Siempre a tu lado || Luke Patterson

Capítulo 9

Luke

Al despertar, la primer cosa de la que me di cuenta es que Maeve no estaba. Supuse que se encontraba con Alex en la casa, pero cuando me encontraba allí, no había ningún rastro de mí mejor amiga.

—¿Donde está Maeve? —le pregunté a Alex, quien se encontraba tomando una taza de café.

—Buenos días a ti también Luke. —respondio con sarcasmo.

—Alex...—lo mire con mala cara.

—Al parecer alguien despertó de mal humor eh. —me quedé en silencio esperado a que respondiera mí pregunta. Y Alex soltó un bufido.— Fue a buscar un trabajo.

—¿Que?

—Lo que acabas de oír. —le dio otro sorbo a su taza de café.

—¿Maeve buscando trabajo? —repeti, tenía algunos problemas para procesar esa información. Definitivamente no esperaba eso.— ¿Porque?

—Eh...cosas de chica independiente. Ya sabes. uhm...¿Quieres café?—me cambio de tema.

—Uhm...claro.—le acepte la taza de café.

Me apoye contra la encimera y le di un primer sorbo a mí café.

¿Porque razón Maeve buscaría trabajo?

Después de nuestra última presentación no hemos intercambiado demasiadas palabras, al principio había creído que estaba molesta conmigo hasta el día de ayer claro.

Tan solo recuerdo lo que sucedió anoche y una sensación extraña se adueña de mí pecho. Antes de irnos a dormir, Maeve me pidió abrazarla y como era de esperarse no pude negarme.

Jamás le negaba algo a mí mejor amiga.

De todas formas su petición no era algo extraño, pero tampoco era algo habitual. Solo ocurría en momentos muy específicos, por ejemplo, cuando Maeve tuvo su primera pelea con sus padres acerca de sunset curve o cuando nos enteramos que había una gran posibilidad de que tuviera que mudarme a otro estado. Si...eran días complicados, pero ¿y ahora? ¿Que era lo que le estaba afectando a mí castaña?

No estoy seguro si me preocupa eso o el hecho de que esta vez, ese abrazo se sintió... distinto.

—Tu enamoramiento cada vez se hace más evidente...—hablo Alex a mí lado, sacándome de mis pensamientos.

—¿De que hablas? —balbuceé.— ¡No estoy enamorado de Maeve!

—Nunca mencioné a Maeve. —me miró con una sonrisa burlona.

Oh mierda.

—L-Lo sé es solo que–

—¿Cuando tienes pensado decírselo a Maeve? —inquirio mí amigo.

Estaba a punto de responderle a Alex cuando otra persona se adentro a la habitación. Provocando que el rubio y yo casi nos diera un paro cardíaco.

—¿Que van a decirle a Maeve? —se apoyo en el marco de la puerta.

—¡Mierda, Reggie! —chille mientras me llevaba una mano al pecho.

—¿Acaso no sabes tocar la puerta antes de entrar?

—Uhm...¿Lo siento?

Definitivamente no se arrepentía de nada.

—Como sea. —Alex bufo.— ¿Quieres café?

—No, gracias. —Reggie se acercó hacía nosotros.— ¿Que es lo que van a decirle a Maeve?

—Nada, nada. —Quise contestar tajante para que se olvidarán del tema.