CAPÍTULO 57: ¿Y SI TE ABRAZO Y ME ABRAZAS?

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Narra Ross

Son las cuatro de la madrugada, no he podido dormir nada tras lo ocurrido con Lucas. Tengo muchas cosas que decirle, por las que pedir perdón y cosas que me gustaría, nos volvieran a unir.

Conocí a Lucas cuando apenas tenía unos cinco años, lo encontré solo en un parque, siempre estaba solo y nunca me quise acercar por si acaso, hasta que un día lo hice y me sorprendí. Estaba apagado y parecía que no quería amigos pero, cuando me dirigí hacia él recuerdo la sonrisa que hizo al ver que le estaba hablando; le brillaron los ojos y me contagió su sonrisa. Desde ese entonces jamás me separé de Lucas. 

Comíamos juntos, le cogía de la mano cuando éramos pequeños, le protegía, le mimaba, jugaba con el, era un hermano para mí, ese hermano varón que nunca tuve. Y a pesar de que cuando estábamos juntos todo eran risas, Lucas siempre llegaba triste, nunca supe el por qué y tampoco quise preguntarle. Al poco tiempo me enteré que su madre era prostituta, su padre un drogadicto y psicópata y su hermano mayor un puto violador. Tal vez no os suene lo del hermano pero sí, fueron momentos muy duros, Lucas los desprecia a todos, sobre todo a su hermano, por eso muy poca gente sabe de él y por eso apenas y se menciona. 

Lucas fue un error, su madre trabajando quedó embarazada de el, ni siquiera conoce a su padre biológico, se tuvo que conformar con el padre drogadicto de Alex, su hermano mayor, el cual no sabe que en verdad Lucas no es hijo suyo. Cuando nació Lucas todo iba bien, Alex le cogió mucho cariño, su padre trabajaba en un supermercado y aunque su madre era prostituta siempre quiso mucho más a su marido y a su familia que a su trabajo, eran felices.

Hasta que llegaron los cuatro años de Lucas, las cosas ya no funcionaban igual. Su padre fue despido del supermercado que trabajaba debido a una liquidación y no tenía los estudios suficientes como para acceder a otro trabajo, no encontraba nada, vivíamos en un pueblo bastante pequeño, y no tenían ningún recurso como para irse a la ciudad y buscar algo para empezar de nuevo ahí. Ninguno de sus padres tenía coche, vivían en una casa heredada por su madre tras la muerte de sus abuelos, y no era para nada acogedora.

Su madre comenzó a tener un cliente bastante regular y el cuál le pagaba bastante bien, al parecer era un masoquista pero eso a su madre no le importaba, ella quería cuanto antes el dinero y casi nunca estaba en casa debido a ese hombre. Al padre parecía darle igual, si se aburría de ver la televisión en casa cogía y se iba al bar a emborracharse hasta perder el conocimiento, y bueno pues ya sabéis que una cosa lleva a la otra, de ahí recayó a las drogas y todo se tornó de color negro. 

La madre casi nunca estaba en casa debido a ese hombre, el padre vagaba del bar a casa y de casa a la droga, tras eso tal vez el padre no se veía por allí por días; dejándose así caer a los efectos de la esquizofrenia y de los problemas psicológicos. Alex era doce años mayor que Lucas, así que cuando Lucas tenía cuatro años Alex tenía cerca de los dieciséis. Ambos pasaban mucho rato juntos y las cosas se tornaron feas, Alex ya no disfrutaba igual de la compañía de Lucas que antes, llevaba a chicas y chicos de edades distintas a casa. Lucas era demasiado pequeño como para entender por qué estaban ahí, o por qué Alex los traía a casa. 

Se oían golpes, gritos de dolor, gemidos, muebles chocando contra la pared fuertemente y la amenazas de Alex hacia aquellos individuos. Un día Lucas entró a la habitación sin saber lo que se esperaba dentro y maldice aquel día con todo su ser, maldice haber entrado, pues Alex tenía a un chico de su edad más o menos desnudo, amarrado a la cama, con un trapo en la boca y casi muerto. El chico estaba lleno de magulladuras, puñetazos, cardenales y sangre mientras que Alex lloraba desconsolado viendo el cuerpo casi inerte. Lucas no sabía que estaba pasando, no entendía por qué ese chico estaba así, por qué su hermano lloraba todos los días al traer a esas personas a casa. Alex miró a Lucas y empezó a llorar desconsolado, se acercó a el y se arrodilló con las manos con una poca sangre, las puso en las mejillas de Lucas y le susurró un "Lo siento"

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⏰ Última actualización: Jan 08, 2021 ⏰

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