Capítulo 25 "Final"

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Un segundo fué el que me distraje, solo porque la ví moverse. Si ella no se hubiera parado, si ella no... No importaba ya. Estaba muriendo entre mis brazos. Y yo no podía más que llorar. Yo no había llorado así desde hace tanto tiempo.

Hubo una mujer con la que en algún momento quise quedarme. Extrañamente, es el recuerdo más presente que tengo de cuando seguía con vida. Ella era hermosa, y fuerte. Ella era perfecta para mí. Pero tuve que morir. Yo la vigilaba y la protegía tanto como podía aún cuando ella no podía verme. Mi trabajo consiste en llevar muerte y destrucción a la Tierra, pero ella era mi excepción. La ví llorar y sufrir tanto por mí, que me sentía culpable. Pasaron los años, y ella volvió a enamorarse. Se casó con un buen hombre que al parecer la amaba. Y eso ne hizo feliz, sin embargo no estaba del todo satisfecho. Era egoísta, y quería que ella fuera feliz, pero no con él, sino conmigo.

En fin. Tuvieron hijos, y uno se llamó como yo me llamaba en vida: Derek.

Encejecieron juntos y murieron. Ambos fueron al Cielo, y jamás me enteré en donde Diana reencarnó. Solo la vez que la perdí lloré igual.que lo hago ahora. Así pasaron años y años, pero entonces, el día en que menos lo esperaba, ella apareció en la jaula de El Subterráneo. Era igual a como la recordaba, solo con algunos detalles diferentes. Como los tres arillos de plata que colgaban de su oreja derecha. Pero seguía igual de hermosa. En cuanto la identifiqué, no pude imaginarme el por qué estaba ahí, en el Infierno. Simplemente no quise darle más vueltas al asunto y la llevé arriba. Mencionó que su nombre ahora era Daniela, y sus ojos eran tan azules como el mar. Estaba allí y, además, era una Tucker.

Esa cercanía casi inmediata que surgió entre nosotros, algo más que amigos pero menos que amantes. Y estaba muriendo. Ella físicamente, yo en alma; en escencia. No quería perderla de nuevo, pero su vida se me iba como agua entre los dedos. Lloré y le pedí que no me dejara. "No es tu culpa" dijo, pero claro que lo era. ¿Cómo volver el tiempo? ¿Cómo regresar a aquel lejano pasado en donde la vida rebosaba en ambos, y nuestra única meta era estar junto al otro tanto como pudiésemos? Imposible. Ridículo.

Cuando sus ojos por fín se cerraron, un pedazo de mi alma se iba con ella. Mi Diana estaba lléndose de nuevo, y era culpa mía.

La encontraría de vuelta, eso lo juraba. Su alma no era más vieja que la mía, por lo cual no sería reciclada, y cabía la posibilidad de que me recordase.

-Gorahk... -. Escuché a Raúl a mi espalda. Suponía que los demás también estaban ahí, y que yo me vería ridículo o débil, pero era lo que menos me Importaba.

-¿Ganamos? -fué lo primero que salió de mi boca con voz rasposa y pesada.

-Lo que le pasó a Dani... no fué en vano. Ganamos, Gorahk -ahora fué Mark quien habló.

"Todo terminó" me dije, mientras la idea de 'matarme' rondaba por mi cabeza. Neide estaba conmigo, pero nada se comparaba a Daniela... a mi dulce Diana.

Entonces la idea de la reencarnación brillaba tentadora ante mí...

Entre el Cielo y el Infierno I: "Batalla de luces y sombras".Donde viven las historias. Descúbrelo ahora