𝙱𝙻𝙰𝙲𝙺𝙼𝙰𝙸𝙻 | 𝙻𝚒𝚜𝚘𝚘

Pt. 29.

Pov. Rosé.

Otra semana, más días ocupados. Últimamente estamos teniendo muchas prácticas duras. Ganamos bastantes premiaciones durante ese lapso de tiempo. Son bastantes para una semana.

Se supone que debería estar contenta porque nuestro grupo está triunfando, pero sinceramente no lo soy, estoy preocupada por Lisa.

Todas las noches la escucho llorar, llorar, llorar y llorar. Ya no quiere comer, no juega con su mascota, a penas se levanta para las actividades.

Sus crisis emocionales se han convertido en desvelos, y eso ha afectado bastante a su aspecto. Cuando tenemos presentaciones, lo único que cubre su cara demacrada son los kilos de maquillaje que tiene que usar para disimular.

Alejó su vida totalmente de los fans. Ya no se conecta a redes sociales, no hace videos en vivo ni quiere participar en los videos que a veces hacemos para el mundo.

Se ve tan radiante en el escenario, pero en realidad es otra.

ㅡ Lisa, deja de llorar. ㅡ Repetí por quinta vez.

ㅡ Ya te dije que no puedo. ㅡ Respondió.

Sus ojos estaban rojos e hinchados, de su nariz salían moquitos líquidos, mismos que sorbía con su nariz.

Hasta su lindo gato notaba eso, y trataba de animarla, moviendo su patita en los pies de Lisa.

ㅡ ¡Jisoo! ㅡ Dijo Lisa.

Oh, llegó a la casa. Ella estaba ocupada con algo de la empresa, y tuvo que salir.

Como siempre, hizo caso omiso y pasó directo a su habitación.

ㅡ No, no, no... No llores de nuevo. ㅡ Dije preocupada.

Pobrecita.

ㅡ ¡Holaaa! ㅡ Gritó Jennie llegando al lugar.

Vete, no quiero que empeores las cosas.

ㅡ Por favor, vete. Lisa está muy mal.

ㅡ ¿De nuevo? Ay, Lalisa. Todos los días es el mismo cuento contigo. Siempre lloras y lloras sin parar. Mírate, tus ojos están hinchados y tienes ojeras por dormirte tarde haciendo nada más que llorando.

Lalisa solo la escuchaba.

Decidí irme de ahí para tratar de convencer a la mayor del grupo, a ver si logro que ella escuche a la rapera.

Busqué y busqué hasta que dí con ella.

— ¡Jisoo! — Grité.

— Hola, Rosie. ¿Qué sucede? — Preguntó sonriente.

— Oh, verás...

— ¿Qué sucede?

— Verás, es que Lisa...

Antes de que yo siguiera hablando, ella me calló poniendo uno de sus dedos en mi bocas.

— No hables de eso, ¿sí? Si solo vienes a eso, retírate por favor — Dijo enojada.

El ambiente se había tensado demasiado.

— Jisoo, de verdad, tienes que escuchar por lo menos una vez la versión de sus palabras. ¿No notas como está? Ella realmente está sufriendo y no es feliz. Si esto continúa, ella empeorará y el grupo puede tener problemas con eso.

Ella solo se quedó callada.

— Escúchala, por favor. Si no lo haces por ella, hazlo por el bien del grupo. Por favor — Rogué.