Narradora:
Por la mañana, el frío y el cielo claro despertaron a la joven princesa, la cual estaba siendo observada con total normalidad por Sara su mucama personal.
—Mmm
—Señorita Amelia - habló bajo, no quería despertar a la chica de mala manera-
Abrió los ojos lentamente y visualizó a Sara sentada en su cama, cerca de sus pies.
—Mmm... Sara? - pestañeó lentamente aún siendo afectada por el sueño-
Al darse cuenta de que mujer la estaba mirando, se sobresaltó y levantó con rapidez que su cabeza chocó con la cabecera de la cama.
—T-Tenga cuidado por favor...
—Ouch...
Se frotó la cabeza y se sentó en su cama sintiendo un fuerte escalofrío en su espalda. Volteo y la ventana estaba abierta, frotó sus ojos, se dirigió a su cómoda, tomó su peine y cepilló su cabello mientras Sara hablaba de su horario.
—Mis clases de esgrima empezará en diez minutos?
—Si señorita Amelia
—Cuanto dormí?
—Son las diez en punto
Se levantó del asiento y fue al baño, lavó sus dientes, abrió su armario y sacó su equipo de esgrima.
—Rayos!
—Alteza su desayuno
—Después - dijo mientras salía corriendo de la habitación aún poniéndose su chaquetilla en el camino-
Leila por otro lado estaba en clases en la universidad, aunque en su descanso se dispuso a ir a la facultad de medicina para su encuentro con la chica, pero no la encontró.
—Ah, Ams no tiene clases hoy - habló un chico alto y moreno-
—Gracias - agradeció triste y se dirigió a la salida del edificio -
—Leila Turner?
Levantó su mirada y encontró a Mark a punto de pisar la entrada de la facultad, llevaba una chaqueta azul y su cabello muy bien peinado.
—Si?
—Soy yo, Mark! - habló animadamente -
El único recuerdo que tuvo de él le produjo celos al instante, fue pareja de baile de Amelia en la secundaria y según le había hablado Sistine, ahora ellos dos son muy buenos amigos, además de que la chica permite que Mark la llame por apodos lindos y algunos de pareja.
—Buscando a Ami?
—Eso no te incumbe - dijo amargada por su presencia -
—Oh vamos, desde que nos conocimos no dejas de comportarte así conmigo.
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Dulce Peligro
RomanceHabían obstáculos que impedían que ambas se amarán... El peligro era inminente y ella lo sabia, no quería que la lastimen. Mientras que la otra solo esperaba que su familia vea que lo que importaba no era el estatus o la sexualidad, sino, el vivo am...