CAPÍTULO 3

860 117 22
                                    

Capítulo especialmente dedicado a SabrinaGiselleCarran. Gracias por apoyarme todos estos años, desde mis inicios en Wattpad, hasta el momento actual. Eres grande <3 




-Lamento que tengamos que caminar tanto, pero como te darás cuenta que el lugar es enorme, así que hay mucho que conocer. Probablemente no me de tiempo para hacerte todo el tour, pero estoy seguro que entre clase y clase, tendrás tiempo para explorar un poco todo el lugar -comenzó a parlotear el director sin detenerse.- Este es el pasillo principal, por aquí se reúnen los alumnos en la noche antes de dirigirse al exterior. Descubrirás que les encanta dar caminatas nocturnas o simplemente disfrutar del paisaje rural... algunos se escapan para darse lote en medio del bosque -seguía hablando Jem, pero yo no tenía mi atención fija en mi director, sino en el lugar.

El suelo estaba cubierto por un gigantesco tapete de seda rojo y las paredes antiguas estaban perfectamente pintadas del mismo blanco del exterior. Los ventanales eran gigantescos y gruesas cortinas los cubrían, aunque por ellas todavía se colaba un poco de la luz del exterior que casi se marchitaba. En el techo colgaban preciosos candelabros de cristal y en algunas partes habían bellos dibujos, claramente antiguos, pero preciosos. Estaba claro que se esforzaban por conservarlos.

-Magnus apresúrate -llamó mi director y corrí detrás de él-. Como te iba diciendo, a la derecha encontrarás el comedor -señaló Jem y yo sonreí mirándolo.

Gigantescas mesas redondas se encontraban por todo el lugar, cada una con seis asientos. También había una mesa larga junto a una pared donde se podían encontrar muchos bocadillos. Mi estómago gruñó. No había almorzado y estaba tan molesto con papá, que me negué a comer algo por el camino. Quise comer algo, pero ni siquiera tuve tiempo de detenerme, pues mi director ya se encontraba al otro extremo de la cafetería. Nuevamente tuve que correr detrás de él mientras intentaba disfrutar de toda la vista. En aquel lugar también habían enormes ventanales, pero éstos no estaban cubiertos por cortinas y se podía ver perfectamente el exterior, donde algunos estudiantes se encontraban con sus uniformes puestos, jugando en las zonas verdes; otros estaban en la cafetería y me miraban con curiosidad.

Ni siquiera les presté atención a sus miradas de desagrado, simplemente seguía a Jem con velocidad. ¿Cómo es que podía ser tan rápido aquel hombre?

Un tanto irritado, suspiré y lo seguí por un precioso pasillo; también tenía una alfombra roja, aunque pude distinguir una baldosa de color dorado perfectamente lustrada. A los lados habían preciosos cuadros que parecían bastante costosos. Del techo colgaban más candelabros, más murales que parecían relatar una historia, y algunos escudos de armas que le daban un estilo genial al lugar.

-Magnus por favor, no te quedes atrás -llamó nuevamente Jem y suspiré siguiéndolo.

-No es justo -dije sin aliento mientras lo fulminaba con la mirada-. Ve un poco más lento.

-Lo siento, pero tengo cosas que hacer, en fin, cómo te iba diciendo. En el salón de la izquierda podrás encontrar el recinto de baile, pero por supuesto en este momento está deshabilitado, por lo cual es simplemente una bodega. Tenemos dos bailes importantes: el de verano y el de invierno, por supuesto, el de invierno es más importante porque vienen...

Pero nuevamente dejé de escucharlo. Mi mirada seguía recorriendo todo el lugar, intentando ignorar a todos los alumnos que cuchicheaban a mi alrededor. Fruncí el ceño. Se notaba que eran niños ricos, mimados, hijos de papi y mami, y por supuesto yo me veía demasiado... diferente, en aquella multitud refinada.

Y nuevamente tuve que correr detrás del director, que ya se encontraba bastante lejos.

-Y esta -señaló-. Es la sala común, aquí vienen algunos alumnos para descansar después de hacer sus trabajos o después de las comidas. Pasarás muchas noches aquí. Tenemos juegos de mesa, para animar la vida sin tecnología.

You're my gravity (MALEC)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora