𝐭𝐫𝐞𝐢𝐧𝐭𝐚 𝐲 𝐮𝐧𝐨.

4.1K 486 336
                                    

¿Cerca o lejos de la libertad?

───

Me miraba en aquel espejo detenidamente, era la primera vez en muchos años que me colocaba un vestido. Hoy el cuerpo de exploración tendría una cena, decidí simplemente cambiar un poco mi monotonía. Me veía algo viva, algo diferente. Deje mi cabello suelto, ya no está amarrándolo si no era cuando saliéramos de expedición. Al menos hoy tendríamos un día normal, un día en donde compartiríamos como escuadrón, incluso aunque faltaran personas en la mesa. Aún mera difícil de acoplarme a lo pequeño estaba mi escuadrón, pese a que hubiesen demasiados, me había acostumbrado a ese pequeño grupo. Era difícil salir a sentarme esa misma mesa en donde me sentaba con Reiner, Berthold y Annie a charlar, incluso aunque Annie y yo no habláramos, o a veces ella se sentara sola, era agradable estar a sus lados. No cabe decir que nos habían robado la paz, e incluso la confianza, pero más que nada, él cariño no se había ido, se había convertido en decepción, pero no era capaz de hacerles frente. Me miraba en aquel espejo algo entristecido, pues ellos no eran los únicos ausentes en la mesa. Me senté en el borde de la cama, lleve mis manos a mi rostro, tapándolo, frustrada.

Nunca nos preparamos para decir adiós, la ausencia de Marco aún nos azotaba, incluso la de Ymir, y ahora, la de Historia, todo en un fragmento de tiempo. Sus sillas estarían vacías, sin importar que alguien más les ocupase, ya me había acoplado a verles sus rostros cada mañana. Cada día cuando me levantaba de mal humor, me hacía sentir bien verles desayunar, verles animado para un nuevo día, pero de la noche a la mañana, todo se había esfumado. Continué acomodando mi traje, peinando nuevamente mi cabello ante algunos flequillos sueltos. Me levante del borde de la cama, sabía que los demás ya deberían de estar acomodándose para cenar, yo era la única que estaba aquí, dándome lata a mi mente una y otra vez. Respire hondo y salí de la habitación, caminando por aquel pasillo, donde estaba escuchando voces alborotadas. Todos debían estar charlando y pasando el rato, después de todo, nos lo merecíamos. Me asome, bajando aquellas escaleras, para ver el horizonte donde yacían aquellos compañeros míos comiendo, mientras que muchos se habían percatado de mi presencia. Sonrojada, baje la cabeza y camine en dirección a esa mesa.

-Te ves deslumbrante.-la voz de Armin se dirigió a mi, mientras que me senté a su lado aún con la cabeza baja.-Recuerdo que así te halagaron el primer día que llegaste.-comentó, mientras que alce la mirada ante visualizar como Mikasa frente a mi, me pasaba un plato.

-Ten, te lo estaba guardando.-me dijo ella, le sonreí y acepte el plato, sintiendo aquel grandioso olor llegar a mis fosas nasales.

-Huele bien. ¿No es así?-me preguntó Eren, quien yacía aún lado de Armin comiendo, yo le asentí.-¿Qué tienes?-me pregunto, al percatarse de cómo comía con lentitud.

-Nada.-le indiqué, comiendo vagamente, mientras que sentía sus miradas alrededor de mi, intentando descifrar que me sucedía.

-Puedes contarnos.-me indicó Mikasa, mirándome y esperando que respondiera, pero me quede en silencio, tan solo continué comiendo.-Ella me da una espina, no es mala, pero siento que no encajamos para nada bien.-giré mi mirada, observando cómo por la puerta se avecinaba la capitana Aster, quien miraba a su alrededor.

-Es bastante misteriosa.-murmuró Armin a mi lado, mirándola.-No lo sé, me intriga mucho su persona, también me intimida.-comentó él, y es que yo, a penas me daba cuenta que verdaderamente Levi no estaba.

-No tiene porque intimidarte, solo es una capitana.-le justifique, comiendo a su lado.

-Creo que tienen el mismo nivel de fuerza. La vi entrenar.-Eren se dirigió a Mikasa, quien no tardo en mirarle de manera seria.-De hecho, se parecen en la mirada tan fría, quizás por eso no encajan.-añadió Eren.

𝐁𝐄𝐘𝐎𝐍𝐃 ── 𝐒𝐍𝐊Donde viven las historias. Descúbrelo ahora