Escenarios con los personajes de Haiyuu que probablemente han pasado por tu imaginación.
Los personajes pertenecen a Haruichi Furudate.
Excepto algunos extra que agregare a las historias.
perdón a la personita que lo pidió, por tardarme tanto, espero que les guste.
male reader
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❝ 𝐉𝐚𝐜𝐤𝐞𝐭 ❞
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Ya había caído la noche en los dormitorios de la academia Shiratorizawa, y con ellos la pelea de Matsui (yn) con sus padres, por una simple tontería. Gracias a los antiguos diarios que había dejado el chico en su casa, sus responsables los leyeron y ahora eran bien sabidos de la sexualidad de su hijo. Y por aquello le habían llamado a altas horas de la noche, solo para atormentarlo.
Padres estrictamente religiosos, y con la mente más cerrada del mundo, ¿qué más se podía esperar de ellos a parte de las palabras "que Dios te guie por el camino del bien"?, ni siquiera un maldito delincuente para que Dios lo guiara por el camino del bien, mejor aún, no estaba cometiendo ningún delito.
— ¡no es ningún delito para que lo digas de esa forma madre! — espetó con notorio enojo, sí pensaba que sería difícil decírselos, siendo como son pero, no creía que tanto.
— ¡claro que lo es ¿sabes lo que dirán las vecinas y los amigos de tu padre si te ven con alguien?! — le reclamó la señora, seguramente echando humo por los ojos.
— Tu madre tiene razón, ni siquiera vengas a vernos el fin de semana, que nadie te va a recibir.— las palabras frías de su padre lo habían lastimado.
Con su padre, siempre había mantenido una relación algo "estrecha" si es que se le puede llamar así. Y que ni siquiera lo quisiera recibir en su casa, era bastante doloroso.
— Has dejado de ser nuestro hijo, así que despídete de todo.— volvió a hablar su madre, usando el mismo tono de voz que su padre.
— Me has decepcionado tanto.
Fue lo último que le había dicho su padre, antes de ponerse a temblar en el baño de su dormitorio, con los ojos picándole por las próximas lágrimas que ya se acercaban. "Decepción". Siempre tan resonado en su infancia. Y ahora que pensaba que todo había cambiado y que podía tener una estabilidad familiar se había ido todo a la basura.
El nerviosismo de qué pasaría con su familia, con su educación y con su procedente futuro lo comenzaron a alterar de sobremanera, poniéndolo a temblar de los pies hasta las orejas. Tanto que no había escuchado entrar a Ushijima buscándolo.
— ¿estás bien Matsui? — tocó la puerta del baño. Obteniendo respuesta nula. —Voy a pasar.
Y como fue, entró y lo encontró tirado en el piso del baño, temblando abrazándose a si mismo. Pensando que tenía frío y siendo escéptico a las circunstancias, le habló de nuevo.
