Fin

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Durante las semanas siguientes en las que Mean visitó a Plan y a su hijo, el alfa disfrutó junto a ellos sin desear nada más.

Le daba igual trabajar en una pequeña empresa, en la cual se ocupaba del marketing y por un sueldo bastante más bajo de lo que estaba acostumbrado.

Tampoco le importaba vivir en un pequeño apartamento para estar cerca del de Zee y Saint y por lo tanto, sentir la cercanía de Plan y Tin.

El poder y el dinero ya no le atraían, ni le llenaban, en cambio, el ver sonreír al omega y a su hijo, respirar sus exquisitos olores y tenerlos cerca si lo hacía.

Estaba dispuesto a todo por ellos, no quería vivir un minuto más sin estar con ellos y mucho más lo hizo cuando un día finalmente Plan lo sorprendió con un beso en los labios.

Un año después

Una mañana de sábado entró en una joyería de la ciudad y compró el anillo más lindo que pudo permitirse.

Sabía que el omega estaría en la librería como cada día, así que tras parar en una floristería y comprar un ramo de flores, se armó de valor y condujo su coche hasta allí.

Plan estaba radiante y muy sonriente, le encantaba estar entre los libros pero sobre todo amaba los ratitos que su trabajo le concedía para estar con su pequeño.

...-Papi, quiero un cuento.

-Claro mi amor, ¿Cuál quieres que te lea?.

-Este-dijo el pequeño Tin caminando con el libro de Peter Pan en sus pequeñas manos.

-Está bien mi vida...anda ven aquí y siéntate con papi-Dijo este cogiéndole en el regazo y sentarse en una butaca.

En ese momento no había ningún cliente en el local, aún era temprano por lo que era un momento especial para los dos, aunque este fue interrumpido cuando Mean entró

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En ese momento no había ningún cliente en el local, aún era temprano por lo que era un momento especial para los dos, aunque este fue interrumpido cuando Mean entró.

-Buenos días.

-¡Papá!-exclamó feliz el niño soltándose de los brazos del omega y corriendo hacia los del alfa.

-Hola campeón, ¿Me extrañaste?-preguntó dichoso el alfa cogiéndole en su regazo.

-Sip, mira papi va leeme un cuento, ¿Queres escuchalo tamen?-el niño señaló emocionado a Plan.

El omega permanecía sentado y levemente sonrojado, su corazón latía a mil por hora y sentía que si se levantaba quizás no pudiese sostenerse pues sus piernas le temblaban por la inesperada visita.

Aún así esbozó una leve sonrisa pues ver a su pequeño junto a su padre era la más hermosa de las escenas y con nostalgia pensó en lo distinto que hubiese sido todo si desde un principio Mean no le hubiese fallado.

Sin darse cuenta su imaginación voló y se encontró dentro de un pensamiento hermoso donde el quedarse así para siempre, juntos como una familia y que nada ni nadie los separase jamás.

-Papi....papi, ¿Me oyes?-preguntó el pequeño Tin al ver que su papá omega los miraba sin responderle.

-¿Estás bien, Plan?-preguntó entonces el alfa preocupado.

Estesalió de su trance y tartamudeó nervioso.

-Oh...si emm...si...e-estoy perfectamente...amm, ¿Comenzamos?

Mean y Tin se miraron y luego rieron alegremente.

-¿Papi estabas dormido?.

-Si algo así, mi cielo.

El pequeño entonces quiso bajarse de los brazos de su padre alfa y rápidamente se sentó con su padre omega, con el libro sobre sus piernecitas.

-Papa ven, siétate con nosotos... Ahoda papi nos leera Pete Pan.

El alfa miró dudoso al omega, el cual asintió, por lo que muy sonriente se acercó a ellos sentándose en otra de las butacas.

-Vega papi empieza ya-habló de nuevo el pequeño Tin algo impaciente.

-Está bien mi cielo, ahora voy-el omega sonrió y besó su pequeña cabecita- A ver emm....dice así: «Los Darling eran una familia compuesta por el siempre preocupado por las apariencias señor Darling, la amorosa señora Darling, sus tres hijos Wendy, John y Michael y Nana, un perro niñera que no tenía nada que envidiar a ninguna otra de verdad. Wendy era la hermana mayor y en sus sueños vivía historias de aventuras en las que aparecía un personaje llamado Peter Pan, un niño volador, que vivía en la isla de Nunca Jamás...

Mientras escuchaba la linda voz de Plan, el alfa miraba embobado la tierna escena padre e hijo.

Estaba muy feliz, entonces metió la mano en su bolsillo y tocando la cajita de la joyería suspiró nostálgico.

Quería ver eso el resto de su vida y estaba completamente seguro de que quería tenerlos en su vida para siempre pues no tenía dudas.

Ellos eran su familia y por lo tanto quería y debía amarlos y protegerlos con todo su amor para el resto de sus días.


No quería estar en ningún otro lugar que no fuera ese, con su hijo y su omega, viéndolos sonreír tranquilos, sanos y ser felices juntos.

No quería estar en ningún otro lugar que no fuera ese, con su hijo y su omega, viéndolos sonreír tranquilos, sanos y ser felices juntos

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Fin


.......

Hasta aquí esta historia, espero que os haya gustado. No os olvidéis de leer el epílogo.
Muchas gracias a tod@s por vuestro apoyo.

❤❤❤

4. No fue mi intención amarte - Meanplan (Zaintsee)  -Omegaverse TerminadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora