CAPÍTULO 19 - VUELTA A LA RUTINA.-

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            Maite vivía en una nube desde que al fin abrieron sus corazones, era como si se hubiera quitado un peso de encima, pues los sentimientos ocultos actuaban como una losa pesada. Su presente parecía más liviano, ligero como una pluma que se mueve al compás del viento. Era como si reviviera un amor de juventud, y sus hormonas y su corazón fuesen a mil por hora cada vez que pensaba en Camino, recordaba sus besos, o sus palabras cuando le confesó que la amaba. Tenía que poner al día a su amiga Sophie del giro radical que había tomado su vida, de su nuevo trabajo, pero ante todo, de su nuevo y hermoso futuro. Era temprano, seguro que la pillaba a punto de ir al L´École, mejor le mandaba un mensaje y la citaba para una videollamada, quería ver su reacción, era lo que más le gustaba de ella, su espontaneidad. No había conocido a una persona más auténtica y maravillosa en toda su vida, gracias a ella recuperó la inspiración, aunque las ideas no surgen de la nada, surgen de repente, y sin previo aviso, una chispa se enciende en algún lugar de nosotros, a raíz de algo vivido, un recuerdo, o alguien que nos hace sentirnos inspirados. Estas personas nos otorgan una fuerza que puede dar lugar a nuestras mejores creaciones, y aún más, pues nos ayudan a moldear una mejor versión de nosotros mismos. Cuando encuentras ese tipo de personas, que te motivan a actuar, a reflexionar, no puedes hacer otra cosa que mostrarlas al mundo, para que otros puedan recibir parte de su luz. Y entre esas personas también se encontraba Camino.

El timbre de la puerta empezó a sonar, así que dejó por un momento lo que tenía entre manos y se fue a abrir la puerta.

Buenas Felicia, que sorpresa -


Perdona que haya venido sin avisar. ¿Le importa? -

No, siéntase como en su propia casa. ¿Qué la trae por aquí? -


Quería saber cómo van las clases. ¿Hay alguna obra de mi hija? -


No, aquí no. Camino tiene mucho talento, pero todavía no está preparada para exponer -


No creo que pueda seguir viniendo a las clases. Empieza el instituto y tendrá que centrarse en los estudios, además de ayudar en el restaurante -


Sería una pena que tome esa decisión -


El restaurante es un negocio familiar y todos tenemos que arrimar el hombro. Por lo menos hasta encontrar nuestro futuro -


El de Camino podría ser el arte -


El futuro de Camino será estudiar la carrera universitaria con mejores salidas profesionales -


Eso tendrá que decidirlo ella, ¿no?. Los tiempos han cambiado Felicia, ahora hay más oportunidades -


Habrán avanzado, pero no lo suficiente como para vivir del arte, menos ahora con tantas restricciones. Mis hijos heredarán el restaurante, pero no quiero una vida tan sacrificada para ellos, por eso les doy la oportunidad de estudiar para labrarse un futuro mejor -

MAITINO: UN AMOR MÁS ALLÁ DEL TIEMPO.-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora