La arena se sentía suave bajo la planta de mis pies; apenas llegamos dejamos las maletas en la habitación, que por cierto es hermosa y corrí a la playa como niña pequeña con Cole de la mano.
Cole llevaba mis zapatillas en su otra mano y me veía con una sonrisa de lado soportando lo más que podía el sol que pegaba de frente pero poco a poco se ocultaba más.
Desde que llegamos veían a Cole un poco serio, quizá distraído. Pero me sentía tan feliz al estar con él en ese lugar tan precioso.
-¿Podemos sentarnos por aquí, Audrey? - pidió Cole al ver un pequeño puesto como un mini bar.
-Claro - respondí un poco distraída, por estar tratando de acomodar mi sandalia.
Cole se sentó y le pidió a la linda chica que atendía algo, no escuché que fue porque aun tenía problemas con mi sandalia.
-¿Qué pasa? - me preguntó viendo confundido como aun estaba un poco alejada de él, le hice una seña de que no pasaba nada y vi como la chica le entregaba lo que había pedido que eran 2 cervezas Corona; mas allá de un "Aquí tienes" "gracias" ella se quedo hablando con él, con una sonrisa radiante y por su postura podría jurar que le estaba coqueteando.
Force mi sandalia para acercarme rápidamente a Cole, pero en el intento uno de los cordones que sostenía la sandalia se reventó haciendo un pequeño sonido. Rodé los ojos y tomé la sandalia con la mano, llegué al lado de Cole con un puchero en los labios.
-Necesitamos volver al hotel - le dije acercándome a él y dejando un beso en sus labios, solo para la chica ya dejará de verlo.
-¿Mmm? - Cole volvió a acercar sus labios a los míos para prolongar el beso - ¿Por qué?
Alcé mi mano mostrándole la sandalia rota, él la tomó y la analizó para buscarle arregló, tome la cerveza que estaba en la barra y la lleve a mis labios para beber, la cerveza no era mucho de mi agrado pero después de ese tiempo bajo el sol pues la necesitaba.
-Vamos, te cargaré de regreso al hotel.
Él lanzó mi sandalia al bote de basura, estaba a punto de reclamarle cuando me di cuenta que era inútil regresar con la sandalia rota al hotel, al igual que sería inútil solo quedarme con una, así que me quite la otra para ponerla en el mismo bote.
Cole llevo la cerveza a sus labios para beberla toda de un sorbo. Sacó un billete y lo puso en la barra, lo mire alzando una ceja.
-Arriba, niña - se agacho para que yo pudiera subir por su espalda, y así lo hice cruzando mis piernas en su cintura.
***
Después de una ducha rápida para deshacerme de la arena que se encontraba en mi cuerpo, me acosté en la cama pues estaba bastante agotada.
-Heey, no te duermas - Cole palmeo mí espalda repetidamente, haciendo que abriera los ojos - Vamos a cenar con mis amigos.
-¿Mmm? - estaba un poco desorientada, y mis ojos pesaban demasiado, era una misión imposible manternelos abiertos.
-Audrey, no quiero llegar tarde, vamos, arriba - agitó mi pierna - Haz lo que tengas que hacer porque a las 7 salimos de la habitación estés lista o no.
-¿Por qué tan amargado, Cole? - pregunté aun boca abajo y no muy despierta, pero realmente había notado esa actitud rara desde que bajamos del avión.
Me miró alzando una ceja, después rodó los ojos y entró al baño sin darme una respuesta.
Por mi parte solo me giré en la cama y sin poder controlarlo me quedé profundamente dormida.
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Class #482 •/Cole Sprouse/•
Teen FictionEn el St. Marcus High todos los alumnos eran buenos, obedientes, ejemplares... Excepto por algunos, aquellos alumnos con peor comportamiento y peor calificación eran enviados a una clase especial, una clase que ningún profesor quería... La clase #48...