Luz de Luna

Parte 16: Me tendrá.

_Dante: Gracias enana.

_Yo: Denada.

_Dante: Me dijiste que mañana tienes que hacer la compra -dijo levantándose un poco y apoyandose en sus codos-

_Yo: Si, pensaba ir hoy después de que vinieras, pero pasó todo esto.

_Dante: Así mejor, y mañana te acompaño yo ¿Sabes lo que tienes que comprar?

_Yo: Sí. Leche, cereales, fruta, zumo, agua, aceite, especias, carne, verdura, pescado. Un poco de todo, no hay nada. Llevo días comiendo fuera.

_Dante: ¿Te queda dinero?

_Yo: Sí, además ayer cuando fui a comer a la cafetería buscaban una camarera y pregunte por el puesto, pero se ha presentado mucha gente y dudo que me cojan a mí, que no tengo experiencia.

_Dante: No pasa nada, no busques con prisas. Te voy a pasar el dinero que te dije todos los meses. Sí o sí. Si no lo gastas lo ahorras. Además tienes que comprar más cosas. Y algo que me parece bueno es que tienes la pulsera puesta. Acuérdate de no quitártela nunca. Casian no sabes dónde estas si ese es tu miedo. El GPS solo se activa cuando pulsas la piedra y siempre se encarga de mirar los rastreadores María.

_Yo: Nunca me la he quitado.

_Dante: Muy bien -se volvió a acostar en mi cama-

_Yo: ¿Cómo se conocieron Casian y tú? Aquel día en el parque y en el lago parecía que no.

_Dante: No te diste cuenta, pero cuándo venías hacia mí, Casian me escribió un whatsapp para que actuara como si no nos conociéramos.

_Yo: No me di cuenta cuando cogió el teléfono.

_Dante: Ese era el objetivo -reimos-

_Yo: Mañana quiero volver al lago.

_Dante: Puedes ir. La última vez que fuiste estaba congelado. Ya no puede estarlo. El invierno se acerca, pero todavía no puede estar congelado -dijo levantándose de la cama-

_Yo: Sí. Me voy a dormir. Buenas noches.

_Dante: Buenas noches. ¿Quieres que cierre la puerta?

_Yo: Sí. Gracias.

_Dante: Descansa -dijo esto y cerró-

A los pocos minutos ya estaba durmiendo. Las horas pasaron y como se estaba haciendo costumbre yo me levantaba a las tres de la mañana por pesadillas. Me sentaba en la ventana un poco y después salí rumbo al salón. Y escuché a alguien hablando en este. Me senté en la escalera para no hacer ruido y cogí un palo para defenderme.

_?: ¿Por qué no vienes y se lo explicas tú? Es tu novia, o al menos lo era. La conoces mejor que yo.

Unos segundos pasaron y lo volví a escuchar.

_?: El plan al principio no era este Casian. La iba a convencer y llevarla conmigo, pero si no quiere no puedo llevarla contra su voluntad.

Fui bajando poco a poco ya que escuché que se movía al sillón.

_?: Casian, sé que es mi trabajo pero, no voy a secuestrarla. Si no quiere no la obligaré. Ya ha pasado suficiente.

En ese momento alguien me tocó el hombro y yo solo pude sostener bien el palo, girarme rápidamente y darle a la persona que sea que esté detrás mía.

Abro los ojos, que no se en que momento cerré y vi a Dante.

_Dante: Loca, casi me matas -dijo susurrando-

_Yo: Calla. Hay alguien abajo.

_Dante: Lo acabo de escuchar, métete en la habitación y cierra.

_Yo: No voy a irme a ningún lado, alguien está abajo y viene por mí.

_Dante: Lo se, por eso lo digo.

_Yo: No. Voy a bajar contigo.

_Dante: Todavía no. No sé quién es. Déjame escuchar un poco.

_?: No me puedes amenazar con eso. Ya no siento dolor por eso. Podrás hacerme lo que quieras pero ya no me dejaré manejar a tu antojo.

_Dante: Es María. 

_?2: Termina ya de hablar. No tengo todo el tiempo del mundo.

_Dante: Wael. Y supongo que está también Castiel con ellos. Hay que ser cuidadosos. Se les da bien el cuerpo a cuerpo. Y no tienen piedad para matar. Que sus caras no te engañen.

_Yo: Vamos.

_Dante: Si -dijo sacando el arma-

_Yo: ¿Por qué te traes el arma?

_Dante: Siempre salgo de la habitación con ella, sobretodo de noche. Acuérdame mañana a enseñarle a disparar las vas a necesitar para situaciones como esta.

_Yo: Hablamos de eso después.

_Dante: Ya. Ven detrás mía y procura que no te vean. Déjame mirar un momento -bajo un poco más, miró y me hizo una seña para que bajara-

Bajamos muy silenciosamente y Dante me hizo una seña para que me metiera detrás del sillón. Y eso hice. A los pocos segundo ya Dante le había dado un golpe a Wael y otro a Castiel y María se había ido a la otra punta de la habitación subiendo la escalera buscándome.

_Dante: No quiero estar peleando a esta hora de la mañana. ¿Qué les dijo Casian que hicieran?

_María: Sabe lo que pasó. Y quiere que vuelva. Sabe que estás con ella. Iba a venir él, pero cada día se está volviendo más loco y si venía él le iba a secuestrar. Vinimos nosotros para convencerla.

_Dante: ¿Y no podían venir a las cinco de la tarde como una persona normal?

_María: Nos dejo el tiempo justo para venir e ir. Tenemos que coger un avión en una hora. Y Hona tiene que estar en él.

_Dante: María, dile que aquí no estaba, que aquí solo estaba yo.

_María: Maya le consiguió rastrear el teléfono. Sabe que está aquí. Hemos hecho todo lo posible para que no la encuentre, creemos, pero Maya nos superó.

_Dante: ¿Desde cuando lo saben Wael y Castiel?

_María: Nos escucharon hablando cuando te ibas a ir. Quisieron ayudarnos antes de decírselo a Casian.

_Castiel: Si. Gracias por el puñetazo en la nariz. Creo que ahora tengo el tabique desviado.

_Wael: No hacía falta que nos pegaras.

_Yo: Déjenlo -dije saliendo detrás del sofá- Casian me quiere a mí. Me tendrá.

_Dante: Pero loca, Casian ya no está bien, necesita un psicólogo, tiene muchos problemas.

_Yo: Lo se, pero al fin y al cabo siempre será mi hermanastro.