Capítulo 16) La edad de la inocencia

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Jhon se encontraba tan cerca que April poda sentir el calor de su piel, respiraban el mismo aire y sus miradas no se soltaban ni siquiera para pestañear. 

-¿Por qué con él?- se reitero al ve que ella no emitía respuesta. 

-Por que quería  ser una chica normal, quería que alguien me besara, ir con alguien al baile de bienvenida, no pedía mucho. Hay tres tipos de personas en este internado, a los que les cago mal, los que me temen y a los que no les gusto. Por fin alguien se fijaba en mi- 

-Esta bien y yo soy rubio- le contestó Jhon de manera sarcástica.

-¿Que?- 

-También es una mentira. Esta bien, es normal que haya gente que te tema, eres na mujer poderosa y fuerte, tampoco podemos caerle bien a todo el mundo, y nunca debería ser eso una aspiración. Pero no puedo aceptar que te mientas de esa manera cuando dices "no les gusto", estoy seguro de que hay allí afuera un montón de chicos enamorados de ti- 

-¿Cómo sabes eso?- 

-Por que de no ser así no entendería mis celos- 

April se quedó paralizada al escuchar aquellas palabras, su tono era condescendiente y consolador, lo cual la hizo pensar que solo estaba diciendo todas aquellas cosas por que ella se sentía mal e indefensa. Los ojos negros  de Jhon ligeramente rasgados la miraban con amor, pero ella se resigno al pensar que era simplemente cariño. 

Jhon se sentó a su lado y volvió a respirar al ver que ella no iba a cuestionar su anterior comentario, por el contrario, se mostró tranquila y a gusto. April se acurrucó en su pecho sin pedir permiso y cerró los ojos buscando descansar de la pesadilla que vivía hace mas de un mes. Saber lo que Frank era la hacia sentir al borde del abismo, a un paso de caer constantemente. Tenía muy claro que era cuestión de tiempo para que mostrase su verdadera personalidad al mundo y aquel trocito del mundo en el que se encontraban se volviera un completo caos. 

Cuando él se dio cuenta que por fin estaba dormida la contemplo aliviado, tenerla a su lado le permitía respirar, y a pesar de no haber visto el problema a tiempo, había llegado justo para evitar mayores perjuicios. La abrazó con fuerza y cuido de su sueño mientras intentaba elaborar un plan estratégico para su acción en los próximos días. No sabia si denunciar era la opción correcta ya que podría asustar  a Frank alejándolo de la zona en la que podía ser capturado fácilmente, o esperar a encontrarlo el mismo y llevarlo a Dromania para que sea juzgado bajo sus leyes, donde tendría realmente su merecido. 

De a ratos April se aferraba a su camiseta y balbuceaba palabras incomprensibles. Estaba teniendo pesadillas y seria raro si no las tuviera. 

En su sueño un hombre encapuchado la perseguía por el bosque, mientras ella corría desesperadamente vistiendo un típico e incomodo atuendo de sus días en el palacio. El largo y formal vestido se enganchaba en las ramas y raíces del bosque entorpeciendo su huida, los tacones de le hundían en el fango y el hombre encapuchado se acercaba cada ves mas acechándola. 

-Te amo- dijo Jhon en un susurro al verla tan conmocionada por su mal sueño. 

En su sueño las nubes se despejaron dejando al sol brillar a pleno, el hombre encapuchado por fin la alcanzaba, pero cuando quitaba su capucha era Jhon quien estaba tras de ella con una gran y dulce sonrisa, un gesto que April había visto muy pocas veces, ante este desenlace su pulso desacelero y pudo dormir tranquila el resto de la noche. 

Una semana mas tarde el ambiente del colegio había cambiado rotundamente, el aire se había vuelto pesado de respirar , y a pesar de que la primavera se avecinaba y los días de sol eran cada vez mas frecuentes todo parecía la calma que precede a la tormenta. Jhon había denunciado a Frank y una cuadrilla de policías lo buscaba por el bosque. Mientras tanto el director no había aparecido, algunos alumnos que despertaban extremadamente temprano lo veían entrar a su oficina por la mañana, pero solo salía pasado el toque de queda. April no había visto a la asustada chica de cabellos rojos, y eso la inquietaba mas de lo normal, tanto que su nuevo pasatiempos era mirar anuarios buscando encontrar aquel desmejorado rostro en alguno. Era mucho mejor esconderse en la biblioteca que soportar las escudriñantes miradas en el comedor o los pasillos, incluso había dejado de asistir a clase por la horrible sensación que le producía estar cerca de las personas. Todos los alumnos tenían una especia de obsesión con Frank, algunos lo deseaban físicamente, otros lo admiraban por su excelente destreza en deportes acuáticos. En conclusión no había nadie mas horroroso en toda la institución que quien rompiera con su aura de chico perfecto, habían acusado a April de envidia, celos y de ser una chica resentida que no había conseguido su amor y había tomado represalias. La peor parte, Alexia utilizaba toda esa deshonrosa situación para hacerle daño. La noche que los policías habían llegado a interrogar a todas, se puso de pie en el centro del comedor y comunico a todo el alumnado que April mantenía una relación secreta con Frank, alego que la denuncia no era mas que resentimiento de su parte por que Frank no podía estar con una niña tan inmadura y violenta. Falacias que dolían mas de lo que parecía. 

La Princesa de HieloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora