33

368 22 3
                                    

Jinah 🍯

Un cuerpo pesado me sobresaltó de mi atolondrado sueño. Si de por sí tenía un sueño ligero, el hecho de que alguien cayese junto de mí en la cama, me alertó en demasía. Y no sólo fue por la presencia en sí, sino por el olor que de él emanaba.

―Baekhyun, lárgate, todavía estoy molesta contigo ―mascullé dándome la vuelta para así no tener que mirarlo y me cubrí con las sábanas con rudeza, esperando que el movimiento lo sacara de mi cama―. Además hueles a alcohol.

No dijo nada, ni siquiera hizo por moverse lo cual me enfureció de mayor forma y prendí bruscamente la lampara de mi lado, de igual forma me senté y contemplé que estaba hecho un ovillo. No me importó su posición y lo empujé queriéndolo alejar de mí cuando su mano buscaba abrazar mi cuerpo.

―Vete por favor ―rogué pero de nada funcionó ya que me jaló consigo.

―El que está enojado contigo soy yo ―balbuceó colocando su cabeza sobre mis piernas.

Qué contradictorio sonaba.

―Entonces déjame dormir y no hagas una tontería ―rogué, volviendo a intentar apartarlo de mí―. Mañana no recordarás nada.

Sé que también debería ser paciente ya que en parte era mi culpa que estuviese así pero lidiar con borrachos no era mi fuerte, y no quisiera que Baekhyun hiciera algo de lo que después pudiera arrepentirse.

―Jinah ―llamó con una voz mucho más afín a su tono real de voz.

Quizá no había bebido tanto, en realidad sus palabras se escuchaban fluidas y bien hiladas sin embargo me daba miedo que sus acciones no fuesen igual de coherentes.

Me crucé de brazos aun teniendo su cabeza sobre de mí y sus brazos rodeando mis piernas pero de un momento a otro, esas manos se escabulleron bajo las sábanas y se acercaban peligrosamente a la piel que no era cubierta por el short de la pijama.

―Contéstame algo ―pidió de una forma mucho más autoritaria pero sin llegar a ser lo suficientemente rudo como horas antes.

―Mm ―asentí aun sabiendo que no me podía ver.

―No sentiste nada cuando Junhong te tocó ¿verdad?

Su voz fue un claro hilo lleno de desesperación y desconsuelo. Realmente estaba dudando de mis sentimientos y eso no podía ser más desalentador. Aunque la respuesta era una obvia, esperaba que entre su borrachera pudiera creerme.

―Por supuesto que no, Baek ―afirmé con la mayor seguridad que pude demostrar.

No estaba segura si aquella respuesta lo tranquilizó pero el que haya apretado su agarre contra mis piernas, me hizo suspirar y soltar el aire negativo. No obstante, aquella sensación no duró ni un par de segundos.

Su mano que descansaba en una de mis piernas comenzó a subir muy lentamente por el muslo dejando un camino de piel erizada y cuando creí que pudiese colarse por debajo de la tela, Baekhyun se elevó de forma que quedó sentado junto de mí.

En el momento que nuestros ojos se conectaron logré notar satisfacción en los suyos, es decir que sí me había creído y eso me hizo sentir mucho más tranquila, sin embargo cuando su mano conectó con mi mejilla otra vez un temblor me inundó. ¿Qué era lo que estaba planeando? Y especialmente, ¿estaría dispuesta a corresponder sus acciones?

―Y cuando te acarició yo, ¿qué sientes?

«Sentía mucho, demasiado».

Las manos traviesas de Baekhyun me desconcentraron de mi verdadera respuesta, no esperaba que me colocase a horcajadas sobre él y aunque quise apartarme, sus brazos fueron mucho más agiles y sostuvieron mi cintura con fuerza.

Candy » BaekhyunDonde viven las historias. Descúbrelo ahora