Capítulo 26 ☾

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Bryony

"Solo estás segura en tus pensamientos, pequeña bruja"

No dejaba de repetir estas palabras de Caden y quizá sí tenía razón, solo estaba segura en mis pensamientos. En este momento tenía que desconfiar de todos y de todos, menos de Caden, Thea y mi madre, estaba más que segura que en ellas sí podía confiar y que nunca harían nada para hacerme daño porque era más probable que yo les hiciera daño a ellas.

Al salir de la universidad me encontré con Thea mientras esperaba que Caden saliera.

—¿Y qué te dijo Curtis? —me preguntó.

—Que no les iba a decir nada a los lobos y que podía contar con su ayuda —aquello no le sorprendió —. ¿Qué le dijiste para que no quiera matarme?

—La verdad y nada más que eso, le expliqué como pasaron las cosas y que debía confiar en ti. Solo le dije lo que es más que obvio —sonrió.

—Eres la mejor amiga que puede existir en el mundo —la abracé.

—Lo sé, lo sé —dijo con suficiencia —. Eres un caso perdido sin mí —negué con la cabeza.

—Por cierto, vino River y me dijo que tengo que buscar algo —nos separamos y frunció el ceño.

—¿Algo cómo qué?

—Una vasija, pero no me dijo nada más.

—Ese niño es muy raro —le di un codazo en las costillas.

—Mira quien lo dice —nos reímos juntas.

—¿Y qué te dijo? —me miró.

—Que debo seguir las señales y que aquí en Bibury se esconden muchos secretos —la piel se me enchinó.

—Creo que eso ya lo sabemos —suspiró.

—Sea lo que sea vamos a encontrar esa cosa y vamos a descubrir para qué sirve —asintió con la cabeza.

—¿Thea? —escuchamos a nuestras espaldas, Curtis se acercó a nosotras y levantó la mano para saludar —. Hola.

—Hola, Curtis —le dije yo, Thea se quedó callada a mi lado. Parecía un poco seria con Curtis y era entendible, casi toda su vida estuvo enamorada de él y este no le hacía caso.

Curtis solo me sonrió y se dirigió de lleno a mi amiga.

—Thea, ¿te gustaría ir a tomar un café? —Thea volteó a verlo con los ojos bien abiertos.

—¿Yo? —parpadeó.

—Sí, tú —las manos de Curtis se asieron a las correas de su mochila, ejerció la presión necesaria para que sus nudillos se pusieron blancos —. ¿Quieres? —levantó ambas cejas.

Thea giró la cabeza, mirándome estupefacta, yo tampoco podía creer lo que estaba pasando.

—Anda, yo espero a Caden aquí —le sonreí.

—Entonces sí —se descruzó de brazos y se acomodó la mochila sobre los hombros —. Te veo mañana —me dio un beso en la mejilla.

—Nos vemos, se portan mal —los señalé a ambos y Curtis solo negó con la cabeza.

Los vi alejarse juntos. Ellos dos harían una hermosa pareja si es que Curtis no fuera tan ciego y se diera cuenta que mi amiga estaba perdidamente enamorada de él. Ella no lo iba a esperar toda la vida y se podía cansar, pero esperaba que eso no pasara, los amaba juntos.

—¿En qué tanto piensas? —parpadeé un par de veces. Caden estaba frente a mí con las manos metidas en su sudadera.

Sonreí y me acerqué a él.

Eternal ☾ (COMPLETO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora