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Todos estaban esperando respuestas, pues desde que el alfa castaño había entrado no sabían nada, Yoongi se había ido a la cafetería no quería estar ahí, Jungkook estaba ahí esperando respuesta junto con los padres de su alfa. Unas horas más tarde salió el alfa y se le acercaron, él los vio en su rostro se mostraba tristeza y cansancio.

—¿Cómo está Jimin? —preguntó el hombre.

—Tuvieron que sacar al cachorro de Jimin. —respondió. —al entrar me dieron a elegir entre uno de ellos.

El pelinegro omega escuchaba todo lo que decía, Yoongi regresó con la intención de llevarse al omega, pero se detuvo al escuchar todo lo que decía.

—Hice lo que pude. —los tomó de las manos.

Yoongi se acercó molesto y empujó al alfa el cual no dijo nada.

—¡Mataste a mi hijo! —gruño molesto. —no tenías derecho.

—¡Basta! —grito el castaño. —¿Ahora lo es? —grito. —¿Cuando te dije que entraras para darles fuerzas lo hiciste?. —pregunto serio. —ahora no me vengas con que es tu hijo te advertí, te dije que no marcaras al omega sino después del embarazo ahora olvídate de ellos dos porque no los verás.

—Es mi esposo y yo hago lo que quiero. —hablo Yoongi.

—Jimin también lo es. —se acomodó el saco. —como también lo es su hijo puede que no tenga mi sangre, pero será mi hijo permitiré que lo veas solo si Jimin lo desea además desde hace mucho perdiste el derecho de la paternidad.

Yoongi miró a sus padres los cuales suspiraron porque ellos querían mucho a su hijo y si apoyaron su nuevo matrimonio fue porque Jimin se los pidió.

—Ya te puedes ir hijo. —dijo su madre. —no te necesitamos más aquí.

—Ya te puedes ir con tu esposo. —habló su padre. —gracias por quedarte Jungkook, pero ya debes de irte.

El omega asintió y salió junto con el alfa, al llegar al auto Yoongi miro al omega y sonrió.

—Le quitaré a Jimin el cachorro. —hablo. —no pienso dejar que ese idiota sea su otro padre.

—Yoongi ya. —hablo el pelinegro. —renunciaste al cachorro y Jimin ya tiene alfa estará perfectamente bien, además con que excusa pedirás al cachorro.

—¿Por qué estás de su lado hoy? —frunció su ceño.

—Soy omega. —hablo.

—Olvidemos eso. —se quejó el alfa.

En el hospital Jimin abrió sus ojos y miró la habitación sus ojos se llenaron de lágrimas cuando tocó su vientre y luego por su cuello, la puerta se abrió y vio al castaño.

—Tae. —lloro.

—Todo está bien. —se acercó y le dio un beso en la frente.

—Yeonki. —susurro.

—Está en una incubadora. —lo tomó de la mano. —pasará ahí los dos meses que le faltan.

—Ya veo. —cerró los ojos. —yo pensé que iba a morir.

—También pensé lo mismo. —beso su cabeza. —¿Cómo te sientes?

—Cansado. —respondió. —pero sentí una fuerza que me decía que debía de seguir luchando. —cerró los ojos. —era un lobo gris.

—Era mi lobo. —suspiro. —pensé que no iba a funcionar debido a que no somos destinados.

—Lo sé. —hablo. —mi lobo se negaba a tomar la fuerza, él esperaba a Agust y a Yoongi.

—Yoongi si vino. —cerró los ojos y suspiro. —pero se negó a darte fuerzas.

Lágrimas bajo la lluvia [Y.M] [✓]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora