CAPITULO 11:

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Narra Mateo:

Valla, eso fue tan intenso, jamás me había puesto así por una chica...pero como no hacerlo si el fue el culpable de todo esto. Mejor voy a ver si siguen sus papás aquí, me gustaría darles buenas noticias, pero aún sigue sin dar ningún resultado a nada, me da miedo que no llegue a responder y pueda fallecer. Así que haré lo posible para que me conozca.
Salgo de mi oficina y me dirijo a la habitación de T/N, el cual tocó para recibir un pase por el señor Robinson.

Mateo:-Entro a la habitación-Buenas tardes Señores Robinson.-Me acerco al otro lado de la cama, para verla más cerca, es increíble como después del choque que tuvo siga siendo hermosa como ese día-¿A pasado algo?

Cornelius: Bueno, no sé si cuente que movió los ojos cuando estábamos hablando con ella.-Dice acariciando su rostro.

Eso es un progreso, puede que no sea nada, pero todo esto se que va a valer la pena.

Mateo: ¿Y que fue lo que le dijeron?-Digo viéndolos.

Franny: Que no se preocupara de nada, que muy pronto va a estar de vuelta Dylan.-Le sonríe con nostalgia.

Mateo: ¿Y quién es Dylan para ella?-Digo curioso.

Cornelius: Su hijo, su vida.-Se le escapa una lágrimas-No asido la misma desde que perdió a su bebé.

Mateo: Perdón que pregunte, pero...¿Que paso con el?-Los veo atentos.

Franny: No te preocupes, tal vez puedas ayudarnos a encontrarlo más rápido, nos hace falta más ayuda para buscarlo bien, llevamos cuatro meses tratando de encontrarlo...todo fue mi culpa, si no me hubiera distraído tal vez todo esto no estaría pasando.-Empieza a llorar, bajo la mirada apenado.

Mateo: Yo...lamento por preguntar.-Digo triste, ya que se lo que se siente que pierdas a un hijo.

Fue duro, ya que en ese caso yo fui el culpable de su desaparición...estaba comprándole un helado su favorito, de limón. Me sorprende que después de cuatro años siga acordándome de el, de mi pequeño niño...mi vida. A su madre totalmente no le importaba ya que cuando supo de su desaparición lo único que dijo fue Que bueno, ya no soportaba a ese mocoso. Yo amaba demasiado a mi esposa, pero después de eso me rompió el corazón, tuvo un embarazo adolescente, asi que tal vez no estaba hecha para convertirse en mamá, aunque no era la forma de expresarse de su propio hijo.

Siento como resbala una lágrima por mi mejilla a lo que la quito de inmediato, levanto la mirada y me fijo que los señores Robinson se están abrazando mutuamente, es así como yo quería un pareja, que me amara a mi y a nuestros hijos.

Narra T/N:

¿Mi hijo? ¿Yo tengo un hijo? Cómo puedo seguir aquí sin recordar nada de mi pasado, que fue lo que realmente me pasó, ¿Por qué estoy ahí inmóvil?
Escucho llorar en silencio a alguien, al voltear me encuentro con Mateo, no se el que, pero el que el esté aquí conmigo me llena de alegría. ¿Porque estará llorando? Fue mi culpa...
Al darme cuanta que puedo escuchar sus pensamientos, me asombro ya que no se cómo es que sea posible.

Al levantar su mirada noto como sus ojos están un poco rojos, eso me puso triste ya que tal vez el también perdió a su hijo, como yo. Cuando despierte, le daré todo mi apoyo.

Narra Wilbur:

El amor de mi vida está en coma...por mi culpa, como es que fui capas de engañarla sabiendo por lo que estábamos pasando, yo la abandone, la aleje de mi...me siento un estúpido, un cobarde, ella era mi prioridad, y le acabo de fallar a Leía.

"Esᴛᴇ Es Mɪ Dᴇsᴛɪɴᴏ" (Wɪʟʙᴜʀ Rᴏʙɪɴsᴏɴ Y Tᴜ) 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora