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El trabajo en casona de los Suppapong se había complicado, todo estaba mal sin Zee y con Off de aquí para allá, además las doncellas aún seguían enfermas, por lo que todo recaía en Berta y en el pobre Gulf.

Además, el ambiente que se respiraba en el lugar tampoco ayudaba, ya que a parte de la preocupación de todos por el chófer, se sumaba que los señores estaban de los nervios por el comportamiento de su hijo, el cual solo venía a casa un unas horas para cambiarse y descansar un poco, luego se volvía al hospital, abandonando así sus estudios y su compromiso con Mew.

Con el pasar de los días, el pobre omega estaba más triste y asustado pues por un lado estaba Zee, al cual le tenía mucho cariño, llegando incluso a verlo como el hermano que nunca tuvo, al igual que a Off y no mejoraba y por otro lado, estaba el joven Suppapong, quién era otro desde el día del accidente.

Este discutía mucho con sus padres y temía que fuese por su culpa y que acabasen descubriendo su atracción con el novio de este y lo echasen de allí.

Dos semanas después

El doctor Gun Atthaphan llegó a la sala de espera con una sonrisa en sus hermosos labios la cual hizo que el corazón de Off se acelerase mucho más, que cada vez que lo veía por los pasillos del hospital.

Este llegó con la noticia de que Zee se había despertado y que había muchas esperanzas de que este saliese pronto de la uci.

El beta llegó a la casona con la noticia pero en cuanto quiso comunicárselo a la familia, el señor Suppapong se puso furioso pues había prohibido hablar del chófer en su presencia.

Su enfado era debido a que Mew llevaba varios días sin ir por la casona y sus negocios peligraban, necesitaba que el compromiso de su hijo con el joven empresario se realizase cuanto antes o iría a la quiebra.

Ese mismo día, este llamó a su hijo a su despacho para hablar con las cartas sobre la mesa, Joong le dijo que lo mandaría lejos para pensar bien las cosas y encaminara su vida olvidándose del chófer pues Mew era su destino.

Ante la negativa del joven, este finalmente decidió hablarle sobre la situación financiera que tenían sus empresas y lo necesario que era su casamiento con el alfa pero aún así, Saint se negó y aseguró que él no se casaría con nadie que no fuese Zee.

Entre gritos y lloros este le acabó confesando la verdad, que él chófer era el omega al que amaba, que incluso ya había estado juntos y lo había marcado varias veces.

Saint no iba a permitir que lo alejasen de Zee, ya que eso sería la muerte de ambos y ya le daba igual las consecuencias, su amor le daba la fuerza para hacer frente a quién quisiese separarlos, debía protegerlo.

Joong reaccionó muy mal y lo echó del despacho y de la casa, gritándole que ya no tenía un hijo y que si decidía estar con el chófer que nunca regresase allí.

El joven volvió al hospital donde Off estaba acompañando al omega, el cual aún dormía, el beta enseguida lo notó muy agitado y este le contó lo sucedido, luego lo mandó a la casona para que le dijese a Berta que le preparase todas sus cosas y las de Zee y se las trajera al hospital pues ya no volverían.

El joven alfa no sabía que pasaría pero al menos tenía dinero ahorrado del que su padre no sabía, desde que había empezado su amor con Zee, este lo había puesto a nombre de los dos pues pensó en el futuro juntos, el cual al parecer empezaría antes de lo previsto.

El omega finalmente abrió los ojos y Saint se le acercó pero éste seguía sin querer hablarle pues recordaba todo lo sucedido antes del accidente.

...-Zee amor, ¿qué tal te encuentras hoy?- preguntó besándole la mano.

-No creo que te importe, además yo no soy tu amor...Ese Suppasit si lo es.

—Sabes que yo no siento nada por él, todo era por mi padre.

—Si ya como el beso ¿verdad?.

Saint lo miró y entendió.

—Lo viste y por eso te fuiste en mi moto, ¿Verdad?

—Si, si os vi.

El alfa suspiró.

—El me besó, no significó nada, yo no sentí nada.

—No te creo, te sonrojabas y te reías feliz con él, te gusta.

-Pero, ¿por qué dices eso amor?, ya te expliqué que ese beso no tuvo importancia.

-Yo no lo vi así- dijo llorando Zee-...Os cogiais de la mano y tú no te apartaste.

El omega se sentía muerto de dolor, había estado guandandoselo por el lugar en el que estaba pero ya no podía más.

-Él fue quién me cogió la mano y él fue quién me besó, mi padr...- se excusaba Saint muy nervioso.

-Si claro...¿qué me dirás ahora que te obligó tu padre?, no seas tonto...yo llevé a tus padres a casa, pudiste haberte negado a quedarte en la fiesta con él- Zee fue tajante.

-Si, tienes razón, lo siento soy un asco de alfa- dijo este muy triste y agachando el rostro.

Entonces el chófer percibió su gran tristeza y dolor, se sintió muy mal pues tampoco quería verlo así, después de todo y él ya sabía que Saint estaba atrapado y tenía que desimular, se había excedido con su reclamo.

Iba a pedirle perdón cuando vio a Off entrar con las maletas muy molesto, este debía regresar a la casona cuanto antes pues los Suppapong estaban muy enfadados y le habían prohibido quedarse allí.

-Saint cariño, ¿Qué es lo que está pasando?

El joven alfa miró a su omega con lágrimas en los ojos.

-Mi padre me ha echado de casa, me odia.

3. «Pobre Omega Infeliz» -Mewgulf, Zaintsee, Offgun Omegaverse TerminadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora