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Aquí estoy, a horas lejos de mi castillo, brindandole el honor de tenerme por un momento a un pequeño pueblucho, que en éste momento esta realizando un juicio a un sucio, asqueroso, feo y repugnante criminal de primera.

-Caballero negro, se te acusa de asesinar al rey Enrique a corte de espada, motivo por el cual dimos inició éste juicio y en el caso de ser hallado culpable, la pena es, la muerte.

Sólo espero que Joaquín allá puesto todo a mi nombre en caso de que le pase algo.

-Je, esto se pone divertido.

Habla por ti iguana, ¡¿dónde están los vendedores de comida?!

Bueno, por sí no se entiende, Joaquín fue acusado de un asesinato, vinimos a que tenga un juicio y su merecido castigo y ahora está encadenado de brazos y piernas, en el interior de una fosa que hasta donde sé, se suelen liberar leones.

Yo, obviamente por ser famosa e importante, tengo asiento en primera fila y a mi lado está la iguana con forma humana, pero aún siendo yo tan importante, ningún sirviente se digna a traerme comida.

Atención a la realeza en ése pueblo: pésima.

-Tengo una pregunta ante todo esto.

Y el criminal ése que estaba siendo juzgado por sus pecados, habló con cara de aburrimiento.

Joaquín estaba siendo juzgado por tres ancianos calvos y lejos, en un lugar seguro y alto, se encontraba un tipo bastante viejo, con ropa de rey.

No puedo creer que se atreva a verme desde arriba, tiene suerte de que sea amable.

-Hazla.

Dijo uno de los jueces, mirando con odio a ése asesino.

-¿No dijeron qué su rey murió? ¿Y ése viejito quién es?

Ahora que me doy cuenta, el culpable tiene razón.

¡¿Quién es ése viejito y por que no atiende a sus invitados?!

-¡Soy el hijo del anterior rey, el nuevo rey de Vantre, el rey Pedro!

Gritó el anciano, señalando a Joaquín con un cetro de oro... éso o sólo era un cetro amarillo.

-¡¿Su hijo?!
No es por nada pero tienes unos 60 años, tu padre murió en buena vejez.

¡Calla criminal que nadie te dio permiso de hablar!

Denme una espada que yo mismo acabó con él aquí y ahora.

-Caballero negro, ¿en verdad cree que está para hacer bromas en este momento?

Preguntó uno de los jueces mientras yo levantaba ambas manos para que uno de los sirvientes que le traía uvas al rey, me las traiga a mí también pero Draco bajo mis brazos y me miró con enojó.

¿Y ahora qué hice?

-¿Y por qué creen que es broma lo que digo?

Sí, claro, como no.
¡Cortenle la cabeza!

-Hace 8 meses, usando su armadura conocida, se infiltro a la habitación del rey Enrique y lo apuñaló sin piedad con su espalda.
Tal acto monstruoso, merece la ejecución inmediata.

Y otro de los jueces por fín habló.
Yo ya estaba creyendo que los otros dos sólo estaban de relleno.

-El tiempo se agota así que diré esto claro.
Número 1, hace 8 meses me encontraba erradicando dragones que estaban causando alboroto por los reinos y de pasó buscaba a su rey para terminar con mi trabajo de hace años donde logro huir con heridas graves, pero ustedes probablemente no lo sepan ya que sólo les informé a los reinos en quienes confió y a los que salvé, obviamente.

La luz del castilloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora