❝ Mafia ❞ • t.k.

•- ５ -✿❞

2012

Intentar comprender cómo es que una madre puede odiar y maltratar tanto a un niño, solo por el hecho de haber nacido, es simplemente difícil de creer.

Jungkook quería la respuesta a esa incógnita, quería saber porque su madre no lo amaba. Deseaba tener ese amor de madre que tenía su amigo Jimin, que le prepara ricas galletas, le diera besitos en su frente, cocinar algo juntos, ir de compras juntos. Algo juntos.

Siempre fantasea con algo así cuando está fuera de casa, donde al menos puede ser algo feliz y todo le va mejor. Aprecia esas pocas horas en las que puede disfrutar de un rico batido, sin tener que soportar los gritos de su madre o su padre, perdiéndose en sus tristes pensamientos mientras su vista se fija en algún punto de la calle.

Pero un chico de quince, en realidad ya de dieciséis, como el no debería estar hundido en la depresión y perdiéndose de lo magnífica que es la vida adolescente. Debería al menos estar interesado en algún deporte o actividad cualquiera, pero no tiene tiempo para eso. Bueno quizás también debería al menos querer salir con alguna chica de su escuela, pero el capitán del equipo de béisbol parece más interesante, y guapo, aunque es todo un cobarde y ni se acerca a hablarle. Entonces quizás probar lo que es fumar, beber, tener sexo, o solo masturbarse pensando en ese guapo capitán... pero nada de eso le interesa por ahora. Solo está preocupado por terminar su delicioso batido antes de las siete para volver a casa y que no le griten.

Además, prefiere terminar primero bien la escuela, graduarse, tener un título, ser un profesionista y al fin largarse de ese horrible departamento en el que vive con sus padres. Era lo mínimo que se merecía un chico lindo y bueno como él, que está cansado de todo y necesita borrar la tristeza que reflejan sus ojos.

En la televisión se escucho:

Noticias de última hora: Hace unas semanas se reportó la desaparición de dos socios de las empresas tecnológicas de HYBE Tecnology, y hoy por la tarde sus cuerpos han sido encontrados; colgados dentro de un muelle abandonado a las afueras de la ciudad. Las víctimas muestran claras señales de maltrato y tortura extrema, y además de que a ambos les arrancaron la piel de sus caras.

Casi se olvida mencionar que Jungkook vive en ciudad realmente podrida, la gente realmente estaba enferma. ¿Quién demonios le arranca sus caras a las personas?

Las autoridades dicen que este es un claro trabajo de la mafia aquí en Asia, se especula sobre los aparentes sospechosos, pero hasta ahora no están seguros de nada. Hace algunos año Seúl era de las ciudades más seguras del país.

Que horrible es el mundo ahora.

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Desde la comodidad de su auto negro de lujo, a través de las ventanas oscuras, miraba las tranquilas calles de ese barrio mientras terminaba de limpiar su cuchillo con un pañuelo rojo -o en realidad quizás blanco- y lo acomodaba en su lugar dentro de un estuche.

Miro en el asiento a su lado, dos láminas de carne que tenían la apariencia de los dos hombres que mostraban en los noticieros, bien acomodados en una hielera que acaba de cerrar, para después quitarse sus guantes y su gabardina que estaba arruinada por las gotitas de sangre sobre ella. Estaba aburrido y cansado, necesitando un relajante baño y una copita de vino, su vista vaga por el auto hasta mirar hacia la ventana. El auto se estaciono en un semáforo rojo y solo por eso fue que se fijo en el chico dentro del local a su lado.

La mirada triste de ese chico captó tanto su atención, y por momentos esa tristeza se iba de sus ojos cuando volvía al batido que tenía entre sus manos. ¿Un simple batido lo hace feliz?