Sarah
Había pasado una semana, de que Ian y yo habíamos tenido aquella conversación, de que él haya pedido abrazarlo mientras sus lagrimas mojaban mi blusa, nunca había visto a una persona tan rota como a ese chico, sentía simpatía y sobretodo cariño a pesar de que teníamos poco tiempo conociéndolo, quería aprender mucho mas de Ian y quería seguir una gran una amiga para él. Pero con la llegada de Christine, todo se ha complicado mucho, puedo decir que Ian y yo nos hemos alejado, solo hablamos lo necesario, cuando tengo que recordarle que debe tomar su medicamento y este tipo de cosas sobre su tratamiento.
Él también parece esquivo conmigo y esta mas concentrado en la chica que esta sentada en su regazo, mientras ella sonríe como idiota tocando el cabello castaño de Ian, odiaba a Christine y ni siquiera se porque pero la odiaba.
Claro que lo sabes, Sarah.
Es que te esta robando la atención de Ian y eso te enloquece.
Tenia que hablar mi estúpida conciencia, no los entendía porque no eran pareja según Ian pero él permitía que Christine, se lanzara encima de él para abrazarlo y tocarlo como si fueran novios.
Admítelo estas celosa porque no es a ti quien esta besando ni tocando.
Sacudo la cabeza alejando esos pensamientos tontos que no son ciertos, me cruzo de brazos mirando hacia al jardín donde están Ian y Christine, ella se levanta de sus piernas para caminar hacia donde están las margaritas blancas y toma una de ellas, vuelve a sentarse cerca de Ian, él toma la flor de su mano y la coloca detrás de su oreja, veo con desagrado como ella se inclina colocando sus brazos alrededor del cuello de Ian para besarlo en los labios.
Enseguida miro hacia otro lado, siento que mi enojo crece más y más, parezco una intrusa observándolos, cuando estoy a punto de salir de la cocina, tropiezo con Daryl, me agarra de la cintura para que no me cayera.
- ¿Estas bien, Sarah?- Dice frunciendo el ceño, una vez me suelta.
- Si, lo estoy. - Trato de sonreír pero no lo logro, entonces suspiro largamente antes de mirarlo a sus ojos aceituna.
Daryl mira hacia la dirección donde estaba hace un momento y se da cuenta que había estado observando a su hermana e Ian, mis mejillas se sonrojan sintiéndome un poco avergonzada que creyera que los estaba espiando, aunque eso era justo lo que hacia.
Daryl frunce el ceño parece disgustado y enojado de verlos juntos, eso me sorprendió un poco cuando veo que su cuerpo se tensado e igual que su mandíbula.
¿Qué le pasa?
- ¿Te ocurre algo, Daryl?- Digo tocando su hombro, él da un leve respingo como si estuviera perdido en sus pensamientos, entonces se voltea para mirarme fingiendo una sonrisa.
- Claro ¿Por qué iba a pasar algo? Christine e Ian, siempre fueron así. Dicen que no tienen nada pero actúan como otra cosa ¿Eso te molesta, Sarah?
- ¿Qué? ¡No!- Casi que grito mientras más me sonrojo, Daryl suelta una risita y se acerca más a mí.
- Pues a mi me parece que si ¿Quieres que te de un consejo? Aléjate de Ian, no confundas tus sentimientos con él porque realmente saldrás lastimada.
Luego de eso sale de la cocina, dejándome bastante confundida ¿Por qué me habrá dicho eso? No siento nada por Ian, solo cariño de una persona que quiere ayudarlo y apoyarlo.
Cuando salgo de la cocina, me encuentro con Christine que viene hacia a mi muy sonriente, como me gustaría borrarle esa estúpida sonrisa de un golpe.
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A través De Tus Ojos.
General FictionÉl tuvo un grave accidente que lo dejo ciego cuando tenia 20 años ahora tiene 30 desde ese momento ha permanecido encerrado y solitario en su propia casa, su padre que es el único pariente que tiene esta preocupado por él decide contratar a una enfe...