me haces caso, Kookie. —hizo puchero.

—¿es por eso? —rió—. eres un tonto, YuGy —posó sus brazos en el cuello del más alto—. si era eso, me lo hubieses dicho. Y si te hago caso, baboso.

—lo sé. —sus manos se adueñaron de la cintura de JungKook. Seguía siendo tan delgada como lo recordaba. Bajo la atenta mirada de su primo, TaeHyung. Este mencionado los miraba hechando humo por las orejas. Sus manos hechas puños, rojo su rostro, ¡ese era su JungKook!. —pero así me quieres, ¿no babe? —rió por lo bajo con burla.

—si, estúpido. Así te quiero. —rió igual y se alejo del mayor con la sonrisa en su rostro. Sus ojitos brillando de una bella manera. Parecían dos luceros en la noche de Luna llena, tan brillantes y lindos. Y ni hablar de su sonrisa, tierna cómo la de un conejito, su rostro derramaba inocencia, cómo un pequeño niño.

—oye, JungKook. —llamó el mayor de los tres—. ¿tienes planes para hoy? Ó irás con ese mocoso. -le reclamo con molestia.

—TaeTae, no tengo planes.. Pero, veo que no se llevan bien, entonces.. ¿Por qué no salen ustedes dos hoy? —les invitó con una sonrisa.

— ¡NO!.

Gritaron ambos mayores al unisono.