Capítulo 13

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*NARRA ALESSANDRA*

Termino de preparar la maleta de Allegra, mientra Ángelo la sostiene en brazos, hoy es nuestro secuestro. A pesar de que fue solamente ayer, cuando me dijeron lo que planeaba ayer. Alina está en su habitación, Adriano puso algo en su bebida para dejarla dormida. Por lo que ni siquiera notará, que nosotros estamos marchándonos.

Cierro la maleta de Allegra, y reviso que estemos llevando todo lo que necesitamos. Ángelo se mantiene en silencio, y me pasa a Allegra para bajar las maletas. Mi pequeña está totalmente dormida, y con su pijamita puesto para que vaya cómoda. Cuando llegamos abajo, observo a todos los guardias moverse sin parar. Toman las maletas que lleva Ángelo, para subirlas a la camioneta, y también las de los demás.

-Escúchame, preciosa-me dice Ángelo, abrazándome de la cintura.-Prometo que trataré ir a veros, siempre que pueda. Además hablaremos todos los días, por teléfono. Allá no les pasará nada, los mejores guardias van con ustedes. Y por supuesto, siempre estaremos comunicados con los guardias.-Mis ojos se llenan de lágrimas, y yo le abrazo sin aplastar a nuestra pequeña.-No llores mi vida, todo va a estar bien. Te lo prometo, te lo prometo.

-N-no me quiero ir...-le digo entre sollozos, mientras él acaricia mi cabello.

-Va a ser poco tiempo Aless, ya lo verás-dice Alexis, uniéndose al abrazo.

-Chicas, ya se tienen que ir-dice esta vez, Adriano.-Cariño, tú no te preocupes. Iremos siempre que podamos, y estaréis bien.-Él me abraza con cuidado, y deja un beso mi mejilla. Después toma a Allegra, y comienza a repartir besitos por su carita.

-Te amo, te amo...-dice Angelo, abrazándome fuerte. Besa mis labios, y le atraigo hacia mi para continuar su beso. Por el rabillo del ojo, compruebo uno de los guardias muy curioso. Es el único que no quita el ojo, de la escena mientras su cara refleja enojo.

-Yo te amo mucho más, amore mío...-me acerco a su oído, y comienzo a susurrar.-Allí hay un guardia muy curioso, no le quitéis el ojo.

Él asiente con la cabeza, y le señalo disimuladamente quién es. Después toma a Allegra, y se despide de ella mientras yo me despido de los demás. Antonio me abraza durante más tiempo, y acaricia mi cabello cuando estoy entre sus brazos.

-Antes de que te vayas, quería pedirte disculpas. Por hablarte de esa manera, cuando despertó Armani jr-dice él, en mi oído.-De verdad, toda esta situación me sobrepasa.

-No tienes que disculparte Antonio, lo entiendo.

-Solamente te pido, que protejas a mis hijos. No estoy diciendo que vaya a pasar algo, solamente lo digo en el caso de que algo suceda.

-Lo haré, nosotros estaremos sanos y salvos.

Antonio besa mi mejilla, y abre la puerta del coche para que entre. Allegra ya está en su sillita, y Ángelo termina de atar su cinturón. Después besa una vez más mis labios, y cierra la puerta del coche. Yo voy detrás con Armani Jr, y delante van dos guardaespaldas. En otro coche atrás, va Alda y los demás niños. Ambos niños están ya dormidos, por lo que yo me despido con la mano conforme nos alejamos de allí.

Mis ojos se llenan de lágrimas sin poder evitarlo, aquí se queda una parte de la familia y eso me rompe el corazón. Los guardias no dicen absolutamente nada, en el coche solamente se escuchan mis sollozos. Trato de calmarme, todo esto será para mejor, y acomodo la manta de ambos niños a mis lados.

-Señorita, si lo desea puede dormirse. Tardaremos bastante en llegar, no se preocupe, lo tenemos todo controlado-habla uno de los guardias, mirando hacia mi lugar. Por lo que he escuchado, éste es uno de los mejores guardias de Adriano.

-No se preocupe, no tengo mucho sueño.

Él me dedica una pequeña sonrisa, y asiente regresando su mirada hacia delante. De mientras, mi teléfono suena anunciando un mensaje.

-Eres el lucero, que ilumina mi vida... Te amo tanto... No sé qué sería de mí, sin vosotras. Mi amor, mi vida, mi cielo, pronto la familia volverá a estar unida.

-Quiero que esto acabe ya, que nadie nos separe de nuevo. Y que podamos estar juntos tranquilos, viendo a nuestra hija crecer. Te necesito, y te necesito a mi lado.

-Papá intentará solucionar esto, cuanto antes. Después nos casaremos, ampliaremos la familia y seremos felices todos juntos.

-¿Ampliar la familia? Wow chico, aún estamos con la primera. No corras tanto, primero hay que centrarse en el problema que tenemos.

-Cierto, principessa. Tengo que irme, vamos a reunirnos en el despacho. Avísame, cuando llegues.

Le escribo un último mensaje, haciéndole saber que estoy de acuerdo, y apago la pantalla. Allegra se remueve en su sillita, pero se queda totalmente tranquila.

-Señorita, ya hemos llegado-anuncia uno de ellos, aparcando en una nueva casa.

El trayecto ha sido realmente largo, y cansado, al estar sentada entre dos sillitas que me apretaban. Uno de los guardias, toma la sillita de Allegra y, me tiende su mano para bajar. Doy la vuelta al coche, y cojo a Armani jr. en brazos que se reacomoda. La puerta de esta nueva casa, se abren y Aimé sale corriendo con los brazos abiertos.

-¡Por fin! ¡Por fin!-grita ella, hasta que yo le hago seña para que guarde silencio.-Ay dios, os he echado muchísimo de menos.

La abrazo, como puedo, y ella nos abre paso para dejar a los niños. Dejo a Armani en mitad de la cama, y el guardia deja a Allegra con su sillita sobre la cama también.

-¿Dónde están Alda y los demás niños?-le pregunto, antes de que abandone la habitación.

-Están llegando, tuvieron un pequeño problema. No se preocupe, están localizados. Puede descansar, si necesita algo díganoslo.

-De acuerdo, muchas gracias.

Él asiente, y abandona la habitación en silencio. Aimé indica con la mirada, si puede tomar a Allegra y yo asiento. Mi pequeña no se queja, al revés parece muy cómoda en sus brazos.

-Es preciosa-susurra ella, para no despertarles.-Tenía muchísimas ganas, de veros otra vez.

-Nosotras también teníamos muchas ganas, de verte y estar contigo.

La abrazo de nuevo y, cuando nos separamos, ella se sienta en la cama con la bebé. Yo tomo mi teléfono, avisándole a Ángelo de que hemos llegado. Uno de los guardias trae nuestras maletas, y le doy las gracias mientras las tomo. Busco las cosas de Allegra, y las coloco sobre mi mesita para tenerlas a mano.

-Luciano será ahora, tu nuevo guardaespaldas-me comenta Aimé, mirándome.

-¿Quién es ese?-le pregunto, frunciendo el ceño.

-Es uno de los mejores guardias de Adriano, es el que ha traído a Allegra ahora-asiento con la cabeza, y me siento a su lado.-Te aseguro que puedes confiar en él, es un hombre muy bondadoso y nunca se va a despegar de ti.

Vuelvo a asentir, y Alda aparece por la puerta anunciando que llegó. Armani jr, se quedará conmigo esta noche. Así ella se encarga del resto de los niños, y nos podemos adaptar poco a poco. Me despido de Aimé, y ella abandona la habitación. Un nuevo mensaje llega a mi teléfono, asustándome por un segundo.

-Buenas noches, mi reina. Papá os ama mucho, no lo olvidéis nunca.

-Buenas noches, papá. Allegra y mamá, te aman con todo su corazón.

Siempre unidosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora