𝗥𝗘𝗗 𝗥𝗜𝗚𝗛𝗧 𝗛𝗔𝗡𝗗 Ⅰ 𝘁𝗵𝗼𝗺𝗮𝘀 𝘀𝗵𝗲𝗹𝗯𝘆

t r e i n t a y s i e t e

Camden Town, Inglaterra

Arabella yacía sentada en una pila de cajas mientras miraba a los hombres trabajar y cargar todo a los botes de exportación, observó de reojos al ojiazul y notó a Johnny Dogs acercársele en forma amistosa, así que simplemente desvío su mirada de ambos hombres y siguió en silenció mirando nada más que el paisaje gris.

-¿como va la vida, Tom?.-preguntó el hombre mientras le palmeaba la espalda

-cada vez mejor, Johnny, cada vez mejor.-aseguró el ojiazul mientras fumaba su cigarro.

-vamos, Tom, en serio ¿Cómo estás?.-le cuestiono Dogs.-sabes que odio verte soltero, tengo una prima muy atractiva, haría de tu vida un infierno, te la merecerías.-se rio el hombre con su típica actitud chispeante.-hace mucho tiempo que no tenemos una buena boda.-soltó Johnny mientras cargaba una caja.

-estoy bien así.-murmuró Thomas mientras mantenía su mirada en otro lugar.

-oh Tommy, ya se a lo que te refieres.-se rio otras vez su amigo y le golpeo el hombro cuando notó en donde estaba la mirada azul del hombre.-ya tienes quien haga de tu vida un infierno.-asintió mientras miraba a la joven Bella fumar un cigarro sentada en la pila de cajas y moviendo sus pies en el aire.-Arabella es increíble, linda, divertida, inteligente, sensual, tiene todo lo que Thomas Shelby necesita ¿no es así?.-preguntó Johnny aun con su mirada café sobre la muchacha.

-¿has echado un vistazo dentro de estas cajas?.-cuestionó Tom cambiando de tema y su amigo le miró mal.

-¿por qué no quieres hablar sobre Arabella? ¿no quieres confundir sexo con amor? porque yo lo haría si se tratara de una mujer como ella.-soltó como si nada haciendo que el ojiazul lo mirase.

-ella es solo parte de mi familia y mi compañera en el negocio, sabe sobre todo esto y como ayudarme, es todo.-se encogió de hombros como si no le importara.

-¡oh Thomas! a mi no me puedes mentir, he visto como la miras, he visto como la cuidas y se que te encanta como ella simplemente hace lo que tiene que hacer sin miedo, te gustan las chicas rebeldes, las que no te tienen miedo y es exactamente lo que Arabella hace ¿por qué no lo admites? ella vale la pena o acaso no has notado como está junto a ti siempre, no importa lo que hagas o lo estúpido y arriesgado que pueda ser, ella simplemente está a tu lado haciendo el trabajo de la mano contigo, hasta te cuida igual como tu la cuidas a ella, no seas un idiota Thomas, esa mujer vale más de lo que crees, además, necesito ir a una boda para tener una excusa para emborracharme hasta no poder sostenerme.-escupió haciendo que Tom soltara una pequeña sonrisa para luego negar.

-voy a tener fe en la familia, así que ni siquiera voy a contar.-cambió de tema repentinamente y haciendo que Johnny bufara.-si lo que hay dentro de las cajas son veinticinco y se transforma en veinticuatro, entonces se quedará en veinticuatro, pero si veinticuatro se transforma en veintitrés, entonces eso sería un impuesto y nosotros no pagamos impuestos.-murmuró mientras le abrazaba por los hombros.

-claro que no, Tom.-negó Johnny 

-buen hombre.-asintió el ojiazul para luego alejarse de él.

-¡recuerda lo que te dije, Thomas!.-gritó Dogs cuando vio al hombre caminar hasta la muchacha.

-vamos adentro.-dijo él cuando estuvo frente a Bella y está asintió para luego tomarle la mano y caminar juntos hasta el interior del edificio.

Subieron las escaleras y rápidamente se toparon con la lujosa iluminación, amueblado que Arthur había puesto en el lugar y no se tardaron en oír los escandalosos gemidos de una mujer que provenían de la sala central.