Actualizohoycomo regalo a mi amiga y lectora otakulik por su cumpleaños🥺💖 Espero que hayas tenido un buen día. Este capítulo está dedicado a ti. ¡Feliz cumpleaños!
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La oscuridad de la noche empezaba a cubrir el bosque en cada segundo que transcurría, y las sombras de los altos arboles solo proyectaba más oscuridad. El sol había desaparecido en ese día tempestuoso y la luna también los había abandonado.
SeokJin corrió por el bosque guiándose de sus instintos y la naturaleza. Pero un nudo se formó en su garganta y un sentimiento inexplicable lleno su pecho mientras rememoraba terribles recuerdos de aquella noche de cacería por culpa del escenario tan parecido, asimismo como la madrugada en la que fue atacado por aquel lobo alfa que le dejo una profunda e imborrable herida en la espalda.
Su corazón latió con más rapidez, y esa extraña angustia le impidió pensar y respirar con normalidad. Este sentimiento lo hizo correr con celeridad y dejar atrás a los chicos en unos pocos minutos.
El claro hacía donde se dirigía estaba cada vez más y más cerca.
Pero sus sentimientos no mentían... Esta extraña sensación en su pecho solo podía ser eliminada cuando llegara al lugar y viera con sus propios ojos a NamJoon.
Era totalmente ridículo, pero SeokJin todavía necesitaba comprobar que este hombre estaba bien para sentirse tranquilo.
Cuando finalmente observó el claro a través de los árboles, SeokJin dejo de correr y camino lentamente para no ser descubierto. Mientras se acercaba, empezó a vislumbrar una silueta en medio del claro, que se encontraba viendo el cielo oscuro debajo de la lluvia.
El corazón de SeokJin se saltó un latido al darse cuenta que esta persona era NamJoon. Sus ojos se posaron en el hombre y se quedó ensimismado viéndolo.
NamJoon vestía una túnica azul oscura, pero a ese punto estaba totalmente empapado por la lluvia. Sin embargo, a él parecía no molestarle, más bien, tenía su rostro alzado hacia el cielo y de un segundo a otro cerraba los ojos como si quisiera sentir cada pequeña gota fría caer y golpear contra su piel.
Esta escena hizo a SeokJin perderse un poco, sin comprender que debía hacer ahora. Ya vio a NamJoon y el hombre estaba bien, ¿ahora qué? ¿Debería ir y hacer lo que en un principio había planeado? Pero no, ya no podía. En realidad, sus planes ya habían quedado sepultados en un pequeño especio de su mente. Todo lo que hiciera a partir de ese momento sería de manera espontánea.
En un momento, SeokJin no fue consciente de que dio un paso en falso por su letargo, hasta que tropezó con una gruesa raíz de un árbol y cayó al suelo dejando escapar un jadeo. Cuando rápidamente alzó el rostro, esperando no haber llamado la atención, ya era muy tarde.
