Comencé a caminar por los pasillos de el hotel convenciendome a mi misma que el dolor era algo mental y completamente soportable, iba en las pantuflas del hotel a un paso sumamente lento mientras pensaba en que mierda hacer.
Por una parte si volvía con ayuda de mi padre y sin Cole a casa se iba a joder la única oportunidad que mi padre le iba a dar a Cole, ¿Se merece que salve su oportunidad?
Y por otra parte si me quedaba no era para ir a la boda, no quiero ir a la boda a ser mas maltratada, más comparada con Lili y a pasar más malos ratos. Así que me hace preguntarme en a que me voy a quedar, a deprimirme más encerrada en la habitación mientras Cole va y disfruta la fiesta de lo más normal, aun así todavía tenía todo ese día para decidirlo, pues la boda es mañana.
Giré por uno de los pasillos entrando a un nuevo piso, entonces vi a Cole saliendo de una de las habitaciones; el iba mirando su celular, así que me pegué a una pared para que él no logrará verme, caminé hasta la puerta de donde él salio y por poco tiempo me cuestioné si tocar a la puerta o no, en el mejor caso es la habitación de Keller o Kendrick y tengo que inventar algo tonto para justificar mi presencia; en el peor de los casos es la habitación de Lili y pues... No se que pasaría en ese caso. Mire el número y recordé el piso, caminé al elevador mientras anotaba eso en las notas de mi celular.
Llamé al elevador dispuesta a volver a mi habitación, una vez ahí busque entre mi equipaje mi bikini pues quería ir a la playa, me cambié rápidamente poniéndome unas sandalias y un sombrero, me encontraba tomando todo lo necesario para pasar la tarde fuera.
-Creo que no tengo una invitación para ir contigo ¿verdad? - levanté la vista y me encontré con Cole recargado en el marco de la puerta del balcón.
Rodé los ojos y no le contesté, entre al baño sin cerrar la puerta pues solo iba por la pomada y las pastillas para el dolor, también por el bloqueador solar. Me preparé para ponerme la estúpida pomada, y al girarme para ver la zona en el espejo me di cuenta del hematoma que se extendía en la parte baja de mi espalda, hice una mueca y traté de colocar la pomada por toda el área con el color rojizo y morado.
A través del espejo pude ver como Cole me miraba, en sus ojos había demasiado, ni siquiera podría decir que exactamente, hasta que hizo ese gesto extraño que solo hace cuando esta enojado, así que rápidamente me quité del espejo impidiendo que me viera más.
-¿Se te perdió algo? - le pregunté enfadada.
-Mi novia, no se si la has visto por ahí - contestó recargandose en la pared.
-¿Tienes novia? - me crucé de brazos alzando ambas cejas con incredulidad.
-¿Por qué siempre haces esto...? - me preguntó con su semblante completamente serio.
-¿Que hago, Cole?
-Huir cuando las cosas se ponen difíciles, evitas hablarme y luego lo resolvemos porque yo te sigo buscando - explicó un poco alterado.
-¿Con resolver las cosas te refieres a qué yo te perdonó solo por...? - mi voz se cortó.
-¿Por lástima, Audrey? - intentó acercarse a mí.
-Por amor, Cole, las cosas que haces solo las puede perdonar alguien que siente mucho amor - contesté evitando tenerlo cerca.
Tomé el bolso que estaba preparando y cuando abrí la puerta busqué su mirada.
-Lo que de verdad debes estar cuestionandote es ¿Cuánto más puede soportar este amor? - salí de la habitación dejándolo ahí.
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Class #482 •/Cole Sprouse/•
Novela JuvenilEn el St. Marcus High todos los alumnos eran buenos, obedientes, ejemplares... Excepto por algunos, aquellos alumnos con peor comportamiento y peor calificación eran enviados a una clase especial, una clase que ningún profesor quería... La clase #48...