Capítulo 7

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"Este asunto no debería decirse a nadie más fuera de los Doce Maestros de Cumbre" Liu Qingge destruyó el silencio, obviando la incómoda situación por la cual la Secta estaba pasando.

Miraban a Liu Qingge, aunque éste se giró a mirar únicamente a Shen Qingqiu, le miraba con reto 'sé consciente de tu posición'.

Como la secta número uno, no podían permitir que la información acerca de la peor debilidad de uno de los doce Maestros de Cumbre, y con ello de la Secta, naturalmente era algo implícito que la información quedaría únicamente en las personas más importantes de ésta.

Yue Qingyuan seguía preocupado y preguntó "Qingqiu, ¿sentirás que la carga de un Maestro de Cumbre será demasiado pesada?"

¿Quería acaso expulsarlo de la Cumbre? Liu Qingge entendía su preocupación y, anteriormente, había estado a su lado, completamente de acuerdo de que el Líder de Secta se tomase en serio su puesto y expulsase a la terrible escoria que acechaba las Cumbres, pero ahora le parecía algo... Prudente.

Sí antes había estado de acuerdo era por puro odio, pero ahora estaba de acuerdo porque sí le preocupaba la situación.

Shen Qingqiu podría morir de no tener su energía espiritual en los momentos más críticos.

"Hermano Mayor, Líder de Secta, no tienes que preocuparte por mí. No me consumiré hasta ese punto". Shen Qingqiu sonrió, luego continúo: "Ahora mismo puedo mejorar y cultivarme constantemente, incluso si el veneno todavía está allí. Estoy muy satisfecho."

Liu Qingge no estaba de acuerdo. Después de todo, ¿en esta situación Shen Qingqiu no se levantaría en contra de Yue Qingyuan?, sin embargo, los ojos que miraban atentos a Shen Qingqiu también fueron conscientes de esto: en verdad no albergaba ningún mal sentimiento sobre Yue Qingyuan.

Entonces lo dejo ser.

Tras hablar sobre el problema de la invasión demoniaca (conversación en la que Liu Qingge no participo en gran medida), el hermano marcial Mu Qingfang y el líder de secta Yue Qingyuan fueron los primeros en marcharse.

El primero se fue pensando en una forma de resolver el veneno, mientras que el último tenía una extraña expresión de enojo y estaba preparando un plan a gran escala para que el Reino Humano reprimiera a los demonios.

La expresión de Shen Qingqiu al verlos alejarse fue divertida, sus ojos chispeaban con calidez y sonreía como si estuviese realmente feliz.

Liu Qingge se permitió embelesarse de esa expresión, que parecía tan pura y carente de todo el espíritu resentido que tenía Shen Qingqiu anteriormente.

Qué extraño era eso, ver a Shen Qingqiu en la casa de bambú, era inesperado, verlo con una expresión como si añorase lo familiar fue incluso más impensable, pero eso mismo le generó dudas.

El estado de ánimo feliz de Shen Qingqiu no duro mucho, Liu Qingge vació de un trago su té, ya enfriado durante mucho tiempo, diciendo a la ligera: "Si no fuera porque no tienes qi fantasmal en tu cuerpo, definitivamente sospecharía que estas poseído"

Dejando atrás estas palabras, sonaba como si no se llevaran bien, y es que efectivamente no lo hacían. Eran como el agua y el aceite, los ideales de uno eran diferentes a los del otro, sus personalidades eran diferentes, sus creencias lo eran, ellos naturalmente se llevarían mal porque eran realmente diferentes, no del tipo complementario, sino destructivo.

Shen Qingqiu se rio sin palabras.

Liu Qingge tosió un poco, y continúo: "Salvarme en la Cueva Ling Xi ya fue increíble. En cuanto al asunto del ataque del Reino Demoniaco, casi te matan salvando a un discípulo sin nombre" un discípulo que Yue Qingyuan había mencionado, odiabas ". Sufrir daño por un veneno fuerte y bloquear tu poder espiritual debería haberte enojado, pero eres indiferente. Hacer estas cosas no es extraño, excepto que eres tú quien las ha hecho. No tiene sentido"

Por lo cual, escoria, debes aclarar el asunto.

Liu Qingge esperaba que aclarase el asunto, dale a este venerable Maestro de Cumbre y espada un poco de iluminación para comprender el cambio que se suscitó en ti, porque sigues siendo una escoria, pero parecer ser un poco menos escoria que antes.

En lugar de darle una respuesta concisa llamó a ese discípulo suyo, Ming Fang, para que volviese a servir su té.

Entonces se echó hacia atrás sonriendo: "¿Sin nombre? Eso es solo por ahora. Mira, Luo Bingue te sorprenderá"

Liu Qingge estaba un poco perdido hasta que reconoció el nombre, ¿Después de todo lo que dijo recién te enfocaste en el 'sin nombre' de tu discípulo?, estaba bromeando, ¿verdad?

"¿Es ese joven?" preguntó adusto "Su base de cultivación es bastante excelente. Pero alguien con este tipo de buena calificación es elegido por las grandes sectas por cientos, si no miles, cada año. No hay uno que se destaque entre los demás hasta el final"

Quizás sonó un poco a menosprecio, pero es que le estaba hablando de algo realmente importante (¡Una posesión demoniaca que es imposible de ver a través del qi! Maldita sea, desconfiaba de él y se lo decía, pero él estaba hablando de su discípulo).

Shen Qingqiu volvió a hablar "Créame, es completamente diferente. Me atrevo a decir que Luo Bingue definitivamente tendrá grandes logros en el futuro. Espero que como Hermano Marcial lo guíe si tiene la oportunidad en el futuro. No es en absoluto un oficio que te hará perder dinero"

El Shen Qingqiu del pasado no tenía palabras amables para nadie y era tan frío como un témpano de hielo cubierto de ennegrecido rencor y podredumbre. Cada vez que abría la boca se mostraba culto, sí, pero también amargamente envidioso.

Su habla y redacción coincidía como en poesía, cuidadosa y pulcra.

Liu Qingge le miró por un largo momento, Shen Qingqiu, celoso y resentido del poder de otros, sintiendo que nadie era merecedor de éste excepto él mismo, esa misma escoria entre las escorias, estaba alabando a un discípulo, pidiéndole que lo cuidara y enseñara.

Sin embargo, ahora todo tipo de palabras vernáculas se escapan de vez en cuando, no sólo eso, sino que también le decía de un futuro, que aún no había rasgos de poder acontecer, con tal orgullo. Depositando toda su fe en un discípulo sin renombre que apenas se había ganado el vistazo de unos cuantos discípulos menores por haber ganado contra un demonio.

Entonces era cierto, no sólo era un discípulo querido por Shen Qingqiu, sino que también... ¿ese discípulo era la razón por la cual la escoria había cambiado?

No pudo escuchar nada más a partir de esos pensamientos, por lo cual sólo levantó sus mangas con el chasquido de la tela y se fue.

Sólo había ido a la casa de bambú por una ciega preocupación que le dejó Shen Qingqiu al percatarse de cómo éste lo había salvado, fue porque le debía algo y porque no confiaba en aquel Shen Qingqiu que se presentaba ante sus ojos como una persona diferente y completamente nueva.

Fue obligado a presenciar la preocupación de los otros Hermanos Marciales, y de la misma forma presenció palabras amables y dulces para ellos y con un discípulo.

Su pecho se sentía congestionado hasta el punto de que parecía querer escupir un tosido de sangre.

¡Aún sí la escoria de Shen Qingqiu había sido cegado por ese mocoso apestoso, él no lo guiaría por nada del mundo!

La mejor de las escoriasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora