En lo que mi hogar se convirtió.
───
Mi cuerpo aún se movía el ritmo del caballo, y es que, frente a mi, estaban aquellos muros. No supe cómo reaccionar, era difícil tener una expresión, luego de unas horas, habíamos al fin llegado y el amanecer, nos acompañaba. La fría brisa estaba, y mi cabello aún permanecía amarrado, y mi cuerpo estaba estable, era como si una energía me recorriera y mantuviese despierta. Debíamos estar acatados al plan, habían dos entradas al muro María, la exterior y la del interior, así que, era tierra de titanes y debíamos exterminarles en cuanto antes. No obstante, todos estos soldados debían permanecer con su capucha puesta, era más fácil de engañar algún tipo de enemigo, para así, en cuanto quisiera describir quien era Eren, ya él habrá sellado las dos entradas. Si, teníamos enemigos y estábamos seguro de eso, por eso se ideó este plan, porque sabríamos que pese a todo, no estaríamos solos. Me eleve encima de mi caballo, y es que el comandante dio la clara orden de avanzar a la cima de los muros. Habrían líneas divididas, unos protegerían a los caballos, la mayoría, novatos y los más veteranos, estarían adentro para calmar el infierno que se desataría en cuanto los titanes supiesen de nuestra presencia, al igual que los enemigos.
Elevada en mi caballo, pude ver a la distancia a Levi, y como también estaba parado, al parecer ambos al ritmo del equipo de maniobras tridimensionales, nos levantamos a la vez en el aire. Mi cuerpo sintió la brisa, y en un instante, mis pies tocaron aquel muro. Me quede arrodillada un momento, con temor a levantar mi mirada y toparme con aquel pueblo, aquel distrito en el que crecí. Mis manos temblaban, y no podía sostener bien el mango de mis hojas. Veía las casas, estaban abandonas y la mayoría, convertida en añicos. El ambiente se veía frío, parecía un cementerio, y es que, quizás las almas retumbaban por él área. Me quede detenida, y es que desde aquí, podía ver mi casa, aquella en la que crecí. Un apretón me recorrió en el pecho, estaba intacta, pareció no haber sido víctima de los fragmentos rotos del muro. Me visualicé aquel día, saliendo de mi casa con prisa, enojada con mi madre ante su sobreprotección, si hubiese sabido que ese día sería el último, jamás le hubiese dicho cuanto le odiaba, la hubiese abrazado y hoy, estaría en paz. No dejaba de sentirme culpable, aquel peso estaba clavado en mi conciencia. Me sobresalte ante sentir un apretón en mi hombro, giré mi mirada y observé los azules ojos de Erwin mirándome.
-¿Cuál es?-me preguntó él, mirando detenidamente el horizonte, refiriéndose a donde era mi hogar.
-Es esa.-señalé, y es que, lo único que diferenciaba mi casa de las otras, es que había un árbol bastante grande de flores rosadas a su lado.-Está intacta.-le indique.
-Cuando todo termine, iremos allá.-me dijo, mirándome fijamente, a lo que asentí levemente.
-Ya están avanzando al portón exterior.-le avise a Erwin, viendo como varios soldados se dirigían allí, incluyendo a Eren y Mikasa, quienes debían estar al mandado de Levi.-No hay titanes alrededor, parece un desierto.-expresaba, mirando el horizonte y como sólo nosotros éramos los únicos que yacían en el lugar.
-Si, aquí hay algo raro, pero usualmente no me sorprende.-exclamó de manera neutral a mi lado. -Estoy seguro que habrá un ataque sorpresa.-me informó, a lo que asentí.
-Comandante.-ambos giramos la mirada, observando a Armin, quien se acercó a nosotros.-Creo que aquí ha habido alguien.-informó, dejándonos curiosos.-Encontré restos de una hoguera.-explicó.
-Reiner y Berthold.-musité, y él tan solo me miró sin asentir ante mi comentario, pero yo estaba segura de que eran ellos.
-Verifica él área, y de encontrar algo, ven a mi.-le ordeno Erwin, a lo que Armin no espero dos veces, y se fue.-Ve hacia el portón exterior, verifica que todo ande bien, y avisa que estén alerta.-me indicó.
ESTÁS LEYENDO
𝐁𝐄𝐘𝐎𝐍𝐃 ── 𝐒𝐍𝐊
Fanfic𝐁𝐄𝐘𝐎𝐍𝐃 𝐏𝐀𝐑𝐓 𝐎𝐍𝐄: ❝Afuera, la añorada libertad es solo un abismo que cubre la sangre de otros y la guerra que buscan contra su Isla. Kira, conjunto el escuadrón ciento cuatro descubrieran la verdad fuera de las murallas con un costo muy...