Los sonidos del verano.

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Una hora después del inicio de la operación P.O-R.T...


Terushima había esperado pacientemente tres meses... Tres meses enteros para ver a su novio y compartir cuanto cariño pudiese en cinco días, ¡pero no! Su perfecta y romántica cita en la playa de repente se había convertido y se asemejaba a un paseo escolar.

Ni siquiera podía pasar el viaje teniendo la compañía de Osamu a su lado. Miró al puesto de atrás. Hinata había secuestrado a su novio e iban sentados juntos hablando bastante animados.

Inhaló profundo. Se suponía que esa ligera sonrisa, mientras platicaban debía de dedicársela a él... En su lugar, miró a su lado y se encontró con su compañero de asiento.

-Bueno, bueno Yuuji, mi amigo. Qué genial que podamos pasar este tiempo juntos para recuperar nuestra amistad... -Dijo Futakuchi, muy cómodo en el asiento y dedicándole una sarcástica y odiosa sonrisa.

-Karma, si este eres tú, por favor, déjame en paz... -susurró. 

-Aw, ¿Yuuji está triste porque le están acaparando a su novio? -dijo burlonamente frunciendo los labios- A nadie le gustan los novios posesivos y egoístas que no dejan a sus parejas tener amigos -le picó la mejilla.

"Lanzarlo por la ventana es homicidio, Yuuji. Lanzarlo por la ventana es homicidio. No lo hagas"Pensó, respirando profundamente "Recuerda que lo conoces de pequeño, recuerda que le hiciste esta cosa horrible cuando niños, recuerda que su mamá es agradable al menos..." 

Cuando el autobús se detuvo finalmente en su destino y los dejó a apenas pocos pasos de la playa, sintió que era el momento perfecto. Era sencillo, sólo mezclarse entre todos y tomar a Osamu de la mano para salir corriendo. 

De no ser porque todos se habían empeñado en rodearlo y caminar pegados a él como si fuesen sus malditos guardaespaldas.  

-¡Oigan, yo soy el novio! ¿No deberían de hacerme un espacio cerca de Osamu? -reclamó, yendo tras los demás. 

-Nop. Los chicos de Kansai están de moda, ¿no sabías? Hay que aprovechar para presumir. 

-¡Oye! ¡oye! ¡Osamu! -llamó Hinata, entusiasmado con una gran sonrisa y emoción- ¿¡Crees que podrías ayudarme con mis recepciones?! ¡Quiero recibir uno de esos saques con salto tipo puwanh! 

-Oh, tus recepciones son geniales, Shouyou. Claro que si -le revolvió ligeramente el cabello haciéndole encoger de hombros en una tierna sonrisa. 

Terushima casi se traga a sí mismo en aquel jadeo. A él nunca lo trataba con tanta ternura ni le brillaban así los ojos. (Sí lo hacía, pero pocas veces y le era más difícil notarlas en aquel estado de drama histérico). Lo que no sabía es que los ojos de Osamu brillaban así porque cada vez que veía a Hinata pensaba en mandarinas... 

-Pido el siguiente turno de estar con Miya -comentó Kageyama, alzando la mano- ...Tal vez logre averiguar cómo es la rutina de su hermano si lo interrogo lo suficiente... -Murmuró. 

-¡Después de Kageyama pido yo! -Exclamó Noya- Cangreburger tiene derecho a jugar con él más que todos ustedes. 

Una malévola idea brilló en el cerebro de Futakuchi haciéndole dibujar una sonrisa en sus labios. Lleno de emoción alzó los brazos e hizo que el grupo se detuviese de su marcha. 

-¡Osamu, mi amor! -Exclamó alegremente, antes de acercarse para tomarle las manos- Oye, ya que eres algo así como nuestro invitado especial  y todos te queremos tanto y queremos pasar tiempo contigo ¿¡No se siente como si tuvieses un montón de novios?!

CAJA DE SORPRESAS - TeruSamu. Haikyuu!!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora