UN POCO DE MÍ
Vengo de camino a casa en mi vieja, pero querida camioneta. Hoy por suerte fue mi último día de clases, ya se puede decir que en una semana me graduaré de la secundaria. Es mediodía y el sol me da un hermoso paisaje de los campos de Kansas.
Kansas es un estado del medio oeste de Estados Unidos, muchos dicen que es el corazón del país, pero no opino lo mismo, para mí es solo un estado rural, lleno de granjas.
En ese momento me pierdo en mis pensamientos y me imagino en una gran convención de escritores, con un montón de personas desconocidas gritando mi nombre y pidiendo mi autógrafo.
O en un cine famosísimo de alguna gran ciudad, colmado de gente, siendo presentada como la directora de alguna película muy famosa.
Una vaca en medio del camino me devuelve a la realidad.
¡Una vaca!
Freno de golpe, causando que las ruedas rechinen y casi impacto contra el pobre animal. Mi respiración está muy agitada, suerte que reaccioné a tiempo.
Nota mental: Debo dejar de soñar despierta.
Cuándo el animal se corre del camino continúo con mi viaje, ahora más atenta.
Tras haber conducido por casi una hora llego a la portera de mi casa, como ya se lo imaginarán vivo en una granja, mis padres siempre se han dedicado a trabajar en ella.
Mi casa es de dos pisos, el verde predomina mires en la dirección que mires, el aire aquí es fresco, mamá tiene un gran jardín y para el fondo de la casa se encuentran los corrales de los animales, tenemos vacas, cerdos, gallinas, caballos, en fin un montón de animales.
Cuándo llego, bajo del coche y entro.
—¿Cómo te fue en tú último día pequeña? —me pregunta emocionado papá.
—Fue genial, el mejor día —nos damos un breve abrazo.
Voy a la cocina, es un lugar agradable, hay una gran mesada en el centro y el mesón dónde está el fregadero, lo que más me gusta de la cocina es que la iluminación natural es genial, tiene 4 ventanas, cubiertas por cortinas celestes, con flores amarillas.
Como me esperaba mi mamá se encuentra cocinando, está haciendo pasta casera.
—Volvi mami —le dejo un beso en la mejilla.
—Hola mi niña, cuéntame ¿Qué tal te fue?
—¡Fue genial mamá! No puedo creer lo rápido que ha pasado el tiempo.
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Inexplicable Conexión
RomansaCautivada por la belleza y la intensidad de ese hombre, queda encantada por él desde la primera vez que lo ve, pero como todos él esconde un secreto. Y ella no esperaba que al entrar ahí su vida diera un giro tan inesperado, lleno de secretos por de...