Capítulo.4: Olor a Durazno

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El omega sintió su corazón detenerse al escuchar la voz del castaño dándole la espalda.

-Ya se que están ahí- Dijo el chico volteando a verles. Miro a su costado derecho para ver a su amigo de olor a manzana acaramelada, pero al no verlo levanto la mirada viendo como el omega corría directo a la salida del bosque bufo y antes de salir el también huyendo se sobresaltó al sentir una mano tomarle de la muñeca.

- ¿Tu amigo es muy cobarde cierto? - Dijo el chico mirando los ojos del omega quedándose hipnotizado en ellos.

- Yo... - El omega no sabía que decir por alguna extraña razón su lobo se sentía inquieto y el tenía miedo del chico frente a él - ¿Puedes soltarme? - Dijo mirando al chico incómodo.

Claro - el castaño lo soltó y miró a su alrededor encontrándose con sus amigas - No les he dicho que no traigan a lobos adolescentes aquí- se dirigió a ella y les dio una mirada de desaprobación - ¿Que te dijeron esas hadas para traerte aquí? - Dijo el chico dirigiéndose al omega, el cual lo miro confundido el chico frente a él se dirigía hacia el de una forma diferente a la de los demás lobos del pueblo y hasta del castillo.

- Nada, son mis amigas - Dijo y vio como el chico se sobresaltaba a lo potente y demandante de la voz del omega - ¿Que haces aquí?, el bosque es un lugar difícil de -El castaño lo interrumpió.

- Visitar, lo sé pero yo vivo aquí- Dijo el castaño a lo que el omega solo recordó a su amigo de infancia aquel chico del que se sentía muy feliz de haber conocido pero sus sentimientos cambiaron al recordar el día en que su padre le prohibió ir de nuevo al bosque.

- Yo, tenía un amigo que también vivía por aquí- Comento con nostalgia el omega. El chico lo miro confundido, el también recordaba a un niño omega de ojos verdes en su niñez miró más fijamente el chico delante de él y se dio cuenta que el chico tenía un cierto parecido al niño que quería mucho, necesitaba sacarse de dudas ya que a su mente vino una sola pregunta ¿Será el? Y no se quedo con ella al preguntarle al chico de ojos verdes.

- ¿Tae? - Dijo el omega lo miro sorprendido al enterarse que el chico conocía su nombre pero algo en el hizo clic era el, el niño de su infancia aquel con el que se divertía todas las tardes, al cual recordaba haberle dado un pequeño beso. El omega se rubrizo al recordar aquello.

- ¿Hobi? - Dijo a lo que el chico asintió, el omega no dudo en acercarse más al chico y al comprobar que era el abrazarlo mientras de sus ojos salían lágrimas de felicidad.

- Ummm - no pudo contener el gesto al sentir el delicioso aroma a durazno que desprendía el cuerpo del omega. El cual se sonrojo un poco al escuchar el gesto de su amigo y ocultar su rostro en el pecho de este - Tu olor es increíbles - solto el chico sintiéndose drogado al aroma del omega.

- Gracias, supongo -Dijo el omega al separarse de el, suspiro al no sentir ningún aroma desprendiendo del chico enfrente de él y se recordó que su amigo no era un lobo, haciendo que sus esperanza de al volver a ver a este ya hubiera visto a su lobo, pero no su esperanza se fue y en ella solo quedó el hecho que su amigo era un humano. El chico vio la decepción en el rostro del omega y solo bajo la mirada al saber que el omega imaginaba que el era un lobo como el.

- No busques algún indicio de ser un lobo Tae, no lo soy el tiempo límite para eso acabo cuando yo tenía 15 - Dijo pero el omega nego ya que recuerda haber leído en un libro de la biblioteca que en algunos casos el lobo de algunos está dormido hasta que su pareja destinada apareciera en su vida y quería creer que ese era el caso de su amigo y que el enverdad era un lobo. Pero no lo comento por el hecho de tener miedo a que su amigo se enojara si decía tal comentario, así que solo sonrió y volvió a abrazar al chico.

Wolf  || HopeV Omegaverse ||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora