Carta No. 1
México, 30 de enero
Querido Leonardo,
Soy Gibrán da Specchio, tu hermano menor. Te he buscado incansablemente por toda Europa, pero gracias a una vieja agenda de papá pude hacerme del teléfono de tu casa de Florencia. Marqué y me dijeron que la habías vendido y ahora vivías en París. Me dieron el número de Sofía, una chica muy linda y atenta que me dijo que te buscaría y me daría tu dirección en Francia.
Hace años nuestro padre se marchó de México y jamás lo volví a ver. Sospecho que se encuentra en Estados Unidos o Canadá, trabajando en la Corporación que fundó y tramando alguna de sus tantas empresas alquímicas.
Hermano, te escribo precisamente porque me une nuestro lazo de sangre y quisiera conocerte en persona, saber quién eres, qué haces de tu vida y entablar una relación contigo. He guardado suficiente dinero para viajar a Europa en marzo. ¿Qué dices, podemos encontrarnos? Si te parece bien, responde a mi postal y dime en que ciudad te encontrarás para comprar mi boleto de avión lo más pronto posible.
Te quiere,
Gibrán da Specchio
P.S. Perdona mi italiano, nuestro padre solo me enseñó lo básico y estoy estudiándolo por mi cuenta.
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Espejo Místico y lo que dejó una devastadora Guerra Mundial
FantasíaLeonardo trabaja de día sirviendo cafés en restaurantes, mientras que por la noche se entrega al amor y dibuja a sus amantes, en un afán de honrar a la belleza y al cuerpo humano, “la máquina más grandiosa jamás creada”, lo único que para él tiene v...
