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Amicia se volvió una de sus zorras favoritas, era hermosa, muy sexy y sabía moverse. La conoció aquella noche hace tres años cuando Jungkook comenzó con ese comportamiento tan evasivo y agresivo hacía Taehyung.

Otro día de trabajo común, donde solo tenían que dar una visita a un posible rival o futuro problema que les hincharía las pelotas.

El sujeto estaba pasando su noche en un burdel, eligiendo a la chica más hermosa que él pudiera pagar. Kim estaba recién llegando junto a Jungkook a sus espaldas, cuando él decidió entrar a la zona de habitaciones.

No quería perder el tiempo, así que, ignorando los gritos del administrador del lugar, se dirigió a paso firme hasta las habitaciones y busco a su objetivo. Namjoon ya estaba en la puerta del sujeto con arma en mano y sus compañeros detrás.

— Abre —Ordenó.

Una patada después y Jungkook ya estaba siendo el primero en entrar.

— ¿Qué carajos?

No espero una orden, sabía que hacer. Su puño golpeó el rostro del sujeto mientras los demás entraban y lo sujetaban de sus brazos. La mujer que estaba por dar sus servicios solo retrocedió asustada intentando tapar su desnudez.

— No soy un hombre que suela presentarse con violencia, pero de verdad quiero volver pronto a mi cama —Taehyung hablo, tomando un lugar en un bonito sofá rojo.

— ¿Quién mierda eres? —Escupió sangre a los pies del mafioso.

— Tu competencia —Contestó con una sonrisa— Te he buscado aquí porque tengo prisa en hacer negocios contigo. Voy a pedirte, que de forma voluntaria, te retires del negocio y me entregues todo a mi.

—Él otro hombre se rió— ¿Y por qué haría eso?

— Porque te lo ordenó yo, pero claro, todo igual puede resolverse por las malas —De verdad no quería alargar el trabajo, solo tomaría lo que ya esta por pertenecerle y se iría contento a dormir. Es como si jugará un dominio y estuviera ganando territorio para su reino— Jungkook —Frenó los pasos del menor, quién estaba por hacer algo contra el otro sujeto, y le ordenó acercarse.

— ¿Sucede algo? —Pensó que el se haría cargo del sujeto.

— Hoy no harás eso, dejárselo a los chicos —Susurro para Jungkook mientras acaricia su mejilla y le sonríe levemente. Y Jungkook cayó a sus pies, asintió y se mantuvo a su lado.

Solo hizo una señal con su mano y los demás ya estaban golpeando al sujeto, jugando como gatos con su comida antes de tragarla.

Vio a la linda rubia echa bolita en una esquina de la habitación, se acerco a ella y le ofreció su mano.

— ¿Como te llamas?

— A-amicia —Ella contestó apenas. Kim le ofreció su abrigo y la saco de la habitación, Jungkook siguiéndolo de cerca como buen guardaespaldas.

La rubia era lista y astuta, una verdadera perra que aprovecha oportunidades y no teme meter sus manos al fuego. Al ver el mínimo interés de Taehyung sobre ella no tardo en insinuarse y ofrecerse, porque no tenía vergüenza en hacerlo, con tal de conseguir mejor partido.

La llevó fuera de la zona de habitaciones y tomaron una mesa.

Le invito solo un trago y ella ya estaba restregando su escote sobre su cara, sentándose en sus piernas y comiendole la boca frente a todos en el local. Y bueno, Taehyung pensó que no le vendría mal desahogarse un poco. Correspondió el beso, paseo sus manos por ese fino y lindo cuerpo femenino antes de decidir llevarla a un cuarto y darle su total atención.

Jungkook siendo espectador de todo aquello, miro a Kim a los ojos mientras este se adentraba a un cuarto con la rubia entre sus brazos. Después de que cerrara la puerta no dudo ni medio segundo en dirigirse a la habitación donde estaban matando a un hombre a golpes.

Le quito a Namjoon su navaja y ordenó a los demás alejarse.

— Kook, el jefe dijo que tu n-

— El jefe esta comiendo vagina ahora mismo, le importa una mierda si lo hago —Respondió tajante y rudamente a Namjoon.

Tras entender el mensaje, Namjoon prefirió salir y ordenar a los demás que también lo hicieran, dejando a Jungkook a solas con el otro sujeto ya moribundo.

No era la mejor forma de desahogar su dolor, pero le gustaba hacerlo. Corta la piel para dejar los músculos a la vista, no se contenía en su tortura, mientras más cosas se imaginaba de Kim Taehyung con aquella falsa rubia más cruel era con el hombre debajo suyo.

Su ropa se mancho, su cabello estaba salpicado con sangre, desde afuera se podían escuchar gritos dignos de una verdadera película de terror.

— ¿No deberías detenerlo? —Un compañero pregunto a Nam.

— En ese estado, le temo más a ese niño que al jefe.

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Hora y media después y Taehyung ya estaba saliendo de la otra habitación, extrañado al ver que Namjoon y los demás hacían vigilancia a la otra habitación.

— ¿Terminaron con él? —Preguntó al moreno más alto, quien lo miro con una clara expresión que delataba sus nervios.

— J-jefe... —Iba a responder, pero al instante la puerta que vigilaba se abrió dejando ver a un pelinegro bañado en sangre.

— Gracias —Sonrió a Namjoon y le devolví su navaja manchada con sangre, ignorando olímpicamente a su jefe que lo veía más que sorprendido— ¿El baño? —Preguntó tan fresco como lechuga.

— A-al fondo —Señalo, y vio al menor irse hacia esa dirección.

Los demás, apenas asomaron las cabezas se vieron horrorizados con la escena dentro del cuarto.

— Puta madre.

— Carajo...

— Pero que puto niño enfermo de mierda.

Incluso Taehyung sintió sus bolas en la garganta.




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Hasta ahora, creo que es el cap. más corto jajaja.

❝ Mafia ❞ • t.k.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora