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Jimin se dirigía a su empresa tranquilo cuando iba a tomar el ascensor un brazo lo detuvo, el omega se giró y vio al pálido. El rubio se soltó suave y apretó el botón para entrar con el pálido.

—¿Desea algo presidente Min? —pregunto sin verlo.

—Ya casi terminé los últimos expedientes para poder irme a Seúl. —respondió.

—Dejalos así. —hablo. —Minki se encargará de eso.

—Veo que ya no me quieres aquí. —lo vio.

—Pensé que te emocionarías por volver a tener tu puesto de vuelta. —tocó su vientre. —yo si fuera tú estuviera feliz de estar en Seúl y no únicamente lo digo por tu nuevo omega sino porque estar en la capital es increíble.

—Lo sé. —miró el vientre del omega.

Jimin sintió la mirada en su vientre vio al alfa y tomó la mano y la llevó ahí, Yoongi la alejó y Jimin rio.

—Si no lo quieres tocar deja de ver así mi vientre me es incómodo. —hablo. —el doctor me dijo que será alfa. —mencionó. —por su tamaño en su primer mes.

—Ya veo. —asintió el alfa.

Al abrirse el ascensor Jimin salió y se giró para verlo.

—Me llegó el mensaje que dentro de unos meses te vas a casar. —hablo. —felicidades y te deseo lo mejor en tu matrimonio.

Cuando Yoongi iba a hablar la puerta se cerró, el omega suspiro y se dirigió a la oficina, al llegar vio un sobre con su nombre. Él lo abrió y leyó lo que decía, bajo la invitación y cerró los ojos, el otro omega seguía con esa insistencia, entonces le iba a dar el gusto iría a su boda y le tendría un gran regalo.

—Después no te quejes por mi llegada. —susurro.

Las semanas pasaban como unos meses con normalidad y para Jimin ver como su empresa crecía cada vez más le alegraba mucho, no solamente había hecho unas campañas para ayudar a personas sin trabajo dándoles oportunidades, sino que había dado becas para estudiar. La vida de Jimin ya estaba tomando un curso feliz, ahora salía con Taehyung el cual era amoroso con él y le llenaba de regalos, muchos se habían sorprendido de que no le molestara el embarazo del omega.

En cuanto a la vida del alfa también tenía un curso feliz, en la sede que estaba tenía frutos positivos además que ya faltaba poco para que se casara y eso lo ponía muy feliz, pues iba a estar con el omega de sus sueños. Ese día tanto él como su nuevo omega daban un paseo por el centro comercial hasta que vieron al castaño junto con el rubio los cuales estaban sentados riendo.

—Tae. —sonrió Jimin ante los chistes malos del alfa.

—Fue divertido. —le dio un beso en la mejilla.

Jimin sonrió, pero dejó de hacerlo eso preocupó a su acompañante.

—Mochi. —lo llamó.

Jimin tomó la mano del castaño y la llevó a su vientre, la sonrisa cuadrada apareció y abrazo al omega.

—¿Lo sentiste? —preguntó el rubio.

—Sí. —respondió. —vez a Yeonki si le pareció gracioso mi chiste.

La pareja de pelinegros se acercó y arruinó la pequeña burbuja de felicidad de los otros.

—Veo que si andas urgido por un padre para el cachorro. —habló el alfa.

—También me alegro de verte Yoongi. —dijo Jimin. —también a ti Jungkook.

—Diría lo mismo, pero sería mentir. —hablo el omega.

—En eso comparto lo mismo. —se levantó Jimin con ayuda del castaño. —pero solo lo dije por mis modales y si nos disculpan Tae y yo debemos irnos tenemos algo más interesante que hacer que charlar con ustedes.

Lágrimas bajo la lluvia [Y.M] [✓]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora