𝟶𝟸𝟿

518 60 16
                                    

Realmente había pasó solo un día, desde que San volvió a ver a su hermana, la cual fue puesta en libertad, por pedido de él. Wooyoung sabía que no debía desconfiar de su novio, pero aun así le era imposible no hacerlo, saber que el pelinegro tenía un "oscuro secreto" lo hacía sentirse ansioso. Quería saber si podía confiar en él, que era obvio que debería, pero aun así no lo hacía en un cien por ciento, en este momento, Wooyoung se encontraba de camino a casa de su padre, faltaban aproximadamente 30 minutos, ya quería devolverse y pedirle una explicación sobre lo de ayer al pelinegro.

El pelinegro ahora se encontraba caminando furioso, por el pasillo de una gran bodega, lo habían citado debido a que alguien había hecho dudar a los superiores sobre su cargo como el rey de la mafia, cuando entró a la sala, se encontró con Siwon allí, cosa que lo extraño.

- ¿Papá? - Se acercó a él.

- Hola, hijo. - Se le notaba incómodo.

- ¿Qué pasa?

- Ella está viva. - Susurró.

- ¿Quién es ella? - Pregunto confundido, aunque sabía de quién hablaba.

- Sooyoung.

San fingió haberse sorprendido al escuchar el nombre de su hermana, la que entró en ese momento junto a los superiores, Sooyoung le hizo una seña para que salieran a conversar, cosa que hizo siendo seguido por Siwon.

Ambos hermanos al ver a Siwon seguirlos, decidieron fingir que no se llevaban muy bien en este momento, por lo que Sooyoung comenzó a caminar alejándose de San y este la seguía, hasta que le jalo el brazo para que terminara de caminar.

- ¿Se puede saber que estás haciendo? - Pregunto Sooyoung.

- ¿Qué haces aquí?, Deberías estar muerta.

- ¿Así tratas a tu hermana mayor? - Sooyoung alzó una ceja.

- Vamos, tú no eres mi hermana.

Ambos chicos, veían de reojo como Siwon se fue alejando de ellos, mirando a San con una sonrisa orgullosa. Cuando el mayor desapareció por la puerta, San soltó a Sooyoung y ambos suspiraron.

- Lamento lo que dije. - Se disculpo el menor.

- No te preocupes, lo importante es que se lo haya creído. - Miro a San. - ¿Cuándo lo harás?

- No lo haré.

- ¿Estás seguro?

- No.

- San, debes demostrarle que te mereces ser el rey de la mafia, es por eso que vine aquí. Te pondré aprueba. - Se fue, dejando al pelinegro confundido.

[...]

Wooyoung se encontraba desesperado, había llegado a la casa de Hoseok, hace 10 minutos, pero no había rastro del mayor y la casa se encontraba hecha un desastre, los sofás desparramados, las sillas en el piso, platos y vasos rotos, había ido a la habitación y está se encontraba en orden, una gran diferencia entre la planta baja y la alta.

Entre medio del desorden, encontró una nota, cómo sabía que no debía actuar solo, decidió llamar al equipo de investigación de la policía, para que lo ayudarán a recuperar a su padre.

Estuvo esperando un momento a la policía, quienes, al llegar, comenzaron a buscar la evidencia, mientras que otro se acercaba a él, haciéndole algunas preguntas.

- Necesitamos conversar acerca de este caso, pero por el desastre no será posible hacerlo aquí. ¿Existe algún lugar donde podamos conversar?

- Si, pero queda un poco lejos.

- No se preocupe.

Así Wooyoung, junto a la policía, comenzaron a alejarse de la casa de Hoseok, a mitad del camino, el rubio decidió llamar a su novio, para que evitará hacer algo malo, mientras él iba con la policía.

- Sannie, por favor. - Susurró.

[...]

- ¡Esto es injusto!, ¿Cómo pueden creerle a una mujer que estuvo desaparecida por más de 10 años, en vez de a mí?

- Mr. Satán. Ella es la princesa de la mafia, al ser su hermana, a pesar de estar desaparecida.

- ¡Qué se joda la princesa, yo soy el rey!, Esto es una falta de respeto.

- ¿Estás demente?, Estás perdiendo tu toque, ya no eres como antes.

- ¡Estoy demente, pero eso les encanta! - Sonrió como psicópata. - ¡Yo muerdo, cariño, no te acerques! - Estaba comenzando a perder la cabeza. - ¡Vuelvan a meterse en mis asuntos y haré que nunca me olviden! - Le quito el seguro a un arma y disparó hacia el techo.

Nadie en esa sala se movía, el pelinegro se encontraba furioso y sabían que era capaz de dispararles, sin importarle quienes sean. En eso, el teléfono de San, sonó y todos se aliviaron al ver cómo este bajaba el arma y contestaba.

- Por la mierda, ¿Qué es lo que quie... - Se vio interrumpido, por la voz de su chico.

- Ca- cariño. - Se notaba que estaba llorando.

- ¿Bebé?, ¿Qué pasa?, ¿Estás bien? - Los demás se sorprendieron al ver el cambio de San.

- Vo- voy a casa, po- por favor no hagas algo malo, voy con la po- policía. - San se tensó.

- Eso no importa, lo que importa ahora es que estás bien, ¿Lo estás?

- S- sí, no te preocupes, t- te amo.

- Yo te amo más. - Se corto la llamada.

San se quedó inmóvil por un minuto, luego se volteó hacia los superiores, mirando a todos lados, suspiro.

- Piensen bien lo que harán.

Se fue, dejando a todos confundidos y con un amargo sabor en la boca, Siwon y Sooyoung decidieron salir detrás del pelinegro, pero este ya se había ido, no sabían hacia donde fue.

San conducía, sin importarle que algo le pasará, la sensación de saber que su chico lloraba y él no estaba con él para apoyarlo, le dolía, sentía que estaba fallando como novio, no se dio cuenta en qué momento había llegado a la casa y se bajó del auto al ver a Wooyoung llorando en la entrada.

- Mi amor. - Wooyoung alzó la vista y al ver a San, corrió hacia él.

- Sannie. - Se lanzó contra él, enrollando sus piernas alrededor de la cintura del mayor y este lo sostuvo.

- ¿Qué pasa, cariño?, ¿Te lastimaste?, ¿Debo golpear a alguien?

- Solo... Abrázame. - San suspirando, dejo que su novio se acurrucará contra él.

San al ver a los policías en la puerta de su casa, comenzó a caminar hacia ellos, aun teniendo a Wooyoung entre sus brazos. Todos los oficiales lo reconocieron, el gran Satán siendo el novio del mejor oficial de policía, que ilógico, pero aun así les parecía tierna la forma en la que el mafioso, consolaba al policía, cuando el pelinegro llegó hacia ellos, inclinó la cabeza en modo de saludo, cosa que los sorprendió, pero aun así respondieron de la misma manera.

El pelinegro los invitó a entrar a casa, mientras dejaba a Wooyoung sentado en uno de los sofás, mientras él iba a buscarle un vaso de agua, los oficiales solo miraban la manera en la que el pelinegro cuidaba del menor, cómo le ayudaba a calmarse, le daba agua, al igual que lo abrazaba cuando este lo necesitaba.

- ¿Me dirás que pasa, Mi niño? - San hablo con voz suave.

- Papá desapareció.

𝐖𝐡𝐨 𝐚𝐫𝐞 𝐲𝐨𝐮?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora