¿Se suponía que debía salvarlo? ¿Salvarlo de que? ¿Del regaño de la maestra? Aunque a decir verdad sí que había sido extraña su repentina aparición.
—¿Sucede algo?—Beth me habló confundía mirándome.—¿Esta todo bien? ¿Eso realmente es una cámara?—luego ella se agachó para obsérvalo.
—No estoy segura aún. Aunque es lo más probable.
—Es raro, ¿por qué alguien pondría cámaras en nuestra habitación?
—Para espiarnos. Es obvio, lo curioso no es ¿por qué? si no, ¿quién?
—¡Algún acosador!—gritó asustada.—Me he estado cambiando durante el espejo todo este tiempo, ¡debieron ver mis limones!
—¡Beth!—rodeé los ojos. Debía pensar en algo rápido ya que la nota era muy clara. Alguien venía por mi, o por nosotras,no lo sabía.—Bien, escúchame, ¿alguna vez te castigaron verdad?
—¿Castigarme?
—Si, ¿ te habían llevado a salón de
—Ah es verdad, nos llevan a la dirección que está en el último piso del edificio, sólo que no recuerdo bien que pasó.
—¿No recuerdas?
—Yo la verdad...—su expresión cambió a preocupación.—estoy tratando de recordar pero créeme que...
—Debemos escapar.—la interrumpí.—será mejor que nos vayamos de una vez.
—¿Escapar? No entiendo ni una mierda.
Recordé que unos de los baños tiene una ventanilla hacia el patio de enfrente, no donde estaba la fiesta. Puede que no fuera de mucha ayuda pero saldríamos de aquí.
Corrí hacia la puerta y le puse seguro. Mis manos temblaban, por alguna extraña razón no podía calmarme, sentía como la adrenalina recorría mi cuerpo y en cada segundo el temor de que las cosas salieran mal volvía. No podía dejar que sucediera de nuevo, lo que sea que había pasado, aún no sabía si yo me había vuelto loca o si alguien estaba cambiando mi destino pero algo era real. Las notas seguían llegando, era lo único que no había cambiado así que simplemente me quedaba confiar. Una parte de mi sentía que esa persona realmente quería ayudarme pero no entendía la razón.
—Abi...—Beth estaba asustada, mi comportamiento le resultaba extraño y estaba en todo su derecho de sentirse así,pero por más que le explicara no me entendería.—¡Alguien está tocando la puerta!
En ese momento retrocedí. Le había colocado el seguro pero, era eso nada más, bastaba con que alguien golpeara fuertemente la puerta varías veces para entrar. Debía reaccionar pero mis piernas se quedaron quietas, no se movían por más que quisiera y miles de sensaciones me recorrieron el cuerpo.
—¿Hay alguien dentro? Quiero ir al baño, por favor.—la voz de una chica resonó del otro lado. Mi amiga se acercó para quitar el seguro pero la detuve.
—No lo hagas.—sus ojos me miraron confundidos—vienen por nosotras.
—¿Quién? ¿Quiénes?
—Vámonos.—la tomé del brazo arrastrándola hasta el último baño donde estaba la ventana.
—¿Planeas escapar? Esta prohibido andar por ahí a estas horas.
—Tú siempre decías que querías acción en tu vida.
—Sí pero no de este tipo...—los golpes eran cada vez más recio. La voz gruesa de un hombre se escuchó:
"Parece que tiene seguro", le dijo a la chica que intentaba abrir la puerta,ella le respondió "no sé si están adentro, escuché sus voces pero después fue como si ya no estuvieran, quizá estén escapando"
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Steve
Teen Fiction"Es decir; si preguntarán ¿quien es el chico te llama la atención? Todas responderían que Bruce, el chico más popular y deseado. Pero yo...yo diría que Steven Clifford, quizás no sea popular ni sea jugador en el equipo de fútbol pero es por eso mism...