Escenarios con los personajes de Haiyuu que probablemente han pasado por tu imaginación.
Los personajes pertenecen a Haruichi Furudate.
Excepto algunos extra que agregare a las historias.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Suzuki siempre ha evitado juntarse con gente así, pero ellos, fueron la completa excepción a lo largo de su vida, bueno, dentro de la preparatoria, mudarse de Miyagi a Tokyo, a la academia Fukurodani, las notas no fueron tanto problema, pero las personas cerca sí. Comenzando por el primer día de clases.
— Hola, soy Bokuto Koutarou.—aquel peli gris, bastante alto y con un cuerpo igual de formado, había sido la primera persona en hablar.
Y es que no culpa a los demás, ponerles la peor cara sin querer siempre, era como una cualidad.
— Hola...— le respondió la chica acomodando sus cosas en su bolso para salir del salón.
Koutarou pacientemente esperó a un lado, viendo como la chica guardaba sus cosas siendo algo ingenuo a su forma de incomodarla, porque verdaderamente el no se daba cuenta, quería esperarla para hablar con ella, y que ésta no se sintiera sola en su primer día.
— ¿Necesitas algo? — preguntó de nuevo.
—Nop, solo espero a que guardes tus cosas.— le respondió sonriéndole.
— No tienes porque...— habló un poco insegura, debatiéndose en si realmente quería que se fuera.
— No te preocupes, no tengo nada que hacer.—le contestó de nuevo sonriente observando como la chica había finalizado de guardar sus cosas.
Bokuto tomó su muñeca sacándola rápidamente de salón. Mientras que en los pasillos de tercer grado, solo se escuchaban pequeños murmullos que a la chica no le agradaban en nada.
— ¿Bokuto-san, podría no correr por favor?—la chica trató de hablar mientras seguía siendo jalada por el capitán del Fukurodani.
— ¿correr? solo estamos caminando rápido.— mencionó dejando totalmente confundida a a chica.
Llegaron a los pasillos de segundo, a cierta clase, mientras el chico se asomaba a buscar a alguien y Suzuki solo lo veía, bueno, para ser su primer día de clases, ser arrastrada por un chico que llamaba suficientemente la atención no estaba en sus planes.
— Akaashi, mira es mi amiga, acaba de llegar a la escuela.— señaló Koutarou a la más bajita para que Keiji pudiera observarla.
— Mucho gusto Akaashi Keiji.— se presentó, como siempre tan amable.
— Igualmente mucho gusto, Suzuki (yn).— mencionó con la misma amabilidad.
— ¡No se vale, a mi no me has dicho tu nombre ni que te da gusto conocerme! — refunfuñó el capitán bastante alto, cosa que aturdió un poco a la chica, pero a la vez le dio risa.