Lee Minho, un dulce omega de solo 16 años, de pocos amigos.
Aunque se tratara de la persona más lindas tierna que podrías haber visto, era ignorado por la mayoría de alumnos en la escuela.
Pero todo lo contrario a lo pensado, los alumnos no "pasaban...
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"A mi también me gusta tu aroma..."
Esa frase aún seguía presente en la cabecita de Minho, aun cuando había pasado una semana desde eso, no podía evitar pensar una y otra vez en esas palabras.
Le había comentado de ello a su madre, consiguiendo únicamente un fuerte abrazo y unas cuantas lágrimas por parte de la omega. Lo cual lo dejo aún más confundido.
Todas las personas cercanas a él comentaban que al presentarse deberían cuidarlo mucho, ya que al ser su primer celo, este sería demasiado fuerte, al igual que su aroma. Y aquello lo preocupaba, mas ahora al saber que Chan ya sentía su posible fragancia.
Eso solo lo hacía pensar en que su presentación estaba próxima.
No quería que ocurriera en la escuela, eso sería terrible teniendo en cuenta el montón de alfas con hormonas alborotadas que había en esta. Pero para eso tenía a Jisung quien, una vez le contó lo sucedido con su Hyung, le prometió cuidar de él como si fuera un alfa.
Aunque en parte lo era.
Un pequeño omega con complejo de alfa, así lo llama Félix.
En esa semana, Minho pudo ver un gran cambio en su mejor amigo, empezando por el odio incomprendido que comenzó a sentir por Hyuna, la omega de anaranjado cabello que había llegado ese semestre.
Y todo porque solía acercarse demasiado a Félix, ignorando complemente los comentarios mordaces que el castaño solía decirle.
Lee sabía que Han sentía algo por el sonriente alfa, y que este sentía algo por su querido amigo.
Se podría decir que se gustaban sin saberlo.
Tierno a opinión de Minho.
Por otro lado estaba Chan, ese Hyung que solía hablarle de vez en cuando en clases, y ayudarlo cuando había que hacer trabajos escritos.
Ayudarlo siempre había sido el trabajo de Jisung, pero cuando Chan le ofreció a éste cambiar de lugares para poder sentarse con Minho, no se rehusó. Al contrario, su entusiasmo fue tal que lo sacaron a mitad de la clase por ponerse a chillar.
Así que ahora ambos se sentaban con los nuevos alfas del salón.
-Hey, Honnie... -El menor asintió suavemente, dándole a entender a Chan que lo escuchaba. Desde el día que hablaron en las escaleras, el mote de "Minhonnie" solía ser la forma de llamarlo del mayor. - Traje arándanos con frambuesas ¿quieres?
-C-claro, Hyung... -Sintió como su mano era levemente jalada por el mayor, para luego tener en esta un pequeño recipiente donde supuso estarían dichas frutas. - ¿C-cómo supo que... Uhm... Me gustan?
-Solo lo supuse. -No le diría que su lobo le propuso esa idea, sabía que sería raro para el castaño.
Ambos se sonrieron, Chan disfrutando del lindo eyesmile de Minho, y este imaginando como sería su Hyung.
