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Pov.Narrador/ra

Ambos norteamericanos salieron de aquella habitación y bajaron a la sala donde les esperaban los demás, estos les miraron con una sonrisa aliviada al ver que había podido sacar al mexicano de su cuarto.

–sabia que llamar al weon de USA había sido una buena idea– comento Chile.

–¿Que? ¡Che boludo pero si he sido yo quien propuso la idea!– le reclamo el bicolor.

–tal vez... Pero yo fui quien lo llamo así que, técnicamente yo fui el que hizo todo– este formó una sonrisa de superioridad –asi que de nada–

Los otros tres que estaban viendo aquella "discusión" se empezaron a reír de lo tonta que era.

Luego de hablar por un rato, se despidieron, Chile y Argentina se fueron por su lado mientras que los otros tres partieron rumbo a la heladería, estos charlaban entre sí, México había olvidado su odio, aquello era como cuando intentaba reunir a ambas potencias para que se llevarán bien, soltó un suave suspiro, tal vez por aquellas salidas de amigos que habían hecho, ambos countrys habían comenzado a sentir cosas el uno por el otro.

Se lo pensó mejor mientras que soltaba una pequeña risita, no valía la pena tenerle rencor a Rusia, después de todo, él mismo le había hecho de cupido a ambas potencias sin notarlo.

Luego de tanto caminar por fin habían llegado a la heladería, entraron y se sentaron en una mesa vacía.

–ire a ordenar los helados– hablo el ruso –¿De que sabor quieren?–

–yo uno de fresa– dijo el americano con una sonrisa.

–¡Chocolate!– hablo México con emoción.

Rusia asintió con la cabeza para luego alejarse de ellos he ir a pedir los helados.

–¿Te estás divirtiendo mexy?– le pregunto con una gran sonrisa en su rostro –te vi bastante animado todo el camino–

México soltó un suspiro, vaya que el americano era bastante observador... Para algunas cosas porque al parecer con sus sentimientos era ciego o se hacía.

–si, me estoy divirtiendo mucho con ustedes USA– formó una sonrisa algo forsada la cual desánimo un poco al contrario.

–y... ¿Me vas a contar porque estás así? Les pregunte a Chile y Argentina pero no me quisieron decir nada–

–son solo cosas mías, no tienes que preocuparte por eso– el mexicano le regaló una sonrisa un tanto nerviosa.

–pero...–

– venga Usi, confía en mí, no es nada–

–bien, si tú lo dices– soltó un suspiro rendido.

No pasó mucho tiempo para que llegará el Ruso con sus copas de helado, este los dejo en la mesa para luego sentarse a un lado de su pareja, y así empezaron a comer.

México disfrutaba de su helado de chocolate, hace mucho y no comía uno, miró de reojo a las potencias quienes no paraban de coquetearse entre ellos, dándole de su helado al contrario o limpiándole el exceso de helado al otro... Se veían tan bien juntos.

México formó una sonrisa triste mientras miraba atentamente su helado, el pobre sentía que sobraba en aquel lugar.

Luego de que Rusia pagará por lo consumido estos salieron del la heladería y caminaron un rato por ahí, hablaban de cosas triviales, como cual era su película favorita o que genero de música preferían y esas cosas.

Pero ya se estaba volviendo muy tarde, así que Rusia y México se ofrecieron para acompañar al americano hasta su casa, a lo cual este obviamente acepto, llegaron a la casa del estadounidense, este se despidió de los contrarios con un beso en la mejilla para cada uno y luego entro a su casa.

Luego Rusia acompaño a México a su casa, ambos caminaban en silencio, el mexicano daba rápidas miradas de reojo a su compañero el cual tenía una cara algo ceria, cosa característica en él, ya llegando a su casa México detuvo su andar para mirar al más alto.

–Russ quiero pedirte un favor– soltó de la nada tomando al ruso por sorpresa.

–¿Que necesitas?–

–cuida bien de USA– le dedicó una sonrisa –sabes que le quiero como... Cómo a un hermano y si me entero de que tú o alguien le hace algo se las verán conmigo ¿Entendiste?– soltó como una pequeña amenaza.

Rusia sonrió con algo de burla ¿Que podría hacerle México a alguien como él? –claro Mex, lo cuidare– soltó aquellas palabras vacías las cuáles habían hecho dudar al mexicano.

–eso espero– y sin más, entro a su casa dejando afuera al euroasiático.

El ruso dió media vuelta y se marchó de aquel lugar mientras que en su rostro se formaba una sonrisa un tanto maliciosa, no podía parar de pensar en aquel plan que tenía en mente.

Continuará...

✨✨✨✨✨✨✨✨✨✨

Hello mi gente \:v/

Aquí reportándome con un nuevo capítulo que espero y hayan disfrutado, y si es así no olviden dejar su estrellita y comentar.

Pdt (que no tiene nada que ver con la historia): estoy en un pinchi grupo de rol y me ha tocado rolear con USA y México y yo tipo; " no mamen ta' super" pero.... A las morras del grupo no les gusta el MexUsa ni el Usamex porque es tóxico :'''^
Y yo tipo; "we no pertenezco aquí"
Toy' que lloro :'v
¡Yo quería MexUsa alv!

Bueno, sin más que decir, me despido.

Sayonara 🦊🦊🦊

💔Pecador 💔 (MexUsa) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora