[EDITANDO] 3 HISTORIAS - [COMPLETA] ✓

17

La misa estaba por comenzar, por lo que me senté en mi respectivo lugar, después de recibir a tanta gente.

Amanda se encontraba a mi lado, apoyándome como siempre lo ha hecho.

El padre comenzó a decir su discurso.

Volteé hacia atrás y pude ver a mis amigos al fondo, y a Travis con ellos, mirándome.

En este tiempo, no nos dirigimos palabra alguna, él no se acercó a mí, al igual que yo no me acerqué a él.

No podía hablarle.

No podía acercarme a él sin llorar como loca.

No podía derrumbarme frente a él, simplemente no podía.

Miré a Amanda y ella me sonrió un poco, estaba muy agradecida por haber venido, sin ella, probablemente habría caído en la locura.

Miré fijamente hacia una esquina de la capilla y recordé lo que sucedió en el hospital.

Tras las palabras del doctor, salí de esa sala encontrándome con una Amanda preocupada y triste.

Yo solo la abracé y ella inmediatamente entendió lo que sucedía.

-Ella murió – dije llorando

-Liv...

-Ella se fue y... jamás volveré a verla

-Ella está en un lugar mejor

-Ella... Yo... La extraño tanto...

-Liv, mírame – dijo tomando mi rostro entre sus manos – Saldrás de esto y yo te ayudaré, jamás estarás sola, siempre estaré a tu lado pase lo que pase

Yo asentí y volvió a abrazarme, de verdad necesitaba ese gran abrazo.

La voz del padre me hizo regresar a la realidad, todos me miraban esperando algo de mí, por lo que miré a Amanda sin entender.

-Quieren que digas algo – me dijo ella y yo asentí

Me puse de pie y caminé hacia en frente, frente a un micrófono.

No había notado a toda la gente que vino al funeral, al parecer ella si era muy querida por todos, y esto lo demostraba, además de toda la ayuda que recibí cuando ella necesitaba dinero para el tratamiento.

A lo lejos divisé a mi padre junto con su nueva esposa, ambos estaban sentados mirándome con una mirada indescifrable

Eso me dio tanta rabia.

-Bueno – carraspeé un poco – No estoy acostumbrada a hablar en público – dije y algunos rieron un poco – Pero algo que me enseñó mi madre es ser fuerte, siempre levantar la cabeza en alto y hacer o decir las cosas como son – sonreí un poco – Ella fue fuerte hasta el final de sus días, y eso admiré de ella, porque a pesar de todas las desgracias que vivió, sé que fue feliz, su mirada lo demostraba, a diario me veía con unos ojos tan hermosos y una mirada tan... deslumbrante que, me llenaba de felicidad – sonreí nostálgica – Muchos quizá no saben toda la historia y otros quizá se enteraron de casualidad, pero mi madre tuvo una perdida al igual que yo, mi hermana Malory falleció cuando tenía tan solo 13 años, y eso le afectó tanto, quizá algunos no sabían que tenía hijas, pero la verdad es que ella no pudo con tanto sufrimiento, y sinceramente, estuvo con una persona que no le ayudó en lo absoluto – miré a mi padre, quien solo se acomodó en su asiento algo incomodo por la situación – Y eso la abrumó tanto que tuvo que tomar una difícil decisión, ella se fue de la casa y eso no me afectó tanto, sinceramente ella dio todo de si misma para que yo sobreviviera a la perdida, pero creo que nadie entendió su sufrimiento que fue juzgada por tanta gente, siempre pensaron mal de ella, los años pasaron y ella seguía sin volver, ahí supe que realmente se había ido para toda la vida, 6 años pasaron tras su difícil decisión, pero una noticia llegó a mí, debía pasar las vacaciones de verano con ella y eso me encantaba, estaba contenta por eso, realmente deseaba verla de nuevo – logré divisar a Samuel, el taxista entre la gente – Una persona me dijo lo increíble que era ella y eso me dio grandes expectativas sobre ella – él sonrió – De alguna forma estaba orgullosa de su gran personalidad y su gran valentía para lograr crear esto que fue – mordí mi labio nerviosa – Ella siempre fue una heroína, no como los cómics, claro, ella era mejor que eso, era mejor que cualquier superhéroe, ella era mi madre, ella sigue siendo mi madre y ahora, está en un lugar mejor, junto a mi hermana Malory, siendo bellos ángeles que permanecerán en nuestros corazones para siempre

Al terminar todos aplaudieron sonrientes, sabía que les había gustado mi discurso que realmente no estaba planeado, todo salió de mi corazón.

La ceremonia continuó, más gente subió al estrado para decir algunas palabras.

Samuel era el siguiente, y con ayuda del padre, logró subir y acomodar su traje.

-Cuando ella llegó al pueblo, estaba algo asustada, en su mirada logré ver miedo y tristeza – miró sus manos – Ella se abrió conmigo y dijo que era la primera vez que hacía esto, que viajaba así y que estaba asustada porque dejó todo atrás – me miró – Ella me dijo que estaba arrepentida por lo que hizo y yo realmente no sabía que era eso, ella nunca lo dijo, solo dijo unas bellas palabras que nunca se me olvidarán "Ella siempre será mi bello sol" – sonrió, lo que hizo que yo sonriera – Yo la ayudé mucho cuando estuvo aquí, le conseguí la casa y la ayudé a trabajar en todos lados, ella era muy amable que no tardó en tener gente a su alrededor, a ella le gustaba ayudar mucho a la gente, por lo que entró como voluntaria al hospital y se ganó el corazón de cada persona del pueblo, era increíble lo que una persona puede hacer con tan solo una mirada y una gran sonrisa, al llegar esta muchacha – me señaló y algunos me miraron – La vi a ella e inmediatamente supe a que se refería hace años, ella había dejado atrás a su hija, su niña, su sol – sonrió – Olivia es la viva imagen de su madre y eso no se puede negar, son exactamente iguales, en físico tanto como en personalidad, lo que no me extrañó que consiguiera tanta ayuda cuando más lo necesitaba, siendo una completa extraña, también cautivó muchos corazones humildes y amorosos que buscaban la felicidad en una sola persona, en Olivia, la hermosa hija de Courtney, el bello ángel que ahora cuidará de cada uno de ustedes, sus amigos, sus vecinos, su familia

Al bajar del estrado todos nos pusimos de pie y poco a poco comenzaban a acercarse para decirle un último adiós antes de salir de la capilla.

Me acerqué junto a Amanda y la miré, miré a mi madre.

Estaba tan hermosa con su vestido floreado puesto, el mismo vestido que traía cuando yo llegué al pueblo.

Alguien le había hecho una linda peluca, la cual traía puesta y se veía exactamente igual a la primera vez que la vi en este lugar.

Se veía tan preciosa.

Toqué el cristal de la caja y una lagrima bajó por mi rostro.

-Adiós, mamá...

Retrocedí y caminé entre la gente, topándome frente a frente con Travis.

-Liv...

-Yo – intenté hablar, pero las palabras no salían de mi boca, realmente no tenía nada más que decir – Me tengo que ir – dije y él asintió algo triste, lo podía ver en su rostro – Adiós, Travis

-Adiós, Liv

Caminé por su lado y salí de esa asfixiante capilla.

Miré hacia el cielo, el cual estaba nublado y sonreí, sabía que ella había provocado esto, era su clima preferido de toda la vida y eso me ponía tan contenta que había olvidado toda la tristeza y agonía que me mataba.

-Vamos, Liv – dijo Amanda y asentí

Me subí al auto y antes de partir miré a mi lado.

Travis estaba mirándome en la entrada de la gran capilla, esta era la última vez que lo vería, de eso estaba segura.

Este era la última vez que nos veríamos.

Nuestro último verano.

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Esta segunda historia está llegando a su fin.

Espero que les vaya gustando<3

Gracias por leer<3