ᴴᵃⁱᵏʸᵘᵘ ᵒⁿᵉ ˢʰᵒᵗˢ; 𝐇𝐀𝐈𝐊𝐘𝐔𝐔

Miya Osamu |✿

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❝  𝐘𝐨𝐮 𝐮𝐬𝐞𝐝 𝐦𝐞 ❞

Estar en una relación con uno de los gemelos era algo que cualquier persona querría evitar, o eso es lo que pensaba Suna Rintarou. Pero para su desfortunó su mejor amiga anhelaba estar con uno, Osamu, llevaba enamorada de él desde la secundaria el día de ceremonia de apertura.

Pero lastimosamente, el gemelo peli gris había conseguido novia en su segundo año de preparatoria. Ella era un año menor que él, pero eso le venía dando igual. 

Muchas veces había intentado confesársele pero, bueno los contratiempos eran algo que cada día estaban en pie al lado de la chica.  Y cuando al fin tuvo una mínima oportunidad para acercársele a ofrecerle de su comida en uno de los entrenamientos del equipo de voleyball, solo le hablo para preguntarle por Rintarou. 

Cuando se enteró por su mejor amigo, se sintió triste y estúpida, sin embargo podía ver como la pareja posiblemente no estaba en su mejor momento, lograba escuchar gritos por parte de la fémina y Osamu. 

Por algún juego del destino había logrado formar una rara amistad con el joven. Y se llevaban bien, pero lo que más le alegro de todo es que lo había visto reír tan, feliz. Y en ese momento supo, que Osamu era probablemente el amor de su vida. 

Un día extrañada fue hacia la puerta de la entrada de su casa para ver a un Osamu algo agitado, y esa noche, había cambiado todo en su "amistad", lo hicieron. 

— ¿Osamu-kun? — le miro extrañada esperando una respuesta del jadeante peli gris. 

— Te necesito tanto. 

Pero no fue solo esa noche, si no que otras más.

Solían tener pequeñas citas a escondidas y no estaba bien, tanto como Suzuki como el peli gris lo sabían pero ninguno quiso hacer caso. No hasta que según Osamu terminó a su novia. Ahí ___ veía una pizca de esperanza al salir con su deseado chico. 

Salieron más veces y era algo realmente hermoso.  Bueno, lo era para Suzuki, pero lo único que rondaba por la cabeza del gemelo menor, era si lo que estaba haciendo era lo que realmente quería. 

Se sentía feliz, tranquilo y con amor y dulzura alrededor por la presencia de la castaña, sin embargo algo, muy dentro y escondido, lo hacia extrañar a su ex novia. 

Fue en una fiesta a donde los dos asistieron, en la casa de Aran, donde la castaña lo notó raro e impaciente. Y cuando lo quiso presentar como su pareja ante todos. 

— Bueno ahora somos—

— Somos muy buenos amigos, ¿verdad ___-chan? — le miró esperando que le siguiera la corriente, y algo molesta lo siguió.

— Síp. 

Iban de regreso a casa de la castaña cuando decidió preguntar sobre su raro comportamiento, fue una pequeña plática que la dejó aún más desconcertada. 

— ¿por qué dijiste eso Osamu?

— Todavía es algo pronto para que todos lo sepan, vamos a esperar un poco ¿está bien? — le dio un corto beso en la frente y la dejó en la puerta. 

Y después de compartir un mes y medio de salidas y acostones con Suzuki, porque sí, hay que llamarlo por su nombre, contactó a su ex novia. Yuri Kimura.  

Arreglo las cosas con ella, hablaron y de nuevo, ya sentía que la quería, y como si el mes y medio con la castaña fueran borrados, regresaron, no sin antes ir a casa de Suzuki. 

— ¿Osamu, qué ocurre?

— Necesito hablar contigo ___-chan.— esas palabras claras, la alarmaron. 

— Claro, pasa.— intentando ocultar su nerviosismo le habló. 

— No, será algo rápido.— tomándole las manos con sutileza logró hacer que la chica le mirara. 

No quería ser un maldito pero, tampoco quería engañarla respecto a sus sentimientos, cuando la única locamente enamorada era ella, o era lo que él pensaba. 

— Esta semana, hablé con Yuri.— con calma trató que la fémina lo entendiera. 

— ¿Y? — le preguntó haciéndose la desentendida cuando perfectamente sabía que rumbo iba a tomar su conversación. 

— Lo intenté ___-chan, tal como tú dijiste, pero, la extraño.— y ahí estaba lo que tanto se temía escuchar. 

Pero Suzuki no iba a llorar, o al menos no ahí, sabía que podía pasar eso y aun así no lo detuvo. 

— Está bien Osamu, me alegra que encuentres alguien de quién estés enamorado. 

— ¿no vas a golpearme? — le cuestionó perplejo. Pues esperaba un golpe y reclamos seguros. 

— Estuve completamente feliz, por un mes y medio, sabía lo que hacÍa, y si tú encontraste también a alguien que haga latir tanto tú corazón como tú lo haces con el mío, me siento bien por ti. — le sonrió débilmente. 

Mientras le soltaba las manos, y sin saber qué más decir. 

— Gracias por—

— No me agradezcas nada Osamu, siento que me contrataste para algo y que el plazo del contrato terminó.— solo quería salir corriendo a llorar tranquilamente. 

Cada palabra que usaba Suzuki lograba llegar lo más profundo, en el alma de Osamu.  Sin embargo; no había vuelta atrás.  Dio media vuelta y. 

—Nos vemos ___-chan. 

Ya a unos pasos de la casa de la chica. Se escuchó el portazo de parte de la castaña, le hizo saber que sí, era un imbécil, ¿el más imbécil de los dos hermanos? sí, probablemente.  Pero ahora que estaría de nuevo con la persona de la cual realmente estaba enamorado, sería feliz, o al menos eso creía él. 

Mientras el delicado cuerpo de la chica caía lentamente recostándose en uno de los  sofás. Sonriendo y repitiéndose lo tonta que había sido al aceptar que la usara de tal forma inconscientemente. 

bueno a todas las fans de Oikawa-san, quiero decirles que tengo una historia en proceso sobre él. En mi perfil. Y por fi :c hagan pedidos que las ideas se me acaban aaa. Claro no es obligatorio. 

Y muchas gracias por votar y comentar cosas tan lindaaas.