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—¡Bajate de él! —grito molesta mientras le lanzaba una patada en las costillas al rubio haciendo que salga volando un par de metros.

—¡Ay! —se quejó —¿¡Por qué me pateas!? ¡Él ya está muerto, mh!—se sobaba el lado golpeado, si que dolía.

—¡Callate, intento de mujer! —el rubio la miró sorprendido, ¿le acababa de insultar?.

—¿Qué...... dijiste, mh? —ella nunca, repito, NUNCA le había insultado.

—No estoy de humor ¿si? —soltó un bufido. se colocó su capa y aprovechando que esta la cubría por completo, sacó una de sus vasijas del sello sin que Deidara y Sasori se dieran cuenta.

Se alejó un poco de Gaara y coloco la vasija delante de él, hizo unos extraños sellos con las manos y sus verdes ojos brillaron, y ahí lo vio, su corazón se estrujó cuando se percató de aquella mirada de terror y confusión en la silueta semitransparente que flotaba alrededor del cuerpo inerte que yacía en el suelo.

Aquella alma miraba con terror el cuerpo en el suelo, estaba confundido, ¿por qué había dos de él?. Cuando se acercaba e intentaba tocar esa persona que se parecía tanto a él, una extraña fuerza lo alejaba de inmediato ¿qué estaba pasando? Lo único que podía hacer era dar vueltas y vueltas a su alrededor.

—Gaara —escuchó su nombre, se detuvo en secó y buscó a la persona que lo llamaba —ven conmigo, no te haré daño —aquellas palabras lo dijo con tanta calidez que olvido por completo a su "otro yo".

La miró y se acercó lentamente, la niña estiraba los brazos en su dirección como queriendo abrazarle, lo miraba con ternura, por un momento se sintió en paz, estaba por lanzarse a sus brazos cuando una voz lo hizo detener.

—¿Con quién hablas mocosa? —esa voz fría, lo reconoció al instante, lo miró con odio y se alejó de la niña.

—No interrumpas Sasori —le lanzó una mirada filosa y luego se dio cuenta que Gaara se había alejado de ella —no te vayas, solo quiero ayudarte —le sonrió pero él la miraba molesto.

—Estas con ellos ¿no? —apretó sus puños —tengo que salir de aquí —se alejó más y nuevamente una extraña fuerza le impidió avanzar más de 5 metros —¿que sucede? —se preguntó —¿por que no puedo irme?

—Por favor Gaara —le suplicó —no vas a poder alejarte de aquí sin mi ayuda.

—________ deja de hablarle a la nada, mh —el rubio se cruzó de brazos —Ese pelirrojo ya está muerto, ¿ya te volviste loca? —le habló con burla.

—¡Callate de una maldita vez! —lo fulminó con la mirada y este solo la ignoró.

—Muerto.... —ese susurro débil hizo que se olvidara del rubio y lo mirara —estoy..... muerto —el chico sujetó su cabeza mientras se arrodillaba y poco a poco la desesperación lo empezó a consumir.

—Gaara —susurro asustada —¡No les hagas caso! —grito desesperada sin importarle la presencia de los Akatsuki presentes —¡Yo te puedo ayudar! —estiro el brazo en su dirección, si se movía de su sitio el jutsu se rompería —aún hay tiempo —la miró y ella sonrió al ver que logró llamar su atención —la parka aún no aparece, tienes oportunidad —su sonrisa creció cuando se empezó a acercar, pero inmediatamente se borró al ver una sombra negra acercándose a él —¡deprisa Gaara, ya está aquí!

Ese grito hizo que volteara hacia atrás y lo que vio hizo que se lanzara hacia la chica, y por sorprendente que suene, ella lo atrapó y lo envolvió en un cálido abrazo transmitiéndole una paz inmensa.

—ya estás a salvo —susurró cerca de su oído —él ya no te hará daño —beso su frente —descansa un poco querido mapache.

—¿Dara? —susurro cerrando los ojos poco a poco —te extrañe tanto.

—Ahora soy _______ — besó una vez más su frente y poco a poco Gaara fue haciéndose más pequeño —yo también te extrañe —ambos se sonrieron y luego Gaara se convirtió en una pequeña esfera.

Con suma delicadeza metió la esfera dentro de la vasija y luego lo tapó, lo levantó y abrazó el recipiente con una gran sonrisa.

—Una Mirashi —susurró aquella figura oscura mirándola con desprecio —siempre interponiéndose en mi camino —gruñó con fastidio.

—No puedo permitir que te lo lleves —le sonrió triunfante —aún le queda mucho por vivir.

La miró por un largo rato y luego sonrió.

—Ya migraste 2 veces, y sabes muy bien que ese es el límite ¿no? —sonrío con burla —disfrutare torturar tu alma por toda la eternidad, te estaré esperando con ansías.

—¡Ja! —lo mira desafiante —se que me faltan décadas por vivir —sus ojos brillaron con intensidad —recuerda que los de mi Clan tienen ojos especiales.

La sombra gruño cual bestia mientras apretaba el agarre en su guadaña, se le veía furioso.

—¡Todos ustedes son despreciables! —le gritó antes de desaparecer.

_______ suspiró aliviada y se dejo caer al suelo, aún abrazando la vasija.

Ambos Akatsukis estaban sorprendidos, ¡lo vieron!, Gaara se materializó apenas tocó a la niña, presenciaron todo lo que pasó desde ese momento, las miradas que se daban esos dos demostraba el gran amor que se tenían, se amaban, no vieron a la parka pero si pudieron escucharla, el solo sonido de su voz asusta hasta al más fuerte y ellos no fueron la excepción, simplemente lo disimularon muy bien.

—_______ —habló con voz temblorosa el rubio, me retracto, Deidara si se asustó —¿qué fue eso?

—¿lo vieron? —los miró con los ojos bien abiertos ¿como era posible? —¡Sasori! —lo miró alarmada mientras su rostro palidecía.

—¿qué sucede? —preguntó intrigado, todo esto era demasiado irreal.

Justo cuando iba a responder, miró la gran piedra que tapaba la entrada de la cueva, sintió varias presencias afuera ¿por que justo ahora?.

—hay personas afuera —frunció el ceño —Sasori —él la miró —no mueras.

—Esta bien —le respondió serio y la pequeña se escondió tras unos pilares de piedra al lado de la entrada después de guardar la vasija en el sello de su muñeca.

—¿Qué quiso decir, mh? —susurro el rubio desconcertado.

La piedra que bloqueaba la entrada se rompió, ninjas de Konoha entraron y ______ los identificó de inmediato, el rubio hiperactivo que fue su amigo casi 1 mes, Naruto y, la pelirrosa, Sakura. El sensei de ambos y una abuelita que no recordaba a ver visto.

Maldijo mentalmente al rubio de cabello largo al ver como se llevaba el cuerpo de Gaara.

Después de que Naruto y su sensei salieron tras Gaara y Deidara, ella salio sin que las dos mujeres se dieran cuenta de su presencia, le hizo una seña a Sasori y luego salio corriendo.

Lo primordial ahora era salvar a Gaara.

Siempre Te Amare (Gaara Y Tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora