Después de la tormenta.

2.9K 114 4
                                    


Las pesadillas habían disminuido, ya no se despertaba temblando, ya no revivía en sueños la noche que Bellatrix la torturó, ya no gritaba cada noche con la imagen de Harry asesinado por Voldemort.
Harry lo había derrotado, ellos habían ganado.

Había decidido tomar sus exámenes en Howarst junto con Ginny.

- Estás loca, le dijo Ron
Viéndola con cara de incredulidad.
- No estoy loca, Ron, pero quiero hacerlo.

Sabía que la búsqueda de los Horrocruxes y la batalla contra los mortifagos le habían enseñado más que cualquier clase en Howarst, pero tenía que hacerlo.

Luego de concluir su año en Hogwarts,
entró a trabajar en el Ministerio.

Kingsley quien era miembro de la orden del Fenix y ahora el nuevo Ministro de Magia, le había ofrecido una plaza como Aurora.
Le agradeció la oferta, pero ella le dijo que quería probar suerte en el Departamento de Control y Regulación de Criaturas Mágicas.
El Ministro se asombró con aquella decisión, pero no le negó la oportunidad.

La Casa de sus padres quedaba muy lejos del Ministerio, así que decidió aceptar la propuesta de Harry de vivir con él y Sirius en la casa de Grimmauld Place.

A Ron esta idea tampoco le había hecho mucha gracia, pero sabía que sus padres no iban a permitir que ahora que ellos eran novios vivieran juntos.
Todos sabían que ella era como una hermana para Harry, así que tomaron este hecho con total normalidad.

---------------------------------------------------------

Había tenido una buena noche, eso de no ser perseguido por un mago tenebroso resultaba beneficioso para el sueño.
Ya había terminado su práctica como Auror.

Yo sé que es una estupidez que tengas que llevar esta práctica, Harry. Tú eres el salvador del mundo mágico, pero...

No te preocupes, Kingsley. Yo no tengo problema en llevarlo.

Podía aprender cosas importantes, él no había derrotado a Voldemort solo. Sobre todo porque no iba a tener a Hermione cerca para salvar su trasero. Ron tampoco iba estar con él,  Ron había iniciado la práctica al igual que Harry, pero se retiró antes de terminar.

Antes quería ser Auror, Harry. Le dijo un día Ron. Pero después de lo que hemos vivido, no quiero pasar el resto de mi vida cazando mortifagos.

Harry podía entender la decisión de Ron, pero para él no se imaginaba otro trabajo que no fuera de Auror. Después de todo, que es de la vida sin un poco de peligro.

Estaba ahí sumido en sus recuerdos, hasta que un fuerte golpe en la ventana le hizo pegar un brinco. Una lechuza grande y gris picoteaba en el vidrio.
No le pareció una lechuza conocida, así que se acercó bastante curioso al ave, esta le entregó un sobre y sin mucha demora se alejó.

Hola Harry, mañana voy para Londres. Disculpa por avisarte así tan a la ligera, pero necesito hablar contigo, es muy importante. Te veo mañana a las 5 pm. en el callejón diagon.

Ginny.

La chica se había marchado hace un año a Irlanda para jugar como buscadora de las Arpías de Holyhead. Por los entrenamientos no habían tenido tiempo de verse. Y ahora regresaba de esa forma tan extraña y con tanta urgencia.

Sintió un vuelco en el estómago, algo malo había pasado para que ella regresara a Londres de esa manera.




Siempre tú.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora