Hija de Apolo (Jason Grace)

Capitulo 54: Sueños malos y hay que bailarlo

Estar aburrida es lo peor. Mis clases ya había terminado e hice todas mis tareas. Me siento como en la preparación. En fin, ya también había estado estudiando unos libro pero nada logro entrenarme lo suficiente. THDA. Así que estaba lanzando dardos a un blanco que tenía. Es algo muy común para los hijos de Apolo. Pero me aburría de ganar todo el tiempo. Esto no es divertido si no hay a quien presumirle que gane. Horrible. Me aburrí de eso y me recosté en mi sofá. No había notado que estaba cansada y poco a poco me fue ganando en sueño.... Mala idea.

Era de noche en un lugar que recuerdo perfectamente.... Manhattan. Esto pasó cuando estábamos luchando contra Cronos. Esos días que pasamos luchando contra el y su ejército no fueron los mejores. Exactamente por qué en esos días mi cabaña quedó con solo cuatro integrantes. Estaba en un lugar que parecía estar vacío. Algo raro considerando que cerca había una batalla. Desde donde me encontraba podía ir la batalla. No me encontraba lejos de ella. Entonces ví a alguien caminando. Usaba la armadura del campamento. En sus manos había un arco. Se quién es esa persona. Soy yo. En un momento que pude me aleje de la batalla. Necesitaba respirar. Se que todos también querrían eso en ese momento pero yo estaba abrumada. Tan solo unas horas antes había llegado con Michael y ahora el se encontraba muerto. Me detuve en un lugar y me quite el casco lo tire al piso y respiré. Me observé a mi misma con mucha atención.

Mi cabello estaba desordenado e iba peinado en una trenza. Tenía manchas de sangre en el al igual que en mi rostro el cual tenía unos pequeños rasguños. Mis jeans estaban sucios y con algunos rotos y lo que se veía de mi camisa. Que era la del campamento Mestizo, también estaba algo rota. En mi mano derecha estaba la protección que usamos para sujetar la flecha y mi mano izquierda estaba lastimada por el arco. En total estaba hecha un asco. Pero aún así me veía sexy. Que locura. Me salgo de tema, perdón. Se escuchan pasos y mi yo de ese tiempo se pone alerta. Su arco aparece e inmediatamente lo carga mientras giraba para todos lados buscando el lugar de donde vengan los pasos y aparece un joven alto de cabello rubio y una cicatriz en su cara.... Cronos.

- Ahí estás. - Dijo con su tenebrosa voz. Que todavía me hace estremecer.

Yo intenté moverme. La del sueño. Intento irse pero no pudo. No podía moverse. Era Cronos quien hacía que eso pasara.

- Yo te ofrecí mucho, Summer Clark. Tu solo debias ayudarme y usar tu poder para mí. - Explica mientras se acercaba.

La del sueño se movió solo un poco y soltó la flecha. Está no le hizo nada. Era una buena distracción ya que ella logro moverse como para alejarse un poco. Solo un poco ya que volvió a quedar congelada.

- Inteligente. Pero aún así te quedaste. - Dijo el fingiendo lastima y se acercó a mi.

Yo miraba con antencion esa escena. Se lo que pasa. No es nada divertido y gratificante. De repente el sueño cambia. Eso es lo lindo de los sueños de Mestizo. Lo impredecible que son.

Había una niña de unos diez años sentada en una silla mientras miraba un vídeo. Otra vez yo y eso fue cuando llegue al campamento Mestizo y me pusieron a ver el vídeo de iniciación. La niña tenía una cola de caballo. Con algunos cabellos rebeldes sueltos. Usaba una camisa blanca que estaba manchada y unos jeans rotos y sucios al igual que sus tenis. Miraba con atención el vídeo. Ya que quien lo grabó se me asia muy conocido. Cuando el vídeo termina entra alguien a la habitación. Quirón en su silla de ruedas.

- ¿Entendiste todo? - Pregunto usando si tono amable de siempre.

La niña volteo a mirarlo. Reconozco esa mirada. Es una mirada fría y seria. Pero que al mismo tiempo es calmada y analítica. Mi madre me daba esa mirada. Mi mundo se congelaba cuando ella me miraba de esa forma y de ella fue donde la aprendí.